𝐄𝐫𝐞𝐧 𝐉𝐚𝐞𝐠𝐞𝐫 : 𝐎𝐧𝐞-𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬

07 : Desde el balcón.

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PARTE II

Las clases terminaron, los alumnos salieron del aula, Vinna abrió la puerta corrediza y salió al balcón. Y en el balcón del salón de al lado está él, de nuevo sentado en el suelo leyendo un manga. Lo miró por un segundo desde el marco de la puerta.

— Hey —saluda antes de recargarse en el barandal.

— Hey... —contesta el chico sin apartarle la mirada al manga.

Vinna volvió su vista a la cancha, específicamente al joven Jean, pero inconscientemente volvió su vista al joven a su derecha.

— ¿Qué lees? ¿Un manga?

— Sí —afirma sin expresión alguna pero finalmente le dirige la mirada— ¿Quieres leer?

— Hmmm ¿Cuál es? —cuestiona pensativa.

Eren alza el manga mostrando la portada 『Bungo Stray Dogs』se titula. Vinna frunció un poco el ceño en señal de estar poco convencida. Aún así lo tomó entre sus manos y se sentó en el suelo para comenzar a leer. Eren se quedó en silencio mirando al frente aunque en algún momento comenzó a verla de reojo detenidamente. Observa a detalle sus ojos y la expresión de su rostro mientras lee. Ha logrado distraerla de Jean, quizás tenga oportunidad.

Pasados unos veinte minutos Vinna le miró a los ojos, maravillada. Inesperadamente Eren sonrió de lado sutilmente ante la expresión de su compañera haciéndola sentir un tanto desubicada.

— Te lo presto si quieres —comentó, esta vez, con algo de amabilidad, una ligera pizca apenas perceptible.

Pero eso fue suficiente para Vinna «Él es... Diferente a lo que aparenta»

— Hablas más de lo que hubiera imaginado —comenta ella con franqueza.

— ¿Sí? —duda Eren observándole expectante. Ella asiente con la cabeza.

— ¿De verdad vas a prestarme el manga?

La miró a los ojos, esos tan iluminados de emoción.

— Sí...

— ¡Genial! —exclama sonriente— ¿Te gusta lo sobrenatural? Podría prestarte alguno de mis mangas.

— ¿Lees ese género? —cuestionó incrédulo.

— Sí~ —canturrea— Tengo Parasyte, creo que podría gustarte, aunque es un poco gore.

— Está bien —musitó con naturalidad.

— Ne ¿De qué trabajas? —pregunta con ojos llenos de curiosidad. Eren duda por un momento pero se resigna.

— Soy empleado de una tienda de mangas.

— ¿El manga es de ahí? —cuestiona señalando el manga que le prestó.

— No. Lo compre.

— Oh... Eso también fue inesperado. Pensé que dirías que eres vendedor de drogas o algo así —bromea.

— ¿Qué?

— Es broma —dice riendo ante su expresión de confusión.

— ¿Esa es la impresión que te doy? —pregunta seriamente.

Vinna sintió que aquellos ojos verdes podrían ver sus mayores miedos reflejados en sus ojos si quisieran, que podría ver qué tan manchada de pecados está su alma o qué tanta bondad hay en ella. Una mirada demasiado intensa de un chico imponente.

— N-no... Es decir, no pareces el tipo de chico que trabajaría en una tienda de mangas.

—... Y tú no pareces el tipo de chica que lee mangas gore.

Su comentario le sacó una sonrisa divertida mientras niega con la cabeza. Y sutilmente él también sonrió.