RIOS DE AGUA VIVA I. El Evangelio s/San Lucas.

#4: El Evangelio s/San Lucas (I).

- JUAN - EL BAUTISTA (I).

LA PREDICACIÓN DE JUAN EL BAUTISTA. Lucas 3.

El capítulo 3 de Lucas comienza con la descripción del momento histórico que va a narrar. Esta característica de Lucas, arroja veracidad a la historia, pues se refiere a personas y lugares que realmente existieron en ese tiempo y espacio (Lucas 3:1-2).

Por eso se asegura que el CRISTIANISMO, ES LA ÚNICA DOCTRINA ESPIRITUAL QUE UTILIZA PERSONAJES HISTÓRICOS, ASÍ COMO LUGARES Y ACONTECIMIENTOS QUE LA ARQUEOLOGÍA, DESPUÉS, SE HA ENCARGADO DE CONFIRMAR.

Después de un período de mas de 400 años, vuelve a oirse en Israel la voz de un PROFETA DE DIOS: JUAN EL BAUTISTA, del cual su propio padre Zacarías en Lucas 1:76-79 dijo:

76. Y tú, niño, profeta del Altísimo serás llamado; porque irás delante de la presencia del Señor, para preparar sus caminos.

77. Para dar conocimiento de salvación a su pueblo. Para perdón de pecados,

78. Por la entrañable misericordia de nuestro Dios, con que nos visitó desde lo alto la aurora.

79. Para dar luz a los que habitan en tinieblas y en sombras de muerte, para encaminar nuestros pies por caminos de paz.

Había llegado la hora para que Juan el Bautista, comenzara a cumplir la misión para la cual había nacido, su ministerio mas importante: DAR LUZ A LOS HOMBRES, DENUNCIAR LA CONDICIÓN DE PECADOR QUE TODOS TENEMOS Y
ANUNCIAR LA LLEGADA DEL HIJO DE DIOS AL MUNDO, PARA SALVACIÓN DE LA HUMANIDAD.

JUAN BAUTIZABA EN AGUA. Con el bautismo de Juan, EL HOMBRE CONFESABA ARREPENTIMIENTO DE SU CONDICIÓN DE SER PECADOR.

El bautismo de Juan, era la SEÑAL EXTERIOR DE LO SUCEDIDO INTERIOMENTE EN LA VIDA DEL BAUTIZADO; esto es: que ha recibido la Palabra de Dios y ha comprendido, en toda su magnitud, la CONDICIÓN DE PECADORES QUE POSEEMOS, cuando estamos sin Dios, declarando su arrepentimiento
y necesidad del perdón de Dios.

De manera que Juan debía predicar EL BAUTISMO DEL ARREPENTIMIENTO PARA PERDÓN DE PECADOS (Lucas 3:3). El propósito de Juan no era otorgar SALVACIÓN, sino LLEVAR AL PUEBLO DESDE SUS PECADOS A SU SALVADOR, repito: LLEVAR AL PUEBLO DESDE SUS PECADOS A SU SALVADOR.

En Lucas 3:7-8, también vemos, que Juan enseña la necesidad en todo verdadero creyente, de hacer FRUTOS DIGNOS DEL ARREPENTIMIENTO, porque el juicio de Dios, ya se estaba ejecutándo.

¿Cuáles son los FRUTOS DE ARREPENTIMIENTO PREDICADOS POR JUAN? La respuesta a esta pregunta está el Lucas 3:10-14 y en Stgo. 2:15-16.

Juan emplazó a todos, pues predicaba un cambio de actitud interna y no solamente un cambio en lo exterior.

Todo el pueblo y los publicanos, según testificó el propio Señor Jesucristo, se bautizaron en el bautismo de Juan, menos los fariseos y los intérpretes de la ley, que : "desecharon los designios de Dios respecto de sí mismos, no siendo bautizados por Juan", (Lucas 7:29-30).

JUAN, BUSCABA UNA PROFESIÓN DE FE, lo cual significa: LA MANIFESTACIÓN PÚBLICA DE UNA CREENCIA. Esa manifestación pública era EL BAUTISMO EN AGUA, la cual indicaba que el bautizado se RECONOCIA PECADOR Y QUE ESTABA ARREPENTIDO DE SERLO.

De esa manera, el acto del bautismo, se convertía en la SEÑAL EXTERNA DEL CAMBIO INTERNO y al mismo tiempo expresaba la necesidad del bautizado de ALCANZAR LA RENOVACIÓN DE SU CORAZÓN.

El ser humano sin Dios, está sujeto a la Ira de Dios de la cual no HAY MANERA DE HUIR, SINO SOLO POR EL ARREPENTIMIENTO DE SU CONDICIÓN DE PECADOR.

Cada pecador TIENE que empezar por SENTIR ARREPENTIMIENTO, DE SU CONDICIÓN DE PECADOR, pues si no lo siente así, NUNCA LLEGARÁ A SER SALVO.

Y una vez salvo, es necesario aún, UN MAYOR Y PROGRESIVO CAMBIO DE SU MENTE que lo lleve al mejoramiento humano, esto es: parecerse cada vez más a Cristo. De no sentir así, NO, llegará a la SANTIFICACIÓN PLENA ni a la LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO.