Lo Que Querías

Mejores amigos

Alluka tomó de la mano a su hermano y a Gin, así que Killua tomó la mano de Gon para que no se separaran. El contacto estremeció a ambos chicos.

Comenzaron a correr por la feria.
Se veían muy felices y lo estaban. Cuando Alluka soltó sus manos, Killua hizo como si nada pasara y siguió de la mano con Gon corriendo por todos lados.

Fue una tarde hermosa.

-Hermano, ¿Dónde vamos a dormir?

-En algún hotel por ahí.

-No puedo evitar pensar que te pareces a mí.

-Yo pensé lo mismo cuando te vi Gon.

-Debe ser coincidencia jajajaja. Cuéntame más de ti Gin.

-Bueno, trabajaba como mayordomo y por eso me hice amigo de Killua. Antes vivía en una isla con mi tía.

-Que casualidad, yo también vivo en una isla con mi tía.

-¿De qué hablan chicos? Me gustaría que mis dos mejores amigos se lleven bien.

-Por su puesto Killua.- Dijeron los morenos al mismo tiempo, cosa que molestó a Gon.

Cuando llegaron al hotel, les informaron de que solo habían tres camas por habitación. De todas formas, tomaron una.

-Yo duermo con mi hermana en una cama y ustedes en la otra.

Alluka se durmió inmediatamente, luego Gin lo hizo. Gon y Killua se quedaron conversando hasta tarde.

-Killua, ¿Podemos ir a otro lado?

-¿A dónde quieres ir?

-A cualquier lugar.

-Con que volvamos antes de que se despierte Alluka, todo estará bien.

Los jóvenes salieron corriendo del hotel entre risas. Caminaron y caminaron hablando de temas sin importancia hasta llegar a un bosque.
Gon se tumbó en el pasto y miro el cielo.

-Extrañaba ver las estrellas contigo, Isla Ballena no es lo mismo sin ti.

Y ahí estaba otra vez, sus mejillas sonrojadas ante las palabras que le decía su mejor amigo.

-Sabes Gon... Este año mejoré la relación con Kalluto. Es lindo sentir que tienes una relación sana de hermanos--Dijo recostandose a su lado.

-¡Me alegra demasiado Killua! Mereces solo cosas buenas.

Se quedaron en silencio durante un largo rato, solo disfrutando la compañía del otro. Ambos estaban analizando la situación; ¿Era posible sentirse tan completo en esos momentos?
En sus reflexiones, llegaron a un consenso. Siempre iban a estar juntos.
Era increíble que pensaran en lo mismo sin decir palabra alguna.

-Te quiero Killua, te quiero mucho.

-Yo también te quiero Gon--Se tapó las mejillas con las manos, sabía que estaban rosadas.

Gon se sentó frente a Killua haciendo que este hiciera lo mismo, luego tomó sus manos. Ya no podría ocultar sus sonrojos.

-Qué... ¿Qué haces Gon?

-Mírame Killua.

-Eso... Eso estoy haciendo Gon...

-Te quiero perdir perdón.

Los ojos del albino se llenaron de lágrimas recordando aquellos sucesos.

-Palm... Me dijo por una carta lo que pasó.

-Que chismosa.

-Siento tanto haberte dañado, eres la persona más importante para mí y... Me di cuenta muy tarde.

Ahora los dos chicos tenían los ojos decorados con pequeñas lágrimas.

-Gon... Tú nunca...

-Sí te dañé, incontables veces. Prometo no hacerlo nunca más.

-No te preocupes...

-Mi padre me dijo que debía disfrutar de los pequeños desvíos, ¿Cierto? Porque así iba a encontrar algo más importante de lo que quería.

-Sí recuerdo...

-Encontré algo más importante, te encontré a ti Killua. Y nunca quiero hacerte daño, perdóname por favor.

-Gon... Yo... Yo... Yo ya te perdoné. No puedo enojarme mucho tiempo contigo...

Una sonrisa se formó en sus rostros y Gon soltó las manos de su amigo para abalanzarse sobre él.
Se pegó a Killua con todas sus fuerzas, no quería terminar ese abrazo nunca y el albino tampoco.

No supieron en que momento terminaron así, pero estaban realmente cómodos. Gon estaba recostado en el pasto y Killua tenía la cabeza en su pecho mientras ambos miraban las estrellas.

-No entiendo por qué nunca estuvimos así Killua, se siente tan bien.

-Debe ser porque siempre estabamos entrenando o pensando en otras cosas.

-Me gusta oler tu cabello Killua.

-Y a mi me gusta escuchar latir tu corazón.

Dieron un gran suspiro y siguieron conversando por un largo rato.

-Ya es hora de que volvamos al hotel Gon.

-Tienes razón.

Caminaban de regreso al hotel cuando Gon se detuvo para hacer una promesa. Killua no podía más de la vergüenza al tener que cantar la canción que tantas veces vio cantar a Gon con Mitosan.

-¡Ahora seremos mejores amigos por siempre Killua!

-Yo pensé que ya lo éramos.

-Creo que Gin no piensa lo mismo...

-¿Estás celoso Gon?

-No, por qué lo estaría.

-Definitivamente estás celoso.

Killua abrazó a Gon por la espalda y apoyó su mentón en el hombro de su amigo.
"Yo solo te quiero a ti Gon" le susurró.
El moreno no pudo evitar ponerse rojo como tómate, así que se separó de su amigo.

-¿Gon?

-¿Qué?

-¿Estás rojo? Frunció las cejas a modo de burla.

-Yo no te molesto cada vez que te pones rojo Killua.

-¡Ven para acá idiota!

Una persecución hasta el hotel había comenzado.