Outside _Mikexe

capitulo 5: Temores

Sin duda estar con Mike. Exe le daba un poco de temor a Mike, era algo que se espera por las acciones pasadas de uno de ellos. Y que la confianza es algo que se perdió en ambos, de nuevo, por las acciones pasadas que difícilmente serán olvidadas por completo.

El chico de diecisiete salió del baño con tan solo una camisilla de color blanco y una pantaloneta de color negro. Descalzo y haciendo silencio bajo las escaleras con algo de inseguridad en cada paso que daba, y cada que avanzaba se decía a sí mismo que era mejor quedarse en el baño lamentandose el no estar en casa tranquilo con su madre.

Pero tenía que ser fuerte para en algún momento poder regresar a los brazos de Ela y estar tranquilo solo con ella, en estos momentos regresar con su padre sería una mala decisión, vio sus manos, las heridas en sus manos le recordaron que su padre lo había tratado como mierda, por un momento el quedarse con el .Exe parecía una buena idea.

Llegado determinado tiempo y cuando por fin logro bajar por completo las escaleras, estaba en la primera planta viendo todo expectante, esa casa era muy bonita, tenía mucha iluminación, lo que la hacía agradable para la vista de cualquiera, tenía bonitas decoraciones que eran del agrado de Mike.

- Por fin bajas.- Menciono una voz algo áspera que venía de la cocina, el olor a comida llego a la nariz del niño haciendo que su estomago haga sonidos por estar vacío y tener hambre.

- S-Si... ¿Qué cocinas? - Pregunto acercándose con cuidado y estando algo alerta por si el de mayor estatura planea hacer algo contra su persona, algo que evidentemente no iba a pasar, este solo se encontraba preparando el desayuno para ambos.

- Veneno- volteo para ver la cara del contrario y este al perecer se la había creído, así que soltó una risa ante aquello y regreso a cocinar. - ¿Porque no vienes a ver por ti mismo lo que estoy haciendo? - Se hizo hacia un lado para que el niño pudiera tener espacio para ver. Y este por un impulso y con demasiados nervios se acerco hacía el .Exe, la comida en el sartén se miraba deliciosa, por lo que dejo que el contrario continuara. Comenzó a pensar que era tonto pensar que era veneno, ambos comerían de la misma olla. Suspiro y observo al castaño en lo que restaba de la preparación de la comida. Era carne con huevos y pan, nada en especial, pero era deliciosamente delicioso. _Escrito con las palabras del mismo Mike_

Ambos estaban en la mesa para comer, era obvio que Mike moría de hambre, así que comenzó a comer con algo de prisas.

Al principio se había negado a ir, pero como podrán adivinar, el hambre le ganó al rubio.

Mike. Exe por otro lado, comía tranquilamente y de vez en vez observaba a Mike comer, según el de ojos color Rubí esto era divertido, pero cada que miraba las mejillas regordetas del rubio, una sensación de ternura extrema se instalaba en su corazón. Una sonrisa sutil se coló mientras comía.

Al terminar de comer Mike no sabía que hacer, vio que su contrario tomó su plato para ir a lavarlo, sin pedir ayuda, cosa que sin saberlo, Mike agradecía mucho, no quería estar cerca de la persona que sin un motivo claro (hasta el momento) le tenía en su casa.

Cuando vio que el .Exe había terminado no supo que más hacer que esconderse en la sala, se sentó abrazando sus piernas y viendo al mayor con total inseguridad.

El chico de ojos color rojo simplemente suspiro con una sonrisa en su rostro, para que el menor no se sintiera mal se sentó en un sillón aparte.

Mike curioso al ver ninguna reacción violenta o por el estilo se acercó gateando al .Exe, le vio al rostro y empezó a buscar alguna similitud entre ambos.

Obviamente Mike. Exe no se dio cuenta de esto de inmediato, había encendido la televisión y se quedo observando eso para distraerse de su mala relación con Mike.

El niño suspiro y vio a sus alrededores viendo la casa, apoyo sus manos y rodillas en el sillón y vio todo a su alcance.

Como le estaba dando la espalda a Mike. Exe se puso aun más alerta con respecto a los sonidos y etc. Por su lado, la vista del castaño obscuro se fue directo al culo de Mike, pero al darse cuenta la parte que estaba viendo se castigo así mismo por ser un pervertido de mierda. Volteó a ver la televisión de nuevo tratando de concentrarse en eso.

- ¿Cómo es tu vida aquí? - Se sorprendió al escuchar eso de repente, volteó a ver al rubio y este le estaba viendo directamente desde el otro sillón.

- ¿A que te refieres? - Preguntó ahora él, la impresión ya se le había pasado, ademas de que apoyo su codo contra el sillón y en su mano comenzó a sujetar su mejilla para ver al contrario de forma cómoda.

- Me refiero a ¿Qué haces todos los días? - El contrario al menos tendría algo que hacer, a menos de que se la pase en casa todo el día sin hacer algo realmente interesante, cosa que duda.

- Pues no hago mayor cosa realmente, solo me la paso en la playa observando el mar con tranquilidad, el resto del tiempo me la paso tranquilo en casa.- A Mike le costaba creer eso, pero por el rostro de tranquilidad de su contrario, no tuvo de otra que creerle.

Silencio por unos momentos en los que el menor se la paso pensando, justamente en las palabras de su mayor, hasta que este llamó su atención para preguntarle algo.

- Y tu que hacías? - Un suspiro pesado salió de sus delicados labios, y como el .Exe le contestó, no tuvo de otra que contestar también.

- Pues...- trago en seco al recordar sus últimos días y semanas en aquella casa, por lo que opto por contarle al .Exe uno de sus viejos días, cuando todo era tan tranquilo y feliz para él. - Me la pasaba dibujando o jugando con las cosas que encontraba por la casa, y estaba con mis padres...- Se sentó bien en el sillón y paso a ver sus pies pensando en esos días - era tranquilo y bonito- Quiso contenerse, tranquilizarse el mismo, pero no pudo, apretó con fuerza su camisa y pequeñas lagrimas comenzaron a decorar su rostro.

- ¿Estas bien Mike? - Su preocupación era evidente, el menor estaba llorando, no podía simplemente dejarlo así.

- Sí, no pasa nada.- Mike en un intento por secar sus lagrimas pasó sus manos por su delicado rostro, vio al mayor y este estaba parado en frente de él. Se acercó y el rubio retrocedió un poco. 

"Ahora no" Pensó y retrocedió al ver el ceño fruncido del menor.

- Perdón.- Y salió de la habitación yendo escaleras arriba y dejando a Mike solo en la sala. 

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