🍑Cap. 6

1.8K 259 71
                                    

El fin de semana había llegado rápidamente, y, como el argentino se había prometido a si mismo, las cosas estaban cambiando, lo cual, últimamente le estaba costando más de lo normal.

Argentina usualmente se le insinuaria al asiático, eran los dos únicos días en que ambos descansaban del trabajo, por lo que, estaría apegado a su pareja, besándolo y abrazandolo hasta llegar a dar sentones sobre él pero...todos esos cambios incluían también la asistencia sexual, lo cual, junto al estrés del trabajo, le estaban haciendo perder los estribos.





—Ugh...que cansancio...





Susurró el menor para si mismo mientras se masajeaba un poco su espalda baja, volviendo a levantarse para así, seguir limpiando las ventanas desde afuera de su casa.

Los sábados eran día de limpieza, y, por los años que ambos habían convivido juntos ni siquiera tenían que coordinar ello, cada uno sabía que parte le tocaba limpiar y los quehaceres que realizar.

El argentino se dirigió hacia la siguiente ventana, levantó su mirada para poner el spray sobre esta, aunque, al ver al asiático frente suyo, dentro de la casa empezando a limpiar el vidrio por dentro, se puso algo nervioso.

Usualmente el menor rociaria el spray hacia la zona donde estuviera el rostro de su pareja para llamar su atención, y así, mandarle besitos en el aire o hacer alguna mueca graciosa mientras limpiara el vidrio pero...Argentina ya no haría más aquello, pensó que tal vez hacer aquello era muy infantil para el mayor.

Así, prefirió irse a la siguiente ventana del patio, siguiendo con la limpieza, luego volvería a limpiar ese vidrio que le faltaba.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.
Al cabo de unas horas Argentina estaba en la cocina, se acercaba la hora del almuerzo y el se encargaba de la comida, por lo que, fue poniendo las verduras y carne en la isla para luego, tomar su celular.

Él siempre ponía música al cocinar o al limpiar pero...al llegar a recordar eso solo suspiró pesadamente, aquello también entraba en sus nuevos cambios, y eso, le estaba doliendo desde temprano a su lado latino.

Volvió a suspirar dejando su celular en silencio sobre la mesa, nunca pensó que la música un poco fuerte podría llegar a molestar o incomodar a su pareja por lo que, solo se digno a cocinar en el silencio de la cocina.

.

.

.

.

My old man Donde viven las historias. Descúbrelo ahora