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Mientras esperaba a Minho fuera del local mientras él se encargaba de cerrar todo, recibí una llamada de Misuk.

- Hola- contesté.
- Este fin de semana viajare con mi Jinnie a Daeugu como festejo por mi cumpleaños, nos quedaremos por un mes aquí y volveremos para el día exacto de mi cumpleaños, ¿quieres venir con nosotros?- preguntó.
- Prefiero tragarme vomito que tener que aguantar escuchar como follan- dije riendo.
- Yo queriendo ser amable y tú siendo grosera como siempre. Bien entonces tienes el departamento libre, puedes hacer lo que quieras pero no te folles a nadie en mi habitación- dijo Misuk.
- Como si no lo hubiera hecho antes- reí cortando la llamada al escuchar como empezó a gritarme vulgaridades inentendibles.

Era mentira, jamás follaria en la cama de mi mejor amiga, eso era asqueroso y la respetaba demasiado.

Minho salió y fuimos a un centro comercial cercano.

- ¿Quieres ir al parque?- propuse.

Como no tenia amigos, no podía venir sola a estos lugares porque era aburrido sentarse sola en un asiento para tres. Esta podría ser mi oportunidad y no quería desaprovecharla.

- Creo que debería aclararte algo antes de ir- sonrió nervioso con un leve rubor-. Tengo miedo a las alturas.

- ¿Qué? ¿En serio?- reí y él asintió.

- Pero... Podríamos subir al carrusel- rió.

- Claro... El carrusel... Super maduro- reí cogiendo su brazo para entrelazarla con la mia-. Aunque suponiendo que nunca sales, esta podría ser tu mayor aventura.

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- No sé como llegué hasta aquí- dijo Minho con las piernas temblandole.

- Será más rápido de lo que pienses- dije entusiasmada esperando que el carrito de la montaña rusa se moviera.

- ¿Es tarde para arrepentirme?- preguntó y lo miré, se veía realmente asustado.

-  Mantengan brazos y piernas dentro del carro- dijo el hombre que nos ayudo a subir-, no se levanten antes que la atracción este completamente parada y se les indique que pueden salir, no toquen nada de los sistemas de seguridad. Y eso es todo, disfrútenlo.

- Ya es tarde- sonreí.

El carro empezó a moverse lentamente y Minho cerro los ojos inmediatamente haciendo que ría.

Realmente tenia tanto miedo como decía.

Subiamos lentamente una colina muy empinada y en el momento en que llegamos a la cuspide puse mi mano sobre la de Minho haciendo que el abra los ojos sorprendido para verme pero el movimiento violento del carro mientras comenzaba a bajar hizo que se volteé a ver de frente y comenzará a gritar como si lo estuvieran clavando. Vi a Minho gritar desmayarse, volver a despertarse, y repetir esa serie unas cuantas veces haciendo que verlo se vuelva mucho más divertido que la montaña rusa.

Solo duró unos minutos y tuve que ayudar a Minho bajar riendo de su situación.

- Creo que vi a Dios varias veces- dijo entre risas. Incluso el sabia lo divertido que era su situación.

- Ahora podemos ir al carrusel que tanto te emociona- dije sosteniendo su mano para llevarlo hasta el lugar, viendo como se sonrojada.

Ambos subimos a dos caballitos junto con niños y adolescentes con su uniforme haciendo que la nostalgia venga a mi.

Había perdido mi adolescencia por estar en un cuadre depresivo.

Me quedé viéndolos reír y hacerse bromas que no había notado que el juego había parado.

- Vamos a comer algo- ofreció Minho haciendo que vuelva a la realidad.

Caminé junto a él distanciándome al ver que habían personas de la universidad que nos veían haciendo que Minho abandone su sonrisa por un semblante serio.

Quizás se esté arrepintiendo...

- ¿Qué tal si nos vemos otro día?- dije cuando llegamos a una tienda.

- ¿Qué?- me vio confundido.

- Muchos te conocen y también a mi, no quiero incomodarte- dije apenada-. Seguro sabes de lo que dicen de mi.

- Claro que lo sé- dijo haciendo una línea con los labios- y también sé, que estoy completamente seguro de que me gustas y que no me importa con quien te acostaste, después de todo ellos son nada más que animales de compañía.

Le gusto pero eso no cambia de que justo ahora recuerde a Hyunjin.

Tanto tiempo sin pensarlo y que en el peor momento lo haga, me amargaba la existencia.

Me cogió la mano con una sonrisa y me llevó hasta una mesa libre.

Minho era tan encantador como pensaba y el hecho de que no me juzgaba hacia que mi corazón se acelere y sonría como una niña a quien compraron su dulce favorito.

Minho se levantó para acercarse a mi rostro y depositar un beso en mi mejilla.

- No me importa lo que crean, a mi me gusta la chica que está siempre llega sola a la universidad aparentando ser fuerte y se va siendo indefensa para luego ir a mi cafetería burlarse de mi, pedir un frappuccino para enredarse con sus estudios- dijo sonriendo para luego alejarse y dejarme el aroma de su perfume.

¿Cómo no enamorarme de aquel aroma tan embriagador, masculino y dulce a la vez?

Nunca lo había notado pero su aroma me hacia creer que ya lo había conocido en otro lugar.

Quería quererlo tanto como él aparentaba hacerlo conmigo pero tenia miedo, mucho miedo.

No quería que vuelvan a jugar conmigo, yo era la que jugaba ahora pero tampoco quería jugar con él.

Vi a Minho volver con lo que había pedido para ambos.

Así que decidí dar un paso para ambos.

- ¿Quieres ser mi mejor amigo?- pregunté haciendo que él se sorprenda pero luego sonría.

- Lo que sea que me ofrezcas para mi siempre será la mejor opción, _________.











Gracias por leer y apoyar el libro💜

Stupid (Hwang Hyunjin) (1ra Parte) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora