Capítulo 1

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Capítulo 1
Dolor

—Lo siento mucho de verdad—miro sus ojos que transmiten culpa.

—¿Por qué?

—Yo...

—¡Dime por qué!— grito apunto del llanto.

—¡Porque ya no siento lo mismo!—Una lágrima caliente se desliza por mis mejillas—Nena, no llores...—se acerca a mí y extiende su brazo pero lo aparto rápidamente.

—¡No me toques! Eres... Eres repugnante—le señalo con mi dedo—No quiero saber nada más de ti, no me escribas, no me hables y no me busques.

Me doy la vuelta con las lágrimas cayendo, cuando doy un paso hacia adelante siento como me agarra del brazo y me jala a él bruscamente.

—¡Suéltame Sucio!—intento zalparme de su agarre.

—Escucha... Sé que lo que he hecho no tiene perdón, pero quiero disculparme por el daño que te he hecho, ahora estarás muy cabreada conmigo y no me querrás ver, pero por favor, entiende que yo no quería engañarte, sólo surgió y no me detuve.

—¡Con mi mejor amiga!

—Raquel... Lo sentimos—responde esta vez la aludida.

Los observo detenidamente, es normal que mi novio, corrijo,ex novio se fijara en ella, es mil veces más guapa que yo y tiene un cuerpazo, es alta, su cabello es un pelirrojo cobrizo, sus ojos verdes esmeralda, la nariz de puente alto, labios carnosos y unas curvas y piernas largas increíbles.

Por otro lado él era el chico perfecto para mí, su increíble altura me volvía loca, su pelo rubio, ojos color miel, labios gruesos, nariz puntiaguda, cuerpazo atlético bien formado, era cariñoso, estudioso, agradable...En fin, el chico que todas queremos tener pero me falló.

Os preguntaréis cómo los he pillado y qué pasó, os lo contaré.

Empezábamos un nuevo curso, había pasado unos cuantos días desde las primeras clases, estaba en la cafetería del instituto con mis dos amigas junto a la barra donde se encontraba las cocineras repartiendo la comida a los alumnos.

El lugar estaba lleno de personas, normal, era la hora del almuerzo, sin embargo, no todos decidían ir a comer allí, algunos iban al patio o a los pasillos.

—Hoy toca puré de patatas con ensalada, vaya mierda—pone una mueca de asco Ari.

—Es lo que hay, es eso o nada—responde la cocinera.

Ari frunce el ceño antes de alejarse, después de que Ana y yo también tuviéramos nuestro almuerzo nos sentamos en la mesa donde nos esperaba Alexander, mi novio.

—Hola amor—me da un beso en la mejilla—¿Qué tal las clases?

—¡Genial! La señorita Green me aprobó el trabajo con un notable.

—Te equivocas— dice Ari con la boca llena.

—Mmm no, ella me dijo que...

—No es eso, te has equivocado al llamarla, aquí la llaman Fregona—la miro confundida— Por su pelo de estropajo, ¿No os parece gracioso? Oh venga ya, tenéis el sentido del humor en el culo.

El Misterio Detrás De Él(COMPLETA✔️)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora