✿FIFTEEN✿

73 10 6
                                    

Ashley

Me había quedado dormida tan profundamente que ni siquiera el vibrador de la alarma de mi teléfono me hizo moverme de mi posición, pero cuando la típica música de alarma comenzó a sonar, me hizo abrir los ojos enojada mientras la música seguía sonando.

¡Olvide apagarla ayer por la noche!, y ahora debía sufrir por no haberlo hecho, y claro que era el peor castigo, ya que era levantarme temprano el día de mi cumpleaños.

Frustrada conmigo misma apague mi alarma y me voltee del lado contrario a la ventana dispuesta a dormir un poco más.

Agradecía tanto a la vida que mi cumpleaños fuera un día Sábado.

Mis párpados pesaban más que hace unos segundos atrás por lo que me avisaba que finalmente me podría dormir nuevamente, pero el sonido de la puerta me hizo abrir nuevamente mis ojos.

El rechino de la cama y que sentía un peso más que el mío, me hizo percatarme de que alguien se había subido arriba de mi cama, así que no me quedo otra opción que voltear hacia donde sentía el peso.

Sonreí feliz, mi mejor amigo estaba aquí sonriéndome mientras sus ojos estaban en mi, me separé de las cobijas y pude notar a mi madre en la puerta, pero no estaba sola, la acompañaba Alissa, la hermana de Conan, y la madre de Conan, mi mamá y la de Conan llevaban un pequeño pastel casero, Alissa una bolsa con un regalo y Conan llevaba una caja que dejó entre mis cobijas.

- ¡Feliz cumpleaños Crash! - dijo refiriéndose al sobrenombre que hace años el me había puesto.

- Gracias - dije mientras lo abrazaba - Eres tan tierno

- Solo contigo - dijo sonriendo y mi madre y su madre iban hacia mi abrazándome.

- Ten - me dijo la madre de Conan dándome un pequeño anillo de plata.

- Es hermoso - le dije sonriendo, en el centro estaba tallado algo en Japonés

- Son símbolos antiguos - hablo Alissa - ten, espero que te guste - dijo dándome la bolsa de regalo

- No te hubieras molestado - le sonreí - gracias

- Espero te guste - dijo mi madre dándome una caja de regalo, le sonreí y la abrace.

- Te amo - dije

Después de unos minutos en dónde todos me felicitaban y me decían cosas lindas por cumplir 17 años, mi madre, la de Conan y Alissa salieron de mi habitación, así que me quedé sola con Conan.

- Te traje esto - me dijo dándome una caja de regalo

- Gracias - dije - eres el mejor

- Pero ábrelo - sonrió

Lo mire y abrí la caja sin cuidado, quería ver lo que Conan había traído para mí.

Sonreí al ver que era una sudadera negra, pero lo que más me gustó fue que era pintada a mano por Conan, el tenía tantas cualidades y el arte era su primer cualidad.

- Me encanta - dije emocionada mientras lo comenzaba a abrazar.

- Sabes que te amo Ash - me dijo

- Lo se - sonreí - yo también te amo, eres el mejor amigo que cualquiera en esta vida quisiera tener.

Después de eso, ambos nos pusimos a platicar acerca de todo lo que íbamos a hacer hoy y mañana.

- No puedo creer que ya tengamos 17 años - me dijo Conan suspirando.

- es una mierda total - dije mientras lo miraba - me da miedo crecer - confesé.

Y claro que lo era una total basura, ya que recordaba que hacía poco tiempo sólo éramos unos niños jugando en el jardín trasero de nuestras casas, divirtiendonos en el barro, o trepandonos a algún árbol y terminar en el suelo  o simplemente siendo un dolor de cabeza para nuestros padres, una punzada en mi pecho me regresó a la realidad, ahora la presión de crecer y madurar nos asfixiaba.

HEATHER© C.G.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora