Capítulo I: Volver

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Eira volvía emocionada de la escuela en la que trabajaba, pues había recibido su sueldo y tomaría vacaciones.

Cuando llegó a su casa abrió la puerta, dejo su maleta en el sillón y dijo: mamá ya llegué, ¿Dónde estás?

-Estoy en la cocina, preparando galletas de almidón- Eira se dirigió a la cocina, saludó a su madre con un abrazo y un beso, luego exclamo: ¿Qué tal tu día? ¿Alguna novedad?-Su madre siguió colocando las galletas en la bandeja y respondió: Si, Richard llegará un poco más tarde de lo usual, saldrá a festejar, ya que lo promovieron.

-¡Aleluya! Ya era hora de que le dieran ese aumento, se lo merece, trabaja más que una mula de carga- después de decir esto agarró una de las galletas crudas y se la comió a lo que su madre se apresuró a decir - No te comas la masa te va a hacer daño - Eira, sonrió divertida y añadió - sabes que no me puedo enfermar - su madre también sonrió y le cuestiono - Y hablando de enfermos ¿volviste a usar tus poderes? - Eira trato de evadir la pregunta - Estas galletas me encantan.

-Eira te hice una pregunta - insistió, pero Eira la volvió a evadir-¿Cuál es tu secreto para que te salgan tan ricas?

- No estoy para tus bromas, te hice una pregunta y aún no tengo respuesta- Eira bajó la cabeza y sin mirar a su madre respondió: Sí.-¿Y qué fue esta vez?

- Entonces Eira empezó a narrar: Una de las alumnas, se lastimó la herida era profunda y se lastimó con algo oxidado, la cure de la forma tradicional y después cuando estaba distraída la cure con mis poderes. -Su madre respiró hondo para no perder la calma.

-Tu trabajo es enseñar, no curar a los niños. Ese es el trabajo de la doctora. ¡¿En qué estabas pensando?!

Sabes que es peligroso, si alguien descubre que tienes habilidades curativas, podrían llevarte a un centro de investigación y harían experimentos contigo.-Eira notó que su madre estaba más desesperada de lo habitual, era claro que ocultaba algo. Usualmente cuando le decía que no utilizara sus poderes, era como una advertencia simple, sin importancia.

-Mamá ¿Sucede algo que no me has dicho? No estás así solo porque use mis poderes ¿cierto? Su madre puso las galletas en él ornó, activo el temporizador y le dijo con una cara de angustia: Vamos a la sala, será más cómodo hablar allí.

Para muchos, la sala puede ser el lugar más cómodo de la casa, el vestíbulo donde se recibe a las visitas, el lugar más chic de la casa, pero para Eira, era el salón donde se acogían las malas noticias.

Se sentaron y su madre comenzó a hablar: -Tengo dos noticias, una buena y otra mala. Primero, la buena, vas a ser hermana mayor.

Eira, salto y grito de emoción ante tal noticia, se acercó a su madre para tocar su vientre y exclamo: Es la mejor noticia del mundo, seré hermana... No puedo esperar a que Richard sepa que será padre.

-Sí, apuesto que estará muy contento. Así que... ¿No te molesta tener un medio hermano?

-Mamá, este bebé es mi hermano, es verdad que no soy la hija de Richard, pero lo quiero como si fuera mi padre de sangre y sé que él siente lo mismo por mí. Las verdaderas familias no son las que están unidas por la sangre, sino por el amor. Eso es lo que de verdad importa.

-Entonces, ¿Ya olvidaste a tu padre, a tu abuela a Bragi y tu vida en Elin? ¿No te gustaría regresar?- Eira, estaba sorprendida por la pregunta de su madre, no venía al caso así que respondió:

- No invoques a ese conjunto de difuntos, Elin quedo atrás por fin tenemos una vida feliz como siempre lo soñamos. ¿Por qué quieres hablar de esto?

- Tu padre y Bragi están muertos, pero tu abuela sigue viva... - antes de que pudiera continuar Eira la interrumpió diciendo: -Esa desgraciada, nos desterró y desde el día que nos abandonó aquí, para mí murió - cambio su tono serio y enojado a uno burlón, sarcástico y añadió- Incluso le hice un funeral, estuvo tan bonito que incluso me emocione - termino diciendo eso figiendo que se secaba una lágrima.

ATADA A LOKIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora