THE MAZE RUNNER «Thomas»

Capítulo 9

"Al parecer, se enamoró del miedo"

ROSHYN 

El aire del área cada vez podía sentirse más denso, más difícil de respirar, como si las malas energías y preocupación pudieran colarse en cada rincón del área. Y es que los chicos tienen razón, todo lo que ha pasado últimamente es una completa locura.

—Jeff, que ocurre— pregunta Newt —Que le pasa, por qué no despierta.

Nos encontrábamos con uno de los docs, tratando de averiguar un poco más sobre la chica. Ella seguía con vida, su pecho se inflaba y relajaba al compás de su respiración. Parecía tan en paz, que algo dentro de mi sintió lastima por ella, porque al despertar posiblemente su vida sea un maldito infierno.

—Oye hermano, terminé con este trabajo igual que tú.

Newt y yo nos miramos decepcionados al no tener nueva información, así que giramos con la siguiente persona que podría tener respuestas. Thomas, el estúpido y perfecto Thomas.

Newt mordió su labio y le preguntó: —¿La reconoces?—

—No— mentiroso. Hombre.

—¿Enserio? Ella te reconoció a ti— le reproché, Te ni si quiera se atrevió a mirarme. Mientras tranto, Minho se mantenía al margen, no decía nada pero estaba al pendiente de todo.

De lejos se escuchaba la respiración agitada de Alby, el pobre debe estar pasando por la transformación, lo que para mí es... el mayor de mis miedos. El corazón se me encogió, él no debería estar pasando por esto.

—Qué pasa con la nota— el morocho desvió el tema de conversación.

—Después nos preocuparemos por eso.

—Creo que deberían preocuparse ahora— insistió.

Lo miré regañándolo ¿es enserio? Es que a veces mi guapo amigo es muy inteligente pero otras parece un garlopo de clase mundial.

—Tenemos bastante por el momento— le responde el rubio, furioso.

—Tiene razón Newt. Piensa, si esa caja no vuelve a subir, cuanto tiempo duraremos aquí.

Suspiré pesado, ahora estaba más que claro que todos están pensando lo mismo que yo... que las cosas jodidas ahora están todavía más jodidas.

—Nadie dijo eso, no haremos suposiciones, solo hay que, esperar a que despierte para ver que sabe.

—Alguien debe tener respuestas por aquí— concluyo por Newt.

Ignoré la mirada curiosa de Thomas, es que esa cabeza siempre está pensando ideas locas, de esas ideas que solo alguien con un tumor enorme que le oprime el sentido común de vivir, haría.

—Okay.

—Oye y tú a dónde vas— le pregunta nuevamente Newt.

—Al laberinto— Respondió Thomas y después salió de la cabaña, los tres nos miramos y resignados Minho y yo lo seguimos.

—Joder— suspiré. Entrecerré un poco los ojos al estar fuera, el sol no daba directamente a mi rostro, pero la luz iluminó mi visión, Thomas estaba ahí tratando de seguir su camino, hacia la demencia, obviamente. Es que está loco, nadie quiere entrar a ese lugar, excepto él.

—Hey— lo seguimos —Hey, Thomas hey— lo detuvo Minho y lo miró como si de un bicho raro se tratase —¿Qué te sucede eh, quieres morir? ¿Saliste y ahora quieres volver?

Thomas lo mira y le habla desesperado —Newt dijo que nadie había visto un penitente y vivido para contarlo ¿Verdad? —me mira —Pues ahora tenemos uno, no me digan que no tienen curiosidad.