Un incendio en el mar (Zuko; Avatar TLA)

Libro III - Parte 4

- Muy bien Aang, primero debemos abordar el temor al fuego control, que sería natural después de tu única experiencia con él ¿La persona que mencionó Katara te enseñó algo?

Kai empezó, había meditado bastante al respecto y Zuko estaba nervioso.

- Sí, me tuvo varias horas respirando y luego traté de evitar que una hoja se quemara - respondió el avatar.

- Mmm... Eso tiene sentido, Zuko tuvo que meditar mucho para trabajar todo el asunto de la calma - Dijo la castaña, llevándose la mano a la barbilla.

El príncipe le lanzó una mirada de reproche.

- Oh, lo siento  - rio Kai, pero continuó - la respiración, la voluntad y la pasión son la llave para un control exitoso. Un maestro fuego debe respirar en calma, concentrarse en el calor que pretende generar y cuidar su llama interna, el fuego se alimenta de los sentimientos, de quien eres y de tus deseos. Si tienes dudas, tu fuego de seguro será débil y si no tienes cuidado, se descontrolará.

Kai se había tomado algunas horas para repasar en su mente las lecciones de Iroh a su sobrino, sobra decir que las había oído más de una vez, considerando que las primeras nunca eran escuchadas con atención por el príncipe que siempre estaba enojado.

- ¿Y cómo se equilibra generar un fuego poderoso y a la vez mantenerlo bajo control? El fuego tiene su propia vida... - se cuestionó Aang.

- Creo que como el avatar es importante que entiendas que todos los elementos son peligrosos, la tierra puede triturar los huesos en un segundo, el aire podría asfixiar hasta la muerte y el agua puede quemar, cortar y manipular la humedad en el cuerpo de las personas. Tú y Katara usan el agua como si se tratara de un juego ¿Alguna vez pensaste que podías cocinar vivo a alguien más con su propio sudor? Todas las terminaciones nerviosas se activan a la vez y el dolor genera más humedad; salivación, lágrimas, las células de la piel reaccionan confundidas, pretenden enfriar, pero hacen todo lo contrario - El aura alrededor de Kai se oscurecía más a la vez que la piel de Aang palidecía - ... Vaya, creo que todo esto te generó angustia, lo lamento.

- No, déjame a mí, Kai. Lo peor que puedes hacer ahora es asustarlo más - Dijo Zuko, parándose frente al avatar. La muchacha se sentó en el piso para mirar - Aang, sé que te pusiste nervioso, pero recuerda, el fuego control en sí mismo es algo que no debes temer.

- Está bien, no debo temerle - repitió el avatar, tratando de asimilar la idea.

- Pero si no lo respetas ¡Te masticará y escupirá como un furioso rinocomodo!

Kai miró confundida a Zuko mientras le gritaba a su estudiante, poniéndolo, sin lugar a dudas, más nervioso todavía.

- Ahora muéstrame lo que sabes ¿Qué cantidad de fuego puedes hacer?

Aang respiró y lo intentó, pero no salió nada.

- Necesito un poco más de entrenamiento ¿Quizás una demostración? - preguntó el avatar, mirando a Zuko.

- Buena idea, será mejor que retrocedas - el príncipe respondió y ejecutó una técnica clásica, que resultó tan impresionante como una pequeña antorcha que se prendió y apagó en el acto. Aang aplaudió con timidez.

- ¿Qué fue eso? Fue el peor fuego control que jamás vi - se reprochó Zuko.

- Creo que estuvo... Bien - señaló el avatar, tan amable como siempre.

- Vaya, si vamos a jugar a hacer fuego control sin fuego, yo también quiero probar - Dijo Kai, poniéndose de pie e imitando los movimientos del príncipe, que tantas veces había visto practicar.