Más allá de esos ojos azules "Rivarmin"

Compete for a heart

Levi lo sabía.

Lo había notado, las miradas que Falco le dedicaba a Gabay eran las mismas que podía notar en los ojos de Mikasa cuando ahora lo miraba a él.

Confianza, preocupación.

Y sabía que las miradas o sonrojos que Falco había demostrado un par de veces no eran dedicados a esa chiquilla.

Convivir con jovencitos pubertos toda su vida le habían dado la suficiente experiencia para saber cuándo o no intervenir, ahora que vivía con 2 jóvenes de 17 años y consideraba familia a unos cuantos ya sobre los 22 carecía de tacto más que antes en temas sexuales.

Pero que a Armin Arlet le interesaran los hombres era una novedad y primicia interesante para todos los presentes por lo que veía.

Se observaba una tensión bastante divertida a su parecer.

Annie se esmeraba en alentar a  Gabi para que le hiciera un peinado más bonito y Levi lo entendía, había notado cuando la guerra terminó que ella y Armin tenían una extraña cercanía.

Lo divertido era ver cómo Mikasa estaba fulminando con la mirada a ese par mientras rechazaba los vestidos que la mismísima reina le mostraba, poco de su estilo, según ella.

Pero Levi sabía que estaba esperando que Armin se sorprendiera más de verla a ella que a los demás.

En el caso de los hombres creía que no existirían problemas, no hasta que, guiado por la hijade historia llegó a la habitación donde camisas y sacos volaban de un lugar a otro.

Debería habérselo esperado, pensó acariciando los mechones del chiquillo ahora sentado en su regazo, típica pelea de ego entre cadetes.

Reiner y Connie asintieron a su dirección y apuntaron a los culpables.

Jean y Falco.

Esperaba que Falco buscará sus mejores ropas también, era un buen chico y sabía del pequeño enamoramiento perdido que había sentido antes por Armin, el mismo se lo había confesado.

De que Jean pareciera otra vez un adolescente le preocupaba, porque eso significaba o que trataría de ligar con alguna de las chicas o con el mismísimo Arlet.

No sabía cuál de las dos opciones le molestaba más.

- Más les vale dejar todo reluciente antes de partir - indicó a los afectados que le ofrecieron un saludo militar, suspiró - recuerden que se usar las muletas no solo para caminar.

Sí el requería ayuda para anudar su pañuelo al cuello sería mejor buscar a Mikasa otra vez.

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Mirarme al espejo una vez más junto con Historia era mi nueva rutina de la tarde.

Que yo soltará otro suspiro iba a provocar que la reina colapsara.

- ¿Crees que está bien? - Indiqué

Mientras Historia asentía una pequeña llegó corriendo a aferrarse a mis piernas. 

- Por una vez en tú vida has lo que te dice la reina, Ackerman - gruño amargado en la silla de ruedas tirándome una pañoleta.

Negué antes de que él llegará a mi lado.

- ¿Podrías dejarnos a solas? - Indiqué a mi amiga, la cual soltó una risilla aceptando la solicitud -  Alguien no está de muy buen humor por lo que veo.

Cuando sentí la puerta cerrar Levi suspiró.

- Cómo si tú no estuvieras igual que yo - explicó mientras se cruzaba de brazos y me permitía ayudarlo a anudar el pañuelo  - Somos Ackerman's después de todo ¿No?

Me carcajeo ante sus palabras.

- ¿Desde cuándo la sangre te importa Levi? - negó a mi dirección - ¿Qué tal van los otros?

- Casi listos - murmuró - supongo que así estamos bien - indicó viendo nuestros reflejos.

- ¿Tú crees? - toqué parte de mi cuello antes de girarme - solo quiero ver a Armin otra vez y tal parece tú también.

Su encogimiento de hombros y sus ojos no me indicaron nada.

- Era un buen chico, supongo que está bien hacerme amigo de él.

Ahí estaba, una de las cosas que comenzó a parecer manía entre él, era qué cada vez que Gaby hacia un travesura a su primo Reiner este se las guardaba.

Era eso o un terrible mentiroso, que cada vez que negaba saber algo desviaba una fracción de segundo la mirada.

Una idea cruzó por mí cabeza cuál rayo.

- Entonces, capitán Levi - su bufido me dió a entender su resignación a la conversación que se avecinaba - ¿Qué opina de que al comandante Armin le gusten los muchachos?

- ¿Debería de importarme? - gruño mientras mi mano se posaba en su hombro - Bien por él supongo, mientras Falco se comporte cómo debería y tú le ganes a una Annie desesperada lo aceptaré...

- No seas tosco, por el antiguo amor a los muros y dime lo que te molesta - Indiqué - Por lo que entiendo quieres hacerte amigo de Armin, es decir, estoy segura de que él te seguirá llamando capitán Levi por un tiempo antes de que se acostumbre a esta nueva faceta amistosa tuya...

Me interrumpió

- Jean - abrío la boca, por su expresión ví que en cualquier momento se tiraba por la ventana, negando lo que decía a sí mismo - Jean estaba compitiendo con Falco para ver quién estaba mejor, ¿acaso cara de caballo y tú amigo...?

Bingo.

- Jean y Armin nunca tuvieron nada - le expliqué mientras colocaba sobre mis hombros una chaqueta - eso porque Eren siempre interrumpía sus coqueteos... Pero Armin si quería.

Su silencio me dió el pase para salir de la habitación y juntarme con los demás.

Si el corazón del más fuerte de la humanidad ahora tenía un poco de calidez, pensaba que Armin la aumentaría en creces.

Ella misma se haría cargo de ayudar a Levi.