Lust tenía un poco de nervios, no podía evitarlos ni aunque no fuera algo particularmente difícil. . . ¿A quién engañaba? Estaba siendo consumido por los nervios y ni siquiera era como si fuera su boda.
Su boda, ¿algún día se casaría? Tal vez, no sabía. Probablemente no era buen momento para pensar en eso.
Acomodó su corbata, observando que combinara bien con su blazer de tonalidades azules y con su camisa blanca. Caminó hacia el espejo de su habitación, buscando que todo estuviera bien, sin arrugas o cosas que arruinaran su creación. Sonrió nervioso, no lucía nada mal sinceramente.
Caminó hasta la sala, tomando el celular de su mesa de estar y notando que al final ya había llegado el taxi que había pedido. Una sonrisa más tranquila se apoderó de sus labios mientras salía de su departamento, no sin antes sacarse el blazer para que no se ensuciara con nada, detestaría si pasara eso.
Pasó por la puerta ajena, no se molestó en tocar ya que después de todo había quedado con Gradient el encontrarse allá, el moreno había tenido que ir hasta la casa de sus padres en busca de su ropa formal para el evento.
Ignoró el leve pensamiento de preocupación respecto a si los padres ajenos creerían la pequeña mentira de "un amigo de la universidad me invitó", porque al parecer Error e Ink seguían demasiado impactados de que su hijo mayor pudiera hacerse amigo de su vecino.
Era probable que esa incredulidad fuera causada porque en todos los años viviendo en su antigua casa Gradient nunca le dirigió ni la más mínima palabra a sus vecinos, tal vez un Hola y un Adiós, pero nada más.
Saludó con cortesía al taxista que lo llevaría hacia el local esa tarde y se subió en el vehículo.
—A esta dirección, por favor. —pidió, risueño— ¡Y muchas gracias!
No podía esperar a llegar a la boda de Mett y Sans, y a su fiesta después del evento principal. Moría de ganas de observarlos realizar el baile que les enseñó con tanta dedicación.
Tiempo fue lo que más rápido pasó, en un parpadeo se encontraba en la capilla, aguardando por los prometidos. No evitó su sonrisa radiante cuando observó a Gradient llegar y hacerse espacio en la banca.
Parecía ser que al final sus padres si le creyeron.
Lo observó, lucía muy bien con su traje gris. Radiante. Hermoso.
Después se lo diría, en definitiva.
***
—Los bailes que practicas no son útiles como estos. —susurró su padre al oído del peliblanco, enfatizando cada palabra, siendo despectivo con las danzas que su hijo practicaba— Será mejor que aprendas esto, Lust. Es tu deber como heredero de mi empresa.
Oh, era increíble que la simple presencia de su padre hiciera que el desagrado por la danza surgiera en el de ojos lilas.
Fue solo un instante breve en el que el joven le dirigió una mirada vacía, tal vez algo seria.
Pero el joven supo que cuando el evento terminara recibiría una golpiza por su "arrogancia", era claro que aquel serio hombre no lo iba a tolerar. Siempre tenía la necesidad de apagar la chispa de rebeldía que existía en su primogénito.
Y sin Niel que protegiera a sus hijos, él tenía el poder total sobre Lust y el menor. Los moldearía como le diera la gana porque ellos eran suyos, sus "objetos" que terminarían siendo como él quería o que tendría que desechar.
—Danza conmigo, para que aprendas algo bueno, pequeño inútil. —vio la mano extendida de su padre, era obvio que no aceptaría una negación. El joven ahogó un quejido por la manera en la que apretó su mano, como si quisiera lastimarlo de verdad— Espero no nos hagas quedar en ridículo si aprecias tener tres comidas al día.
Inevitablemente resultó sobresaltado, pero volver a la realidad de verdad le servía de mucho a Lust. Fue solo un momento pequeño pero había salido de su mente en algún momento y ahora se encontraba de vuelta a la realidad.
Gracias a Gradient.
Sonrió con algo de confusión, no había escuchado lo que su contrario le preguntó por haber estado perdido en sus memorias. Casi ni recordaba que ya habían llegado a la fiesta del evento.
—Perdón, querido. No escuché bien. —hizo una mueca ligera, apenado por aquello— ¿Lo repites por favor?
El pelinegro había notado la sombra de tristeza de su mirada, probablemente causada por algún recuerdo malo o tal vez un pensamiento terrorífico. Aún así, no lo abrumaría con preguntas que lo hicieran entristecer más.
—Te decía que si esa presentación que anunciaron que harán va a ser la que tú les enseñaste. —sonrió con amabilidad, bastante sereno a decir verdad— Ya van a iniciar al parecer.
Lust rápidamente volteó a observar lo que Gradient le había mencionado y ahogó un chillido emocionado al ver que si, efectivamente era lo que tanto había esperado. Estuvo a punto de aferrarse a su contrario cual pequeño koala por culpa de su emoción.
—De verdad espero que todo salga bien. —susurró al pelinegro cuando la música comenzó y aparecieron los recién casados para dar inicio al show que sería seguido por el gran festejo— Se han esforzado mucho.
—Seguramente todo saldrá perfecto, tú lo planeaste después de todo. —respondió el de gafas, inclinándose un poco en dirección ajena para que le escuchara por sobre los murmullos de asombro de la gente— Todo estará bien, puedes relajarte.
El mayor observó de reojo a su contrario, una sonrisa ligera adornó sus labios antes de darle un pequeño beso en la mejilla, Gradient siempre lo calmaba demasiado, era algo que siempre le parecía extraordinario.
—Gracias. —murmuró al notar la mirada estupefacta y aquel leve rubor que adornaba las mejillas del más alto— Por estar aquí.
—Un placer. —atinó a decir Gradient, aún ruborizado, peor aún por la hermosa sonrisa que Lust le dedicaba— Siempre es un placer.
Parecía que sería una fantástica noche de fiesta de bodas.
La que escribió una parte del capítulo con Fairytale sonando y luego la otra mitad con Procura.
Quería subir ayer pero mi cerebro no colaboró y mis brazos menos, además tengo como 2 o 3 tareas finales esta semana ajahjasaf.
PD: Si hay algo que amo sooooooooooon, las escenas detrás de "cámaras", y aquí hay una¿
ESTÁS LEYENDO
Hooked || Lust Gradient
Fanfiction-No diría que esa fue la mejor forma de conocernos, ¿sabes? -¿Te arrepientes? -preguntó el de piel morena con una leve sonrisa mientras observaba a su contrario acercarse hacia él- Creo que las cosas suceden por algo. -Jamás me arrepentiría. Eres el...