Después de la llegada de Gin y Akutagawa pasaron unas semanas para que ambos se adaptaran al lugar y tuvieran un poco más de confianza.
Conocía el poder de mis entrenadores, sin embargo yo no poseía alguno, por eso mismo estuve entrenando combate cuerpo a cuerpo con ellos todo el tiempo por falta de habilidad, no me sentía triste puesto que Gin y Akutagawa se encontraban a mi lado conmigo.
Pasaron los meses, aprendimos a leer los movimientos de nuestros subordinados, fue ahí donde Dazai nos separó, le pidió a Chuuya que nos entrenara solamente a mi y a Gin, él se ocuparía de entrenar a Akutagawa, me extrañé bastante, yo nunca observé algo malo con el, al contrario inconscientemente sabía que todo lo que él hacía le salía bien...
-Oye Gin, ¿Tú sabes porque nos separaron?
Ella me miró quedándose en silencio, sin obtener respuesta alguna decidí investigar por mi propia cuenta.
Después de terminar el entrenamiento me dispuse a ir hacia la oficina de Mori, al llegar a ella me recibió cálidamente como siempre solía hacerlo cada que no veíamos.
-Por favor toma asiento y dime ¿Que te traer a ver a tu querido padre?
Me dijo con una sonrisa que ya sabía exactamente a lo que iba, me quede en silencio unos segundos, yo sabía que él anhelaba que lo llamara padre ya que se encargó de que yo estuviera bien dándome diera amor, protección y un lugar donde dormir y comer, suspire y lo miré a los ojos.
-Me gustaría saber más sobre esos dos chicos que llegaron hace no mucho, eh intentado hablar con ellos pero no recibo una respuesta y por eso vine aquí.
Mori me miraba mientras sonreía, soltó una risa sarcástica.
-¿Vienes por los dos? ¿O solamente porque te interesa uno?Al escuchar esas palabras sentí la rojez de mi cara, evadi la pregunta mirando a otro lado, Mori suspiró mientras abría un cajón sacando un sobre amarillo.
-Supongo que un día lo sabrás.
Colocó los papeles sobre el escritorio deslizándolos hacia a mi los tomé y me puse de pie.
-Te los traeré pronto ¿Está bien?
-Tómalo con calma no son de gran importancia esos papeles querida.
-Gracias padre
Después de cerrar la puerta me quede avergonzada y sabiendo que nunca dejaría de molestarme pidiendo que lo volviera a llamar así, podía escuchar sus gritos de emoción por haberle llamado así.
Llegue a mi cuarto y me dispuse a leer el sobre de investigación de ambos.
Después de leerlo me quede en silencio, me di cuenta que ninguno de los dos tuvieron una vida feliz, me sentí molesta conmigo misma por pensar que mi vida era horrible sin saber que existía mas gente que tenía una vida aún más horrible que la mía.
Quería hacer algo por ellos y lo haría bien, no quería que ninguno de los dos volviera a sufrir por momentos traumáticos.
Gin volvió a la habitación, nos dispusimos a descansar pues ya era bastante tarde, teníamos que dormir para el día siguiente.
Al despertar decidí tomar una ducha temprana y prepararme para el día, tenía planeado hacer algo especial para el..
Me hundí en mis pensamientos olvidando que ahora compartía cuarto con alguien más, al salir de la bañera me dirigí hacia mi tocador, dejé caer la toalla que cubría mi desnudez mientras vestía mi ropa íntima, percibí un olor dulce como la miel que apestaba la habitación por completo.
Mire hacia atrás buscando el proveniente de ese aroma, estaba Gin cubriéndose el rostro con ambas manos sonrojada, no pasaron ni 5 segundos para entender la situación tan embarazosa en la que me encontraba tomé de inmediato la sábana de mi cama cubriendo mi cuerpo apenada y sonrojada.
-Olvide que estabas aquí eres muy silenciosa que no me di cuenta de tu presencia lo siento mucho.
Dije apenada cubriendo mi cuerpo.-N-No te preocupes no me molesta en absoluto.
Lo dijo sin mirarme y aún sonrojada, mientras ella se metía a tomar una ducha me cambie lo suficientemente rápido y salí de la habitación evitando cualquier contacto con ella, sabía que no podía mirarla a los ojos un par de días.
Pensaba en ayudarles a tener una mejor vida y sólo conseguí provocarle un trauma más, suspire y salí a al pequeño jardín que se encontraba afuera, Mori no me dejaba salir de la casa, no hasta que Chuuya y Dazai le dijeran que estaba suficientemente preparada para poder defenderme afuera.
Había varios rosales en el jardín, cuando llegue aquí plante aquel rosal de rosas rojas, en ese rosal se encontraban las cenizas de mi madre, las deposité en la tierra antes de que estas crecieran, Mori sabía lo especial que era para mi, todos los días venía a depositar agua a las rosas, no sabía que era buen jardinero o quizás es mi madre demostrándole su gratitud por salvarme de el camino de vida que tendría.
Miré el rosal de rosas blancas y no pude evitar pensar en Akutagawa, así que tome una de ellas, pensaba dársela como muestra de gentileza, no tenía entrenamiento y decidí ir a buscarlo, supongo que el si tendría, al llegar lo miré muy exhausto y cansado.
Dazai se percató de mi presciencia y me miró.
-Tienes visitas Akutagawa.Akutagawa me miró cansado y con los mismos ojos que vi por primera vez, vacíos, Dazai se alejó del lugar dejándonos solos, por ese instante me sentí tan nerviosa que pensé que mi corazón se saldría de mi pecho.
El se encontraba en cuclillas, se puso de pie al mirarme y con cautelosidad se acercó a mi con esa mirada seria sin expresión alguna, se quedó enfrente de mi mirándome esperando que dijera algo, yo por otro lado me sonroje y solamente estiré la mano con la rosa que sostenía la rosa.
Me tomó de la muñeca de forma gentil acercándome a el hasta sentir el contacto mi cuerpo el suyo, jamás apartó sus ojos de mi, no podía sostenerle la mirada sin sonrojarme, estaba tan avergonzada de que pudiese escuchar los latidos de mi corazón acelerado, nos quedamos así por unos segundos mientras el naranja del atardecer nos alumbraba por el ventanal.
Agacho su mirada acercándose a mi cuello, pude sentir roce de su respiración correr por mi piel, en cuestión de segundos mi piel comenzó a erizarse de forma involuntaria, intente alejar mi cuello de el pero solo conseguí mostrarle aun mas de el, recorrió la curva de mi cuello con su respiración alejándose de el de forma lenta, el contacto de su cuerpo con el mío desapareció, me miró a los ojos soltando mi muñeca mientras mantenía una distancia entre ambos.
-Me Gusta tu olor, ¿Te puedo ver aquí esta noche?, Gracias por la rosa.
La tomo y se digirió hacia la salida, yo no podía procesar lo que estaba sucediendo, nunca había tenido contacto con nadie así de cerca ni mucho menos que alguien notase mi aroma corporal y hablara bien de él creo que me gusta...
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Hoy termine temprano me desvele ayer con ideas buenas nos vemos el próximo capítulo nenis espero les guste ✌🏻🥺
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ULTRAVIOLENCE [Akutagawa x Higuchi]
Teen Fiction🚫⚠️⚠️Primero que nada estos personajes no son míos son de Bungou Stray Dogs solo los utilice para crear esta historia, y también quiero decirles que esta es mi primera vez escribiendo y que esta historia contiene contenido sexual y algo de violenc...