Bully Love [Loliplay]

13: Cambios En La Preparatoria

Ya había pasado al rededor de tres semanas desde que las clases habían sido suspendidas para cada estudiante de la preparatoria, y los padres del azabache le habían dicho, que se les fue informados de que al día siguiente volverían a las instalaciones a retomar sus clases normalmente.

Para él no fue ningún tipo de problema, incluso decía que era un alivio, no le gustaba estar todos los días encerrado sin compañía.

El día anterior, como "buen" estudiante que era, preparó todo para el día siguiente, un lunes que había esperado por un buen tiempo. 

Tanto ansiarlo, para él el tiempo había pasado demasiado rápido, o quizá era porque se durmió de madrugada y solo tuvo dos horas para dormir. Que en su caso era lo más probable.

Ya se encontraba vistiendo la ropa que llevaría ese primer día de semana, eligiendo algo casual; un pantalón de sudadera negro, un abrigo cerrado blanco y tenis blancos.

En un abrir y cerrar de ojos ya había desayunado, se había preparado, y ya estaba saliendo de su casa hacía la parada de autobús. Despidiéndose de la nada y encaminandose con tranquilidad y una media sonrisa plasmada en sus labios.

En la cabina metálica, miraba por la ventana con una sonrisa de punta a punta, se sentía emocionado y ansioso, sin razón alguna. Cualquier otro joven diría que prefería quedarse en casa a volver a la preparatoria de nuevo, pero era todo lo contrario en el caso del moreno, quería volver, se aburría solo en casa.

A su vez pensaba en cosas variadas, como la poca información que reunió por parte de los azabaches castaños, los días que pasó pensando en todo lo reunido para hallar una respuesta coherente, entre otras cosas que no le dejaban pasar su tiempo libre de pensamientos.

No pasó más de diez minutos cuando ya se encontraba en frente de la preparatoria, si que rentaba el transporte, mejor aún que no era necesario su agotamiento físico, agradecía el dia que se ocurrió la brillante idea de empezar a usar el cerebro. Sin nada que esperar entró en ella.

De primera mano, se notaba a las personas perdidas, como si no hubieran vuelto a la preparatoria en años. Se les veía conversando extrañados, y por lo que alcanzaba a oír, el porqué estuvieron tres semanas sin clases.

Era un buen momento para cuestionarse eso también, ¿Por qué les suspendieron las clases casi un mes?. No veía algún docente como para preguntar y salir de duda, otra pregunta que le surgió respecto al tema cuestionado, fue; ¿Por qué aún no había sonado la campana?. Quizá estaba exagerando, pero pensaba que el día estaba siendo extraño, o por lo menos los primeros minutos que llevaba allí.

Restando importancia a eso, decidió caminar hacía su salón antes de que sonara la dicha campana, y en la mitad del camino esta sonó, asustando al moreno en el acto.

Ya frente a la puerta pudo visualizar a sus compañeros de clase ir llegando, y sin falta a su querido amigo ambarino, que, como pudo imaginarse, venía acompañado del albino. Soltó una risa al notar como el mayor venía abrazado a él lloriqueando, nuevamente haciendo drama por verlo después de tanto tiempo según sus deducciones, y el contrario solo le seguía el juego. Decidiendo no interrumpir su obra de teatro al aire libre, se preguntaba porque la docente encargada de su curso no llegaba aún.