«Conocerte fue descubrir un género musical diferente al que suelo escuchar, pero que al final me terminó gustando.»
La vida de Andy está rodeada de decisiones. Jugar verdad o reto, declararse o no, el casillero tres o el cuatro, ser honesto con sus...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
No había forma de cagarla más de la que ya la he cagado.
Eso pensé esta mañana cuando salí de casa.
Y, ¿adivinen qué pasó?
Sí, la cagué.
Pero no de la forma en la que creen, pueden respirar tranquilamente, ¿siguen vivos? Por favor díganme que siguen vivos, no quiero ser responsable de alguna muerte, soy demasiado joven y baboso para ir a prisión, el color del uniforme del reclusorio no es para mí me hace ver feo y, además, no aguantaría ni un día en la cárcel, ni siquiera soy capaz de ver "Titanic" sin llorar, ¿cómo se supone que viviré tras las rejas? Prefiero matarme, o sea, lanzarme de un edificio será doloroso, pero es un dolor que estoy dispuesto a pasar, es eso o estar preparado para ser golpeado todos los días por los chicos de la cárcel. De solo pensarlo me tiembla la cola.
Aunque, creo que serían ellos los que no me aguantarían, seguro me dejan en libertad a las dos horas por insoportable mamón que no deja de llorar y que no deja de preguntarles por su signo. Sí, eso es lo más seguro.
Volviendo al punto, la cagué, sí, pero no ahora, aún no me he caído o he dicho algo vergonzoso, solo no le había tomado importancia a la cagada que hice antier. No sé si lo hago para no perder la costumbre o si estoy tan pendejo que no me doy cuenta cuando la estoy cagando hasta que toda la mierda cae encima de mí.
Es obvio que es la segunda opción, porque soy pendejo, no ciego, tengo dos ojos en perfecto estado que pueden darse cuenta que mi pasatiempo favorito es echar a perder todo y fingir que no hice nada. Esta ocasión no fue la excepción. No sabía qué tanto la había cagado hasta que estaba agarrado de la mano de un chico del que solo sabía su nombre, su signo zodiacal y su "mala" fama. Si me lo preguntan jamás creí que iba a estar de este modo, siempre creí que la persona de la cual sostendría su mano por los pasillos de la escuela sería Heather, no sé en qué momento de la vida terminé agarrándosela a Edward.
Agarrándosela suena mal.
Lo corrijo, es "agarrándole la mano". No otra cosa, no es como que si vaya a agarrarle algo además de las manos de todas formas, o sea... Por Dios en qué estoy pensando.
Como sea, los caminos de la vida no son como yo pensaba.
Respiro un par de veces mientras me repito que nadie está prestándonos atención e intento mantener la vista en el suelo para no ver el rostro de los demás, pero con tan solo alzar la mirada por unos segundos todo lo que me digo se desvanece con rapidez porque no importa cuánto trate de convencerme de lo contrario, todo el mundo está observándonos entre una mezcla de sorpresa y confusión, están tan sorprendidos que no pueden ni ocultarlo, son demasiados obvios, ni siquiera yo con Heather fui así de evidente y joder, que la saliva que salía de mi boca me delataba cada vez que la veía.
Nos ven como si Harry Styles y Louis Tomlinson estuvieran caminando juntos y de la mano, solo que las miradas serían diferentes, a ellos no los mirarían con sorpresa porque al parecer ya todos saben que hay algo ahí. O al menos eso dicen las páginas webs y las cuentas fans de Twitter que estuve stalkeando ayer para conocer más del cantante favorito de Edward.
