Durante la noche cada cierta cantidad de horas Madara aparecía y comenzaba su lluvia de bolas de fuego, que iban combinadas con una lluvia de rocas que enviaba Oonoki, otras veces era solo una lluvia de rocas, otras solo una lluvia de bolas de Fuego, la desesperanza de los habitantes de Konoha era evidente, estaban condenados, ya ni siquiera hacían intentos de apagar los incendios cada vez más comunes.
Al amanecer comenzó otro espectáculo que nadie se esperaba, pero durante la noche habían desaparecido varios shinobis, de pronto cuando la luz de día comenzaba a hacerse presente el espectáculo era más horrible que en la oscuridad, muchos edificios destruidos, cuerpos aplastados o calcinados en callejones, de entre los escombros salían manos calcinadas de quienes habían muerto con la vana esperanza de ser rescatados.
De la hermosa aldea de Konoha solo quedaban el nombre la destrucción era casi total, los pocos edificios que permanecían en pie estaban en precarias condiciones, luego de las revelaciones del día anterior la gente de Konoha caminaba por las destruidas calles casi como zombis, a media mañana comenzó el bombardeo más horrible hasta ahora. De la nada comenzaron a caer los cuerpos sin vida de muchos shinobis, sus rostros demostraban un horrible sufrimiento, nadie se había percatado de su ausencia, de pronto Konoha se lleno de gritos de desesperación y terror, los pocos shinobis que quedaban y el muy reducido consejo solo escuchaban impotentes los gritos desesperados de los habitantes producto de ver el macabro espectáculo, el consejo ya no tenía nada que hacer solo esperar su fin.
El consejo aunque no esperaba hacer cambiar a la gente esperaba al menos darles algo de ánimo con su presencia, pero todo salió mal, la gente al ver a los miembros del consejo comenzó a insultarlos incluso comenzaron a lanzarles piedras.
-¡Por su culpa vamos a morir todos!-gritaban algunos.
-¡Son unos malnacidos!-gritaban otros.
-¡Ojala se pudran en el infierno!-gritaban muchos.
El consejo rápidamente comprendió que lo mejor era irse de ahí y yéndose con una lluvia de piedras el consejo se fue de ahí, en tanto Sasuke estaba destrozado, sabía que Naruto asesinaría a Sakura, como había asesinado a Shizune, a Shino y a varios más. El problema era como lo haría.
La sala de juntas del consejo mas parecía un mausoleo donde señoreaba la muerte que un lugar de reunión de seres vivos, el único ruido era de las respiraciones de los pocos integrantes que aun quedaban con vida, Shikamaru aun estaba desolado por la muerte de Ino, Sasuke preocupado por el bienestar de Sakura, Kiba estaba con el alma en un hilo, Hanabi y Akamaru querían acabar con él y el ejemplo que dieron con Kakashi aun lo hacía temblar.
De pronto una enorme explosión hizo salir a los miembros del consejo.
-Bien Konoha ha llegado el momento de que sean juzgados-dijo sin emoción Naruto desde la cima de la torre Hokage.
-¿Donde tienes a Sakura?, maldito bastardo.-dijo Sasuke sin poder contenerse.
-Jajaja, quien lo diría, jajaja, el frio señor sin sentimientos, el vengador, el gran Sasuke Uchiha preocupado por su puta, jajaja-contesto Naruto.
Sasuke se lanzo contra Naruto pero fue recibido por una fuerte patada de Bee.
-Calma Sasuke no querrás que algo malo le pase a tu amada Sakura-dijo con burla Naruto.
-¡Maldito bastardo!-mascullo Sasuke.
-Bien por quien empezaremos ¿Qué tal el genio Nara?-pregunto Naruto.
-Me parece excelente-contesto Temari con odio.
-Mejor por la pelo de chicle para que Sasuke-kun no siga sufriendo-comento Tenten con maldad en sus ojos.
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La Traición - [Terminada]
FanfictionDurante el enfrentamiento final entre Madara Uchiha, Sasuke y Naruto, Madara logra meter en su Tsukuyomi a Naruto y le hace una advertencia, una aterradora advertencia para el rubio. ¿Se hara realidad la advertencia de Madara? ¿Como lo enfrentara Na...