Capítulo 16

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Desconocido
Hace 9 años

Ahí estaba ella, tan linda como siempre, tiene solo 8 años pero ya es una preciosura.

–Gaby mi pequeña–la llamo, ella voltea viniendo hacia a mi y abrazándome.

–Ethan–dice mi nombre–Te extrañé mucho.

Le besó la coronilla y luego la cargo.

–Pero ya estoy aquí.

–¿Te vas a quedar?–si dije hermosa, ahora aparece una princesa que irradia luz y felicidad y el que me mire con tanta ternura, inocencia y amor me calienta el pecho.

–Si, pero solo una semana.

–Ok–hace un pequeño puchero–Pero no me dejes sola con las tareas ¿Si?

–Bien pequeña.

Gaby, tan pequeña e inocente, no sabe que quiero amarla y cuidarla, protegerla de todos los imbéciles que se le acerquen.

La ayudo con sus tareas escolares y en la noche no aguanto más, voy a su habitación y parece un ángel durmiendo.....

Gaby

Estaba dormida, pero siento que alguien se sienta en mi cama.

–¿Ethan?–siempre lo e llamado por su nombre–¿Qué pasa tienes pesadillas?

No me contesta, pero no entiendo que pasa.... Me empieza a besar por toda la cara pero no como lo hacía antes.... También me.besa la boca, nunca me había besado la boca.

–No sabes cuánto te quiero pequeña Gaby.

–Yo también Ethan, pero esto no me gusta.

–Te va a gustar ¡Ya lo verás!

De un segundo a otro me baja el pijama y no entiendo qué quiere hacer, no es hora del baño así que no me lo debo quitar, pero lo que hace me de un escalofrío.

Empieza a recorrer mis piernas con sus manos, pero están muy frías y me dan sensaciones feas.

–Ethan quiero dormir.

–Pronto lo harás.

Para cuando trato de moverme, me atrapa en un brazo.... Yo apenas tengo 8 años, Ethan me gana en tamaño y fuerza y siempre gana en las competencias, pero yo solo quiero dormir.

Cuando me atrapa con un brazo, la mano que me quitó el pijama va a mi vulva (aprendí ese nombre en la escuela).

–¡No! ¡No hagas eso!–mamá siempre me ha dicho que solo debe ser ella.

–No te va a pasar nada.

Pero si pasó, metió 1 dedo, haciéndome llorar, me sentía muy rara, no me sentía alegre, ni llena de energía, me sentía sucia, como si hubiese hecho algo malo.

Él se separa para prender la luz y yo aprovecho para salir corriendo pero me vuelve a atrapar.

–Tranquila Gaby.

Me tapa la boca lo su mano libre, mientras pasa su brazo por mi cintura y claro, es el doble que yo su mano llega hasta mi vulva.

Vuelve a meter un dedo, yo miro hacia abajo llorando, me siento terrible, cuando lo saca veo sangre.... Me duele mucho y, me da mucho miedo que salga sangre, no entiendo porque sale sangre.

–¿Te duele?

Sólo asiento con la cabeza.

–Voy hacer que te sientas mejor.

Pero no lo hace, solo mete el dedo otra vez, pero haciendo una especie de movimientos que me hacen sentir muy incómoda y me duele mucho, empieza a gruñir y me asusta que haga eso.

Cuando se para, saca el dedo, lo lava en mi baño y me mira para decir:

–No le digas a papá y mamá, ellos no entienden que te quiero y no dejarían que vuelva a verte.

Con eso se fue dejándome sola en mi habitación, me bañé como me enseñó mamá, pero me seguía sintiendo sucia y como si hubiese hecho algo muy malo.

Las demás noches fueron lo mismo, ya no dolía tanto pero si me seguía sintiendo mal, como si ya nada tuviese color o sentido para estar feliz.

Con papá y mamá trataba de disimular, porque ahora era amenazas lo que recibía por parte de Ethan.

Mi amiga Citlali era la única que sabía y le hice prometer que no le dijera nada a papá y mamá, cuando entendí lo que me había hecho me puse a llorar.

«me violó» era lo que repetía mi cabeza, sólo quería que mamá me diera uno de esos abrazos que te pegan las piezas rotas del alma.... Pero mamá no sabía nada y yo solo me aferraba al peluche de mi cuarto, el cual ya estaba mojado por todas mis lágrimas.

Y así sucedió los demás meses, al principio me alejaba de los niños, porque Ethan decía que los niños eran malos y hacían algo peor que eso y, yo no quiería que me pasará más nada.

Cuando cumplí los 9 conocí a Daniel, es el único niño de aquí al que le hablo, gracias a él entendí que no todos los niños son como los describió Ethan, pero Ethan no soporta verme con Daniel, se pone molesto y cuando eso pasa me da nalgadas antes de meter los dedos.

Cuando desarrollé (ya estaba en Caleb) me aterré, porque la sangre me recordaba lo que me hizo Ethan, por eso me aleje de los gemelos en ese tiempo, sentía que me iba a hacer algo, me puse paranoica, pero Erick ya sabía mi secreto, así que cuando se lo expliqué entendió pero no me dejó sola, dejándome claro que me iba a proteger, creo que por eso siempre me gustó, aunque me lo negara, Erick siempre estuvo ahí, pero ahora iba a morir, Sebastián me estaba apuntando, pero ese no era mi miedo, a pesar de todo Ethan nunca me penetró con su miembro, pero sé que Sebastián está dispuesto a hacerlo, yo siempre me consideré virgen por eso, nunca fue una penetración directa como tal, pero el mero hecho de que me llegue a tocar me aterra.
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Ethan en multimedia

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