Lo mire asustada, se me había olvidado que estaba en sujetador enfrente de el!
-¡Largate!-le grite y me intente tapar con lo primero que encontré la toalla, me la enrolle como sí fuera mi cobija para dormir y le aventé lo primero que encontré.
-Lo siento, lo siento, no vi nada en serio-dijo con los ojos cerrados-ósea no estoy insinuando que no tengas nada, sólo qu..-lo interrumpo aventandole otra cosa.
-Basta, no me interesa sí viste mis esas o no-le digo con las mejillas rojas.
-¿Tus esas?-pregunto entre risas.
-Sí, ya sabes de lo que hablo-le dije con voz incrédula.
-¿Quieres que te diga lo que vi?-me pregunta cada vez acercando más hacia mi, ¿dónde esta Annie cuando más la necesito?
-¿Qué?-pregunte atónita-claro que no-le conteste en voz alta
-Sólo para que sepas, lo que vi fue más que bueno-me dijo descaradamente, acercándose hacia mi.
-¡Ew ya no digas nada!- le digo aventandole otra cosas.
-¿Te ayudo a ponerte tu blusa?-me dice viéndome fijamente.
-¡Claro que no! ¡Salte de mi cuarto!-le digo empujandolo.
-Cariño no me puedes empujar, estos músculos pesan más que tu-me dice fingiendo arrogancia.
-Sí como no, adiós-le digo pero no se va
-No me iré-me dice fijamente.
-Bueno almenos daté la vuelta-le digo, dándole la vuelta pegando su cara a la pared.
-Okay no estoy viendo nada-dice pegado en la pared.
Me le quedo viendo fijamente, para verificar que no voltee, tiro mi toalla con la que me estaba tapando y veo que se mueve.
-¡Tony! ¡Quédate ahí!-le grito, me pongo rápidamente mi blusa-ya puedes voltear.
Se voltea lentamente, y siento su mirada recorrer mi cuerpo, tenía la falda puesta y la blusa, el cabello mojado y estaba descalza, la falda no era tan corta, tenía una estricta regla de ir escotada y con minifalda yo no soy de esas y eso no es mi tipo, me puse roja al ver que el todavía veía mi cuerpo, me sentía vulnerable. Decidí ignorar su mirada.
-¿Dónde esta Annie?-le pregunte nerviosa.
-Eh.. Ah está en la tienda-me contesto confundido-Alexia te ves muy linda.
-Hmm.. ¿Gracias?-le conteste viéndolo a los ojos estaba nerviosa, y el se me quedo viendo a mi también después bajó a la sala sin decir nada, ¡me había visto en sujetador! Que vergüenza, la gente ya no puede tener privacidad, me mire en el espejo, me sentía bien conmigo misma. Soy delgada, pero como mucho mi mama siempre me decía que era igual que la abuela ella nunca engordaba.
Me senté y empece a secarme el cabello lentamente, ¿a que habrá ido a la tienda Annie?, escuche el sonido de la puerta y baje, empece a mirar la sala y ya no había nadie, se había ido Tony sin despedirse ni nada, tal vez fue a cambiarse, entonces se abrió la puerta gire mi cuerpo y era Annie.
-Hey ¿dónde estabas?-le pregunte
-Fui a la tienda por algo de galletas ¿y Tony?-pregunto buscando en la sala.
-Ah ¿hablas del chico que me vio en sujetador?-le digo sarcástica
-¿En serio? ¡Dios eso es nuevo! ¿Porque se fue?-me pregunta emocionada
-No se, se fue sin avisar, olvida eso, vamos a arreglarnos arriba-le dije mientras subía las escaleras.
Estábamos en mi cuarto, Annie se estaba cambiando y yo estaba con los ojos cerrados secándome el cabello que ya estaba por terminar, fui al espejo y me mire, ya casi estaba lista sólo faltaba maquillarme un poco, sólo me pondría máscara sobre mis pestañas obviamente y labial color morado-rojo oscuro, me coloque mis lentes. Me puse unos zapatos sin tacón negros, comencé a cepillarme el cabello lo tenía ondulado así que no me lo arreglé tanto y ya estaba lista.
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Una Adolescente no tan Normal (EDITANDO)
Teen FictionAlexia Strusz Jones, una chica tranquila, pacifica, aveces alborotada gracias a las hormonas de su cuerpo, inteligente, amante de los libros, ella se enamora de alguien inalcanzable, Kevin Turner, con quien comparte asiento en sus clases diarias en...