CNCO Reality "ENCERRADOS"

Capítulo 15

Marta y Julio salieron animados. La chica se había puesto un sencillo vestido rosa que combino con unos tenis converse blancos para el día y para la noche había empacado en el bolso unos zapatos blancos de tacón finísimos.

El chico por su parte había optado por vaqueros negros, una camiseta blanca y encima una chaqueta de mezclilla. Para la noche tenía pensada la misma opción.

En cuanto salieron un descapotable rosa los estaba esperando. Tal como lo había querido Julio le daría a la chica un tour por la ciudad.

Con un gesto amable le ofreció la mano para ayudarla a subir al coche. Ella sonriente, nerviosa y sobre todo muy expectante se la aceptó.

Acto seguido él ocupó el asiento del conductor, encendió el motor y en unos segundos el coche arrancó.

―¿Qué pasa princesita?―preguntó mientras conducía.

― Estoy sorprendida de que me hayas escogido

―Pero si llevó mirándote desde que llegamos.

(ENTREVISTA)

Julio: Vamos a ser claro compadre, mi tipo son las morenitas como Zoe, pero esa princesita tiene algo que no sé tú que que se yo. Ahí nomás te digo.

(Back)

―Si pero hay tantas chicas solteras y disponibles.

―Te voy a ser claro princesa―dijo Julio y la miró a los ojos mientras con las dos manos se aferraba al volante― ninguna tan bella como usted mi amor.

Ella solo sonrió y desvió la mirada hacia otro lado antes de ruborizarse.

(ENTREVISTA)

Marta: En el fondo si me alegra que me haya escogido― y sonrió.

(Back)

Después de avistar algunos edificios céntricos, el tráfico tranquilo de la ciudad, los monumentos y algunos otros sitios de interés el Cadillac aparcó en el centro de masajes más famoso de la ciudad.
Nuevamente Julio demostró su cortesía ayudándola a salir del coche. Luego le cedió el paso para no perder detalle del trasero y la forma de caminar de la muchacha.

Todo un Caballero

Nada más llegaron los recibió una empleada que vestía un uniforme muy blanco y el pelo recogido en una redecilla. Le pidió a Marta que la acompañara y Julio aprovechó para abrazarla al grito de: “No se la lleven, es mi cita”.
Marta sonriente se fue con la amable señora que estaba algo extrañada ante el comportamiento inusual (e infantil) del chico.

(ENTREVISTA)

Marta: Es que es un payaso

(Back)

La chica recorrió el camino que le indicaron hasta las duchas. Ahí tomo una ducha fresca y relajante, luego se envolvió en una toalla blanca y coloco su vestido y su ropa interior en una bandejita blanca.

Después, se recostó en la camilla boca abajo y se colocó la toalla sobre el trasero. Divisó un montón de aceite para masajes y contentísima cerró los ojos esperando cpm ansias a su masajista.

(ENTREVISTA)
Marta: yo adoro los masajes y Chris odia hacerlos. Siempre que se lo pido su respuesta es la misma: NO.

(Back)

Al ratito sintió unos pasos lentos que se dirigían a ella.

―Preparase princesita que le llegó su masajista profesional― sonrió Julio.

―No puede ser― sonrió ella al darse cuenta de la jugarreta del chico

(ENTREVISTA)

Marta: cuando me di cuenta que era Julio el que estaba allí pensé: Esto se va a poner bueno.