CAPITULO 7

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Capítulo 7

Lexie

Nos adentramos al centro de la ciudad de Toronto y para no sentirme más nerviosa veo todo lo que hay tras la ventana. Autos, edificios y luces todo hace un hermoso contraste con la oscuridad en la que nos sumergimos. De vez en cuando le hablo a Chase para indicarle a dónde debe dirigirse, y no puedo evitar auto regañarme ya que sucederá justo lo que no quería. Llevar chicos a casa.

—¿Qué tanto piensas Lexie? —la voz ronca y suave del chico a mi lado me saca de mis pensamientos.

—En que si mi tía se entera de que no estoy en su casa me matará—confieso—y siempre he querido una caja rosa sabes, no es mi color favorito, pero siempre quise que me enterraran en una de ese color y aun no se si existe—suspiro—solo espero que si muero esta noche viva en tu consciencia Chase porque mi muerte será por causa tuya.

—Dejando de lado todas las rarezas que acabas de decir—dice sin soltar el volante—tenías la opción de quedarte conmigo y no la tomaste.

—Vale, entiendo que quizás no te caiga bien, sabes sé que soy algo rara y eso—volteo para ver su perfil—pero no sabía que en serio me querías ver muerta.

—La tal Begonia no debe ser tan mala...

—La palabra no es mala, es estricta compulsiva, cuando iba a casa era tradición que mamá hiciera algo nutritivo ya que si no lo hacía decía que nuestros cerebros no se desarrollarían bien y seriamos vagabundas—revelo—además todas las noches nos teníamos que dormir a las 7.00pm ya que si no lo hacíamos todo el día siguiente nos castigaba, literalmente todo el día de rodillas, solo nos levantaba para comer vegetales. En conclusión, mi tía está loca. Tengo años que no la veo, pero esas clases de actitudes nunca cambian.

—Con más razón debiste quedarte conmigo—quita la vista del camino para mirarme—debiste disfrutar tu última noche—me guiña el ojo volviendo a poner su vista al frente.

—No me quedaría en tu hotel solo para que tu lista de conquistas se haga más larga, además no iba a tener sexo contigo si es lo que piensas—aclaro.

—En ninguna parte de mi propuesta mencione la palabra sexo, y en segunda ninguna de mis conquistas se queda a dormir conmigo.

Siento que mis mejillas se ruborizan.

—Aunque depende de cómo lo veas, si se quedan lo que hacemos no es precisamente dormir...

—¡Maldición Chase no me interesa escuchar eso! —su risa es casi inmediata, una ronca y baja, pero hay esta—mejor concéntrate en conducir, si moriré no será por ti, y menos contigo que horror—finjo asco.

—Como tú digas Lexie...como tu digas—la última palabra es casi audible.

Hago caso omiso a su último comentario y me inclino para encender la radio, la primera canción que aparece es la de mi diosa Julia Michaels, What A Time. Siento que la canción fue enviada por los mismos dioses.

—¡Fuck amo esta canción! —exclamo subiendo más el volumen.

Me uno a la canción cantando a todo volumen sin importarme el chico que está a mi lado, Julia me quita cada gramo de vergüenza que pueda tener en mi ser.

I feel a little nauseous and my hands are shaking
I guess that means you're close by
My throat is getting dry and my heart is racing
I haven't been by your side
In a minute, but I think about it sometimes
Even though I know it's not so distant
Oh, no, I still wanna reminisce it.

Me siento un poco nauseas y mis manos tiemblan
Supongo que te necesito cerca
Mi garganta se está secando y mi corazón se acelera
No he estado a tu lado ni un minuto, pero pienso en ello a veces
Aunque sé que no es tan distante
Oh, no, todavía quiero recordarlo.

Grito a todo volumen, si grito porque lo que estoy haciendo no es digno de llamarse cantar.

I know we didn't end it like we're supposed to
And now we get a bit tense
I wonder if my mind just leaves out all the bad parts
I know we didn't make sense
I admit it that I think about it sometimes
Even though I know it's not so...

Sé que no lo terminamos como se supone que debemos
Y ahora nos ponemos un poco tensos
Me pregunto si mi mente sólo deja fuera todas las partes malas
Sé que no teníamos sentido
Lo admito que a veces pienso en ello
Aunque sé que no es tan distante
Oh, no, todavía quiero recordarlo.

La canción termina conmigo emocionada a pesar de mi horrible acto.

—Wow—pronuncia Chase unos segundos después.

—Gracias, gracias—hago unas reverencias—no todos tienen el honor de escuchar mi tan celestial voz, pero hay que ser caritativa de vez en cuando—me alzo.

—Dios espero que seas menos caritativa la próxima vez y no vuelvas a desperdiciar tu celestial voz en un simple humano como yo.

—Eres muchas cosas Chase—me inclino para bajar el volumen—pero no simple.

—Lo sé—se limita a decir.

—Puedes simplemente decir gracias—me irrito cruzándome de brazos.

—Esa palabra no está en mi vocabulario—dice sin dejar de ver al frente.

—En el mío si, mira—digo cuando entramos al vecindario—gracias por traerme ¿vez? No es tan difícil.

El auto se detiene justo al frente de la casa de Begonia y mis nervios aumentan cuando de todas las casas que hay alrededor solo esa tiene las luces de adentro encendidas. No eres cobarde Lexie baja del auto y enfrenta las consecuencias de tus actos.

—¿Quieres que te acompañe o dormiremos en el auto? —habla Chase acomodándose en el asiento.

Hago lo mismo tomando una respiración profunda y detallando cada parte de su rostro. Guapo es una palabra que definitivamente le queda corta.

—Si...yo debería salir ya—hablo despacio.

—Supongo—increpa con voz suave.

Volteo y abro la puerta, pero no salgo, me quedo en la misma posición inconsciente de lo que haré.

Sin pensar más doy una vuelta rápida, miro a Chase unos segundos con la respiración acelerada y uno sus labios con los míos en un beso, esperé que se separara o que me rechazara, pero eso no sucedió...por el contrario me correspondió adaptándose, siguiendo el ritmo con fluidez, la manera en la que jugueteaba, como sus labios suaves y hábiles consumían los míos resultaba maravillosa.

Me separo lentamente de el abriendo los ojos despacio. Sus pupilas están dilatadas.

—Bueno—me aclaro la voz— ahora sí, creo que debería irme—susurro cerca de sus labios.

—Buenas noches, Lexie—pronuncia unos segundos después.

Sin más termino de abrir las puertas del coche cruzo la calle y me voy por detrás de la casa para buscar las escaleras y entrar a la recamara.

Antes de que te vayasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora