Capítulo 26

24 9 6
                                    

Gaby

No lo podía creer.... Erick, el chico que amo, mi príncipe, mi todo, murió.

No, no puede estar muerto.

—¡Erick responde por favor!–empecé a llorar–¡Te lo suplico no me dejes!–dije desesperada–¡AYUDA! ¡DOCTOR!–empecé a gritar, abrí la puerta y salí al pasillo–¡DOCTOR POR FAVOR! ¡AYUDA! ¡ALGUIEN SE LOS SUPLICO!–un doctor entró corriendo al cuarto, llamó a su grupo de enfermeras y me sacó, Elías me divisó, venía corriendo (por mis gritos seguro) al verlo solo empecé a llorar.

—¿Qué pasó?

Empecé a negar con la cabeza llorando..... Elías me abrazó.

—No esta muerto, no esta muerto, no esta muerto.....–repetí en susurros.

—¿Quién Gaby?

—Erick....–lloré con más fuerza–Elías yo....–no podía hablar–fue mi culpa....–el nudo en la garganta era insoportable–Dejé que hablara y se esforzara, dejé que se despidiera yo.....

—Gaby–me hizo mirarlo–lo que haya pasado no es tu culpa ¿Ok?–tenía los ojos cristalizados.

—Elías no se puede morir–caí al suelo–él no, es.... Es..... Dios lo amo ¿Ok?..... Y se lo dije.... Él me lo dijo.

—¿Cómo que te lo dijo?

—Me dijo...... Me dijo.... Te amo.

—Wow.

—No se puede morir, Elías por favor, sé que yo también te gusto, o lo sospecho.... El punto es que tú hermano no puede morir. No puede dejarme sola, me prometió.... Me dijo que...

—Que siempre iba a luchar contigo.

—¿Lo sabes?

—Me lo tuvo que decir cuando armamos el plan.

El saber que ideó el plan por su promesa, por las veces que tuve pesadillas, por ayudarme, por salvarme, sólo me hizo llorar más.

—¡Dios te suplico que lo dejes vivir! No puedo perderlo lo amo, por Dios lo amo, es el amor de mi vida.

Todo pasaba por mi mente, las noches durmiendo juntos, los regalos, las pesadillas, las personas que dejó inconcientes, nuestro primer beso.....

Me empezó a doler la cabeza y de un momento al otro, estoy en el piso viendo negro......

...

Desperté en una camilla de hospital, me desmayé eso seguro, pero no es eso lo que me tiene así, Elías y Citlali están en mi cuarto y, ¿Karen?

—¿Chicos?

—Gaby, despertaste–se acercó Karen, tiene los ojos rojos y Elías no me da la cara–,estábamos muy preocupados.

—Elías–lo llamé–Elías Granger mírame–de giro, estaba ¿Llorando?–¿Qué pasa?

—Gaby..... Erick.... No puedo.

—¿Qué no puedes? Habla maldita sea.

—Gaby....–se acercó Cit–¡Mierda! Esto es difícil.

—¿Qué coño pasa? Me están preocupando.

—Erick, murió–dijo Elías en un susurro.

—Gracias por el chiste.... Pero en serio ¿Qué pasó?

—Gaby–miré a Karen a los ojos y lo entendí, ella no es de llorar pero el que los tenga así me demuestra que es verdad–perdón.

—No, no, no, no, no y no..... ¡Joder no!–ya estoy llorando–Es mentira, una maldita mentira Erick no, por favor, Elías dime qué es mentira por favor, dímelo, Erick no pudo, no está......

—Perdón Gaby, es mi culpa–me dice Cit–la bala era para mi.

—Pero vale mierda ahora para quién era la bala, perdí al amor de mi vida.... A mi príncipe.... No.... Dios.... Me odia.... La maldita me odia.

—¿Quién?–preguntó Karen.

—La puta vida.... Me robó una infancia que pudo ser bonita, dándome un maldito abuelo violador y, cuando por fin soy feliz y ahora más porque tenía a Erick, me lo quita.... Me lo mata.

—Gaby tienes que calmarte–me dice Elías.

—¿Calmarme? Estoy calmada Elías, pero no entiendes.

—Era mi hermano Gaby.

—No hables de él en pasado.

—El que no lo aceptes no lo hace menos real.

—¿Cuando murió?

—En realidad.....–dice Karen.

—¿Qué?

—Estaba estable, entró en coma y pues.... Le diagnosticaron muerte cerebral.

—Malditos médicos no saben un coño, seguro está vivo.

—Lo van a desconectar Gaby, solo nos dieron permiso de despedirnos de él.

—Ya vuelvo.

Salté de la camilla, no me importó estar con el culo al aire.... Y me fuí a donde sabía estaba el maldito.

Sí, se preguntarán ¿Cómo llegas a un lugar así por qué si? Verán Caleb es pequeño y, donde tienen a los próximos a juicio está al lado del hospital.... ¿Por qué voy ahí? Para por fin encarar al maldito de Ethan. ¿Cómo es que va a ir a juicio tan rápido? Resulta que Erick y Elías ya lo habían denunciado justo antes de salvarme.

Llegué, busqué la oficina de Mili (tiene una aparte por ser la mejor detective) y lo encontré.

Le planté una cachetada al maldito.

—¡NO TE BASTÓ CON ROBARTE MI INFANCIA, SINO QUE MATAS AL CHICO QUE AMO!

—Que bueno que murió–le dí otra cachetada por maldito–Te dije que si no era conmigo, no serías feliz.

—Me das asco–dicho esto, le escupí en la cara y salí de ahí.... Pero si lo escuché.

—Pronto te acostumbras a mi.

¡Maldito enfermo!

Regresé al hospital, descargada la rabia fui corriendo a la habitación de Erick y la verdad me golpeó en la cara.

Si estaba muerto....

No lo podía creer, cumplió su promesa de salvarme del monstruo de mis pesadillas, de ayudarme, de luchar juntos, pero ¿De qué vale todo eso? ¿De qué me sirve si él murió en el proceso? Al final me dejó sola y afrontando algo mucho más difícil.

Vivir sin él

FIN
————————————————————————————
Falta el epílogo

ÉlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora