Cap. 23 ❞ ꒰☕꒱

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/Flashback

Jin se sentía presionado, falso, casi ni podía sentir el aire entrar por sus pulmones. Era demasiado horrible ser el hijo de uno de los actores más famosos de todo Corea del Sur. Saber que su vida sería desde un inicio primicia para el mundo, era frustrante.

A sus 23 años solo quería salir de su hogar sin la necesidad de usar mascarilla, salir como una persona normal. ¿Por qué el no tenía eso?, ¿por qué debía ser así?, ya no lo soportaba, y tampoco iba a aguantar más.

La gran mayoría de las personas, piensan que la fama es algo increíble, tener las cámaras en ti, entrevistas, reconocido y tienes casi todo lo que deseas. Mentiras.

Jin deseaba que todo fuera como lo decían las personas. El tiene que disimular ser feliz cuando está el frente de una cámara, tener que ocultar todas sus inseguridades, solo para verse perfecto. Sentirte incómodo con algunas preguntas en las entrevistas y quedarte callado sobre eso, porque después das una mala imagen. Jin detestaba ser reconocido, no le gustaba ser la gran mayoría del tiempo el centro de atención. Y lo más importante, aunque tenga todo lo que deseaba, no tiene lo más quiere en el mundo: felicidad.

Así de lamentable sentía todo el pobre omega.

El peli-rojizo terminó de prepararse para su próxima sesión de fotos y una entrevista. Debía verse impecable para el día de hoy, porque es un día importante en la vida del omega.

Hoy se iba a escapar de su vida de mierda.

Su lobo se encontraba ansioso, sabía que si algo sabía mal, su humano iba a estar en problemas. Pero era mejor arriesgarse, a seguir sufriendo callado.

Jin bajó las escaleras rápidamente, para llegar a el pasillo principal, y despedirse de sus padres, ya que ellos iban primero a un rodaje para su próxima película.

─ Bueno, Jin, recuerda... ─ habló el padre del peli-rojizo. Jin suspiró pesado, sabía la frase que iba a decir su progenitor, por lo que lo interrumpió, continuándolo el.

─ "Verse perfecto, tiene un precio", lo sé, lo sé. Ahora muevan que llegarán tarde ustedes a su rodaje ─ dijo Jin. La madre del omega le planta un suave beso en la frente de este, despidiéndose junto con su padre. Ambos salieron de las grandes puertas de la mansión, llendo a su Mercedes Benz al rodaje.

Todo estaba listo. Ya comenzaba el plan.

Los empleados ya sabían lo que planeaba el hijo de sus jefes, y estaban totalmente de acuerdo en ayudarlo. Reconocían lo mal que lo pasaba el pobre omega, llegaba a llorar el silencio y ellos se daban cuenta de aquello.

Jin subió rápidamente a su habitación, quitándose la ropa fina que debía llevar a la sesión de fotos y su entrevista. Se colocó ropa de casa y sacó una maleta que estaba debajo de su cama.

Antes de salir de su habitación, la miró por última vez, sin arrepentirse de lo que estaba haciendo. Salió de la habitación, cerrando la puerta y corriendo con aquella pesada maleta, que contenía todas sus cosas más necesarias.

Charming﹙ʏᴍ﹚ ; OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora