-TERCERA PARTE- Saga CONTROL
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¿Existe el "Y vivieron felices por siempre"?
Daira es ahora un héroe sin hogar. Ha decidido luchar sola contra la pesadilla que la creó para liberar a la humanidad del mal.
...
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Daira se quitaba los pendientes frente al espejo de su buró, en donde tenía perfumes, joyeras, labiales, sombras y lociones de hombre de su esposo.
De pronto su mente tuvo un flashback, era ella gritando de dolor, desintegrando todo en una masa luminosa color rojo. Todo desmoronándose, todo desapareciendo.
Lo más extraño era que no recordaba haber vivido algo así. Su mente volvió a estabilizarse cuando escuchó el timbre sonar, abrió los ojos y peinó su cabello corto y ondulado con sus dedos, asegurándose de verse bien. Al levantarse, alisó su blusa floreada que dejaba al descubierto sus delgados hombros, y se ajustó bien el pantalón recto.
Así caminó a paso apresurado al pasillo, bajó las escaleras y justo antes de desviarse a la sala, señaló con su dedo la cocina, provocando que el horno se apagara solo, pues la cena ya estaba lista. Finalmente abrió la puerta, encontrando a un hombre uniformado, camisa y pantalones negros, sombrero de policía con una estrella dorada al centro, ojos grisáceos, casi verdes, una sonrisa en el rostro y un hermoso cabello negro.
-Bienvenido a casa oficial- Daira sonrió mientras dejaba que su esposo entrase a casa, pero Levi la tomó de la cintura y la acercó para besarla con amor.
-Nada como ver a tu esposa, luego de una larga jornada de trabajo y entrenamiento-
Ella rió, reincorporándose, y caminó hacia la cocina. -¡Espero que tengas hambre!- Levi la siguió de cerca.
-Si, estoy hambriento-
[...]
Luego de cenar, la pareja se fue a la cama, y cada uno cayó profundamente dormido, hasta que un ruido en la ventana asustó a Daira, quien se sentó y encendió la luz, sin tocarla si quiera.
Pero no había nada, así que volvió a apagarla.
Cuando el ruido se repitió, la ventana estaba del lado de Levi, así que encendió su luz una vez más, pero no hubo nada otra vez.
-Daira, cariño- la voz adormilada de Levi llamó la atención de su esposa. -¿Estás usando tus poderes para encender y apagar la luz?-
-Eh, sí cielo-
-Me lo imaginaba- asintió Levi abriendo los ojos al fin. -¿Y qué es lo que... -De pronto el ruido en la ventana fue más grande que las veces anteriores, asustando a Levi, haciéndolo sentarse de un saltito. Y Daira volvió a encender su luz. -¿Qué fue eso?-
[Risas]
-Es lo que me despertó- explica Daira con una voz temerosa.
-Creo que alguno debería investigar- sugirió Levi, a lo que Daira lo miró acusadoramente.
-¡Sí!, ¡Alguno debería!-
[Risas]
Levi suspiró rendido. -Tienes razón, soy policía y lo haré- apartó las sábanas y cobijas para revelar una pijama blanca con rayas verticales. Metió sus pies descalzos a unas cómodas pantuflas y se aproximó a la ventana, pero apenas el primer ruido, salió disparado de vuelta a la cama.
