Homicide love.

Capítulo 17

Advertencia: Escena +18, si no te gusta puedes saltarte el capítulo.

Es una pequeña presión la que hay entre sus labios y los míos antes de que me vuelva la razón.

Me intento separar, pero no logro alejarme mucho ya que sus manos van a mi cintura atrayéndome a su cuerpo y volviendo a unir sus labios con los míos.

Esta vez el beso no es sólo una pequeña presión, es profundo, sus labios se mueven con destreza sobre los míos.

Si, sigue. Esto me gusta...

Y mi consciencia hace acto de presencia... Y como siempre no dándome buenos consejos.

Pero este te gusta.

Mis labios tienen vida propia cuando le siguen el ritmo a los suyos. Siento una pequeña mordida en mi labio haciendo que los abra y permitiéndole el acceso a su lengua en mi boca.

Me pongo de puntillas tomando su cabello entre mis manos y jalándolo levemente. Suelta un gruñido acercándome más a su cuerpo, si es que es posible.

—Darleen...

Su voz esta ronca por la situación y la manera en la que me toma del cabello para separarme de su boca y dejándole total disposición de mi cuello, hace que una corriente pase por toda mi espalda y que sienta mis pechos endurecerse. Gimo al sentir su boca atacar mi cuello, dejando varios beso en esta zona.

Así Darleen desahoga toda lujuria que tenías desde que lo conociste.

Ni siquiera en estos momentos mi conciencia deja de fastidiar, pero me olvidó de eso al sentir un que Ryder chupa con fuerza mi cuello.

Eso dejará un chupón.

—Maldición...—Gimo al sentir sus manos masajear mis senos por encima de la ropa.

Saca la cabeza de la curvatura de mi cuello viéndome con una sonrisa, sus ojos se encuentran dilatados por la excitación y su respiración agitada.

Y Puedo apostar un millón de libras a que me veo de la misma manera.

Tomó impulso volviéndolo a besar con la misma o más intensidad que el beso anterior.

—Darleen...—Dice entre el beso.

— ¿Umm...? —Sus labios no se separan de los míos.

— ¿Segura? Apenas me conoces de días. —Se separa de mí y lo miro incrédula.

—Una persona va a un club y conoce una persona por tres minutos antes de follar, no hay mucha diferencia. —Me cruzo de brazos.

Sus labios rojos, su pelo desordenado y sus pupilas dilatadas por la excitación, me hacen querer llegar a más, pero no me deja.

—Pero yo no soy un chico normal.

— ¿Eres un zombie? —Cuestiono divertida y un poco irritada.

Se muerde el labio intentando no mostrar la sonrisa que se crea por mi comentario.

—No, pero...

—Pero nada. —Lo corto.

Lo atraigo besándolo nuevamente con más intensidad y desespero.

—Espera...—Me detiene de nuevo y me quejo.

— ¿Ahora? —La desesperación y un poco de molestia en mi voz se hace notable.

Ríe y camina hacia un árbol con una pequeña caja sujeta a este

¿En qué momento apareció eso ahí?