Hooked || Lust Gradient

I'll tell him

Horror y Lust habían llegado relativamente temprano hasta la academia, tanto como para darle un tiempo de práctica extra al de ojos lilas como para tratar de interceptar al joven hermano de Gradient, el del parche tendría que ser sutil de verdad.

No era como si pudiera ir a donde Paper y decirle: "Hola, soy de los pocos amigos de Lust y quisiera saber si tu hermano mayor gusta de él de verdad porque mi amigo está enamorado pero teme salir lastimado. Ya sufrió mucho, la verdad."

Definitivamente no, esa sería una pésima idea.

—Voy a calentar. —anunció el joven profesor, pronto se dirigió hacia los cambiadores para alistarse— 

Ahora solo, Horror pudo ponerse a pensar en lo que le diría al joven para conseguir la información. Según Lust, PaperJam era amable -aunque no demasiado- solo con las personas que le agradaban y era obvio que no podría caerle bien en seguida así que tendría que cuidar sus palabras. Tal vez así podría chantajear luego a su amigo para conseguir que le debiera más comida.

Sonrió, casi de manera macabra, al observar al joven ingresar a la academia. Era un poco más temprano de su hora de clase y fue fácil reconocerlo por la mueca de disgusto en su rostro, clara apatía inscrita en su expresión.

PaperJam entró con sus grandes audífonos negros y ropa ligera de ejercicios que era de tonalidades mayormente azules. Marcó su asistencia con la secretaria del lugar y caminó hacia las bancas, sabía que cuando su profesor llegaba temprano era para practicar un poco antes de dictar las clases.

Horror suspiró, mentalizándose de manera rápida para pronto acercarse como si fuera a sentarse. Pronto Lust salió de los cambiadores, comenzando una rutina corta que él mismo había inventado poniendo muchas de sus horas en aquel baile.

La mirada de PJ estaba posada sobre su maestro, pero no era admiración por su perfecto baile, era más curiosidad y el hombre del parche consideraba eso como una clara señal de que tenía razón, Gradient debía haberle hablado sobre el corto roce entre ambos. 

—Uh, tal vez no sea de mi incumbencia, pero estás mirando mucho al profesor. —habló el mayor, sobresaltando ligeramente a Jam aunque ganándose su atención con relativa rapidez— ¿Te gusta acaso?

—Si fuera así igual no sería algo que tuviera que importarte. —habló mordaz el menor— Cállate y concéntrate en tus asuntos.

—Hey, no te amargues. —alzó las manos, en señal de paz. Al menos había conseguido que le hablara, seguiría por ese camino, tal vez un pequeño jugueteo para hacerle soltar la información que quería— No te culparía si te gustara, digo, es radiante.

Jam lo observó con cierto enfado, era como si sus pupilas pudieran cambiar con cada emoción que sentía. Suspiró y observó su celular pero de todas maneras habló con desinterés.

—A mi no me gusta, pero conozco a alguien a quien si. No paro de escuchar sobre lo maravilloso que Lust le resulta, además de escuchar las fantasías en voz alta respecto a probar sus labios por más de un par de segundos.

—¿En serio? Suena como si esa persona estuviera completamente enamorada o al menos atraída hacia él. 

—Ni lo digas, sé que lo está. Es adorable pero a la vez un poco irritante. —murmuró el menor, observando que el esmalte fucsia de sus uñas no se hubiera salido— Probablemente no debería estar hablando contigo, ¿sabes? Eres un desconocido y no debo confiarme de ellos.

Cruzaron miradas, PJ seguía con desconfianza pero su contrario no le irritaba demasiado, por alguna razón.

—Oh, cierto. Perdón por la descortesía. Soy Horror y soy uno de los alumnos de Lust, pero tengo otro horario, había venido a disculparme con él por faltar a una clase. En fin, probablemente tú y yo no nos volvamos a ver pero fue un gusto.