Isabella Jones.
Respiro hondo varias veces tratando de calmarme y no quebrarme tan rápidamente como si estuviera tratando de reunir fuerzas las cuales no tengo.
─ ¿Estas lista?
Gael se acercó a mí y me observó unos segundos para luego acomodar mi cabello, llevaba una remera negra con una campera del mismo color y unos jeans azul.
─ ¿Y si sale mal? porque podría darle la libertad...ellos tienen más poder que yo y...
─ Deja de pensar eso ─me interrumpió ─. Todo va a salir bien confía en mí.
Me tendió su mano suspire para luego tomarla y levantarme de la cama y colgandome mi mochila mientras salíamos de mi habitación.
Si había una palabra que podría definir mis sentimientos en estos momentos sería asustada lo estaba a más no poder, habían conseguido extraditar a Matt del país donde intentaba esconderse no me dijeron como fue y tampoco era algo que necesitaba saber, una vez que piso suelo americano pusieron una fecha para el juicio.
No quería ir, no quería ver como muchas personas me juzgaban sin saber la verdad de lo que pasó, ya había superado varios años a las críticas de mis actos pero esto era algo muy distinto y tenia mucho miedo de no poder superarlo si algo malo llegaba a pasar.
Salimos del departamento junto con los chicos y una vez que las puertas del ascensor se cerraron me reiteraba que no había vuelta atrás y que debía ser fuerte en todo esto.
Antes de que el elevador llegara al vestíbulo tuve que soltar la mano de Gael, ambos sabíamos que no podiamos permitirnos tener afectos tan cercanos cuando él se suponía que tenia una relación con otra chica.
Acomodé mi cabello tratando de concentrarme en otra cosa y cuando se abrieron las puertas respiré hondo sintiendo como Gael apoyaba su mano en mi espalda baja para que caminara hacia la puerta principal.
Respire hondo y salí del ascensor comenzando a caminar por el vestíbulo hasta llegar a la puerta principal que estaba repleta por los medios y era algo que me venía venir ya que llevaba cinco días sin salir de mi edificio, varios guardaespaldas me rodearon abriéndose paso entre la gente hasta que pude subir a la camioneta.
Malik se había puesto en contacto conmigo hace unas horas pero ambos sabíamos que los asuntos del trabajo no podria ocuparme ahora.
Los chicos subieron a otra camioneta y cuando cerraron las puertas comenzaron a moverse todas al mismo lugar donde se llevarían acabo el juicio.
No quería pensar en absolutamente nada llegué hasta un punto donde ni siquiera me importaba que me había dicho mi madre, no vino a Los Ángeles por mí sino que había venido por un asunto de trabajo y ya se había ido del país hace unas horas.
Nunca me había tomado el tiempo de odiar a alguien sino que me dedicaba a fingir que no existía y me había dado cuenta que lo estaba haciendo con mis padres.
Mi madre me había dicho que todo lo que pasó era mi culpa y que debería retractarme ya que estaba dañando dos apellidos importantes en el mundo y que eso no era lo que quería para mí, y luego quiso convencerme de firmar un contrato de dos años para dejar la música.
Esa idea la estaba considerando desde hace meses y si lo hacía no era por ella seria por mí porque de verdaderamente sentía que debía parar por unos meses.
Sentí como mi camioneta se detenía frente a las escaleras que llevaban hacia un edificio enorme, jugué con mis dedos unos segundos hasta que sentia que podía hacerlo, tomé mis cosas y en el momento en el que abrí la puerta mis ojos fueron cegados por los flashes de toda la prensa, varios de seguridad me volvieron a rodear dejando un camino libre para que subiera las escaleras hasta ingresar al gran edificio.
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Reputación Oculta. [✔Completa]
Ficção AdolescentePRIMER Y SEGUNDO LIBRO. Isabella Jones, una cantante influyente en todo el mundo, con el peso de su fama, de la presión y de la exigencia obsesiva, decide parar por unos días. Llevándola a un lugar donde conoce a una pequeña banda, sin experiencia...