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Después de una larga charla y miradas que intentaban decirse de todo, estabamos en el sofá. Hyunjin acostado entre mis piernas y yo acariciandolo.

- No sabes cuanto te odié- susurré peinando el cabello de Hyunjin.

- No fuiste la única, yo también te odié- dijo haciendo círculos en mi abdomen.

Odiaba seguir sintiendo mariposas cada vez que él hacía eso, me era imposible no sentir nada pero eso no cambia que él era el prometido de Misuk.

- Te llame tantas veces y te escribí mensajes todas las veces en que te extrañaba o en las veces en que me sentia molesto contigo- quitó su celular de sus vaqueros para mostrarme nuestro chat.

No mentía había cientos de mensajes.

- Deje de enviarte mensajes hace un año cuando me di cuenta que hace más de tres años tu número había sido bloqueado.

- Mi madre lo bloqueó y me dio otro número- reí.

- Estaba tan enojado cuando supe que estaba bloqueado, creyendo que lo habías hecho tú. Ni siquiera sé por qué me enojé, supongo que quería que sufrieras igual que yo.

Tenerlo en mis piernas mientras lo escuchaba me calmaba tanto y hacia que todo lo que sufrí sea tan diminuto.

Era como si un circulo de mi vida que antes no se había cerrado ahora lo estaba completando y se sentía tan bien.

- Al menos no te pasabas buscando mi rostro en el de otras personas como lo hice yo- reí avergonzada.

- Yo caminaba con la mirada al piso, no quería verte ni siquiera de casualidad- se sonrojó.

- ¿Esa fue la razón por la que fuiste tan violento conmigo cuando te vi en el auditorio?- pregunté.

- No te mentiré- se sentó para verme a los ojos-. Quería lastimarte y creo que si no hubieras huido, lo hubiera logrado.

- ¿Cómo?- dije incrédula.

- Quería darte la follada de tu vida para que no puedas olvidarme nunca sin importarme si te hacia daño. Queria decirte que "aún te sigo queriendo" para que lo recuerdes toda tu vida. Para que te quite el sueño. Para que te obligue a recordarme después de cada follada con alguien que intente usurpar mi lugar.

Me quedé callada.

¿Cómo debía decirle que sin haberme follado en ese auditorio yo lo recordaba?

Se acercó a mi y me besó, un beso con sabor a lagrimas, no sé si eran mías o las de él, solo quería sentirlo de nuevo conmigo.

Incapaz de mantener tanta distancia paso mis manos por su nuca para acercarlo a mi y sentir sus brazos rodearme me traía tantos recuerdos.

- ¿No huirás?- pregunta en medio del beso haciéndome sonreír negando con la cabeza.

Claro que no lo haría, yo lo necesitaba, más ahora que dejé de odiarlo.

Besó mis labios para luego encaminarse por mi cuello y empezar a quitarme la bata que tenia puesto.

Me agradecía internamente por dormir sin brasier y pantalones, solo con la bata  y mis bragas.

Amaba como Hyunjin podía lograr que me mojara con solo unos toques y algunos besos. Él era perfecto con los juegos sexuales previos, no entendía como hacía para que sus labios sean húmedos en cada beso que dejaba.

Podía ver como él se quitaba la camisa sin parar de dejar de dar besos y eso me excitaba mucho más.

Hyunjin era demasiado atractivo para mi.

- Te odio por volverte más hermosa- dijo cuando se separo de mi para quitarse los pantalones.

Eso me hizo sentir avergonzada de repente haciendo que doble las piernas pero Hyunjin me detuvo con una sonrisa de lado.

Estiró mis piernas nuevamente y me bajó las bragas lentamente sin apartar la mirada de mi cuerpo.

Se relamió sus labios abriendo mis piernas y eso me puso nerviosa, sabía lo que haría pero había pasado tanto tiempo de la última vez que me hicieron un oral, y fue él mismo la última persona que me lo había hecho, que me hacia sentir nerviosa hasta que sentí su lengua explorando de nuevo.

Mi vientre se encogió. Eran demasiadas sensaciones que no creía poder aguantar mucho.

Mi espalda se encurvaba tanto que juraría que mañana al despertar tendría un terrible dolor pero ahora solo quería sentirlo.

- Hyunjin... Para...- rogué al sentir que mi orgasmo llegaría pero solo senti su respiración contra mi quizás de una pequeña risa.

Siguió metiendo su lengua en mi, hasta que mi orgasmo llegó y él no apartó su boca.

Estaba tan cansada como si hubiera corrido una maratón pero recién había empezado.

Quería devolverle el favor como antes lo hacía pero estaba cansada y creo que él lo notó porque me alzó en sus brazos llevándome a mi habitación que se lo señalé con el dedo.

Me recostó sobre la cama y empezó a quitarse el resto de la ropa que tenía para luego ponerse entre mis piernas.

- Realmente te extrañé- susurró acercando su boca a la mia para luego besarme en el momento en que entraba en mi sin esperar demasiado haciéndome jadear por lo sensible que estaba por el primer orgasmo.

¡Dios! No lo recordaba tan grande.

Su pene estaba tan duro y rígido que me incomodaba.

Tomó distancia para ensartar de golpe haciendo que gimiera al igual que él lo hacia en mi oído.

- ¿Te gusta así o quieres hacerlo rápido?- preguntó y por su voz parecía estar tan al borde de un orgasmo.

Asentí sin poder responder haciendo que él repita la acción.

- Hyunjin...- gemí arqueando la espalda.

- ¿Quieres que continúe?- preguntó.

- Haz lo que quieras, solo muévete- dije desesperada por sentirlo.

Se sujeta de mi cintura para ponerse rígido con una sonrisa para luego empezar a embestir contra mi sin pausas ni treguas. Él era tan imponente y posesivo con mi cuerpo con su mirada, su belleza y en especial su virilidad que solo verlo podría darme orgasmos.

Habíamos tenido sexo en todas las posiciones y en todos los lugares posibles como si quisiéramos recuperar el tiempo perdido. No me importaba que los vecinos me escucharan gritar hasta la madrugada.











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Stupid (Hwang Hyunjin) (1ra Parte) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora