Desde el día que fueron a la casa de Langa a ayudarlo, todo había cambiado. Reki había vuelto al trabajo, siendo recibido por una calurosa bienvenida por parte del gerente Oka, quien le compró un pequeño pastelito para celebrar su regreso a la tienda. En la escuela Langa y Reki volvían a la rutina que tenían antes, comer en la azotea, pasarse las tareas, ir juntos con el director de la institución por patinar en los pasillos... en fin, todo había vuelto a la normalidad.
Incluso, aunque no lo crean, las familias Kyan y Hasegawa de vez en cuando se reunían, ya que la amistad de Langa y Reki poco a poco había vuelto a ser la misma, lo que hacía sentir bien a Langa, quien disfrutaba ver como su madre convivía con la familia de su futuro novio, o así era como le decía él en sus sueños.
—¿A dónde vas, madre? —Preguntó el peliazul, viendo como su madre se maquillaba para salir a algún lugar.
La castaña sonrió. —Iré de compras con mi amiga Masae.
—¿La mamá de Reki? —Nanako asintió. —Diviértete.
Langa vió como su madre salía de su hogar con una sonrisa. Esperaba que muy pronto ambas señoras se llamaran consuegras.
Claro, tampoco todo era de color rosa, puesto que Kazu y Langa se portaban como perros y gatos cada vez que se veían, peleando y casi agarrandose a golpes sin importar la hora y el lugar. Reki estaba cansado de separarlos, por lo que simplemente ignoraba sus peleas y fingía no conocerlos cuando llamaban a los guardias de seguridad.
—¿Los conoce? —Preguntó el guardia de seguridad, volteando a ver a Reki.
Reki negó rápidamente con la cabeza.
—No los conozco.
Y con esto dicho, Langa y Kazu fueron arrastrados al departamento de seguridad de la tienda, gritando el nombre del pelirrojo para que los ayudara. Sin embargo, Reki aprovechó aquel momento de paz para hacer sus compras.
A diferencia de Kazu, Miya era mucho más inteligente, y trataba de llevarse bien tanto con Langa como con la familia Kyan, esto para que Reki lo viera como un adulto y no como una persona infantil y rencorosa, tal como se veían tanto Langa como Kazu cuando peleaban.
Como cualquier otro día normal, Reki tenía a Miya, Langa y Kazu como invitados, los cuales se encontraban cenando con la familia Kyan, todos sentados en la sala, ya que en el comedor no cabían.
Todo era paz y armonía, Langa y Kazu estaban calmados y no peleaban como de costumbre, Miya hablaba con Koyomi, la hija mayor de la familia Kyan, las gemelas jugaban entre ellas y los adultos veían la película que se estaba transmitiendo en ese momento en la televisión.
Pero la paz nunca dura mucho. Y Reki lo entendió en menos de 5 minutos.
—Chihiro, Nanaka. —Habló Langa, intentando llamar la atención de las gemelas. El canadiense había notado como aquellas niñas lo llevaban ignorando desde que se reconcilió con Reki, y lo que él menos quería era ser odiado por la familia de su Reki. —¿No quieren estos dulces? —El Hasegawa intentó ganarse a las niñas con lo que más amaban: los dulces, y esto no pasó desapercibido por el pelimorado.
—Chihiro, Nanaka. —Las llamó Kazu, ganándose la atención de las gemelas. —¿Les gustó los pastelitos que yo les traje? —Kazu quería escuchar un "¡Si!" por parte de las gemelas para restregarselo en la cara al canadiense, pero nunca imaginó lo que escucharía.
Toda la familia Kyan, además de Miya, habían volteado a ver a las gemelas.
—Prefiero a Tadashi. —Había dicho la gemela menor, Nanaka Kyan, rompiendo el corazón de Miya Chinen, Langa Hasegawa y Kazu. —Nos trae muchos regalos.
—Y sus dulces son deliciosos. —Complementó la gemela mayor, Chihiro Kyan.
—Es porque Tadashi ya es un adulto y trabaja. —dijo la señora Kyan, riendo por el comentario de sus hijas. —Es guapo, espero que lo traigas pronto, Reki. —Masae estaba fascinada por el amigo de su hijo mayor.
Koyomi, la hija mayor de los Kyan, aprovechó el momento para divertirse.
—Y Tadashi tiene más oportunidades de quedarse con mi hermano. —dijo la chica, bajando la voz para que su madre no la escuchara, pero con el volumen adecuado para que el trío de chicos la escucharan.
Kikuchi Tadashi estaba un paso más adelante de ellos.
El corazón de Langa estaba tan destrozado por lo que dijeron las niñas que no tuvo tiempo para ponerse celoso y pensar en cómo la familia Kyan conocían al asistente de su ex novio. Y Kazu y Miya no estaban muy diferentes a Langa.
El trío de chicos muy pronto tendrán una plática muy seria con Tadashi.
En fin, ese fue el único día en que Langa y Kazu no pelearon durante un día completo, pero todo se esfumó al día siguiente, cuando Kazu se despidió de Reki con un beso en la mejilla. Parecía que ellos dos nunca se llevarían bien... o eso creían todos.
—Un punto más a mi favor. —Había dicho el Hasegawa con una sonrisa, confundiendo al de cabellos morados, quien se encontraba acostado en la cama de Reki mientras navegaba por internet.
—¿De qué hablas? —Kazu dejó su teléfono a un lado, para mirar a Langa con atención.
—Mi mamá conoce a la familia de Reki, incluso se llevan bien. —dijo orgullosamente el canadiense. —No veo a tu familia por aquí.
Kazu pensó que Langa estaría bromeando, pero, después de unos segundos de silencio, supo que Langa no sabía de aquello.
—Mis padres murieron en un accidente que tuvimos hace años —dijo el pelimorado —, y ellos eran mi única familia.
Langa supo que la había cagado. Nunca había sido su intención el hacerle recordar algo como eso al pelimorado, pues sabía lo que se sentía el perder a un familiar tan cercano como lo era un padre/madre.
—Perdón por eso, no sabía... —Langa estaba apenado. Lo único que había demostrado fue que era un monstruo sin corazón.
Kazu suspiro, levantándose de la cama. —No te preocupes, solo no vuelvas a hacer comentarios de ese tipo. —Langa pensó que Kazu lo había perdonado, pero Kazu siguió hablando. —Me sigues sin caer bien.
Antes Langa contestaría "Ni tu a mi", pero ahora estaban en una situación diferente.
—Mi padre también murió hace años. —Langa no quería tenerle lástima al chico, solo quería darle a entender que él lo comprendía un poco, puesto que el canadiense no había perdido a sus dos padres, solo a uno..
Kazu no pudo responderle debido a que Reki entró a la habitación con una bandeja de comida y disipó toda la tensión en el ambiente. Desde ese momento, Langa y Kazu se llevaron un poco mejor, pero eso no significaba que no pelearían entre ellos por el amor de Reki, porque esa es otra historia.
Reki no sabía qué fue lo que hizo que Langa y Kazu cambiaran, pero decidió no preguntar. Parecía que su odio se había calmado un poco.
...
¿Kazu y Langa como amigos? No se lo esperaban, ¿eh?
¿Cuál es el pasado de Kazu? Dejen sus teorías, los estaré leyendo. Esta vez no habrá spoiler.
Próxima actualización: Pasado.
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Mi ex novio (SK8)
Historical FictionParecía que todo iba bien en la relación de Reki y Langa. Ambos se apoyaban, compartían buenos momentos juntos e incluso se tenían bastante confianza, pero Reki había ignorado aquellas señales rojas que se le presentaban frente a sus ojos. -Langa nu...