Trata De No Caer✔️[libro 1]

Capitulo 41

•Melania•

Termino de hacer unos apuntes cuando sacan a Liam de mi lado.

Levanto la cabeza para discutir pero me encuentro con Milton.

—¿Que haces aquí? ¿No deberías estar en historia?—pregunto media confundida.

—Salte para allá, Liam.—lo empuja para tomar su lugar y sentarse a mi lado.

—Oye, gracias a mi se encontraron en el salón de música. Se agradecido y más amable.—le contesta pero se mueve a otro asiento.

—Se más amable.—también le digo yo cuando está sentado a mi lado. Da un beso en mis labios como saludo.

—Monroe, tenemos exactamente quince minutos para irnos, sin que nos atrapen.—lo miro aún más confundida

—¿Irnos a donde? Estamos en clase y nos faltan dos más.—en el salón hablan entre sí y la maestra hace unos minutos fue a la oficina y dijo que volvía en un momento.

—No iremos a las otras clases.—lo dice tan relajado que me dan ganas de abofetearlo

—¿Tienes fiebre? ¿Te sientes bien? ¿O es que te has vuelto loco?

—Estamos desperdiciando tiempo. Venga, guarda todo.—no sé ni porque le hago caso y guardo mis cosas en la mochila.

—¿A donde vamos?—ambos nos levantamos para irnos.

—Por ahí.—antes de salir del salón miro a Liam y articula con la boca "pásenla bien"

Salimos del instituto hacia el aparcamiento, el frío me golpea la cara. Milton me quita mi gorro de lana y me pone el de él, y él se pone el mío.

Cuando llegamos a su auto me detengo.

—Yo quiero manejar.

—Aún no tienes tu carnet.—lo miro mal.

—Milton, no seas aguafiestas.—pongo mi cara triste

—No vas a convencerme. Además la otra semana casi chocas un muro.—niega

—Milton.—me mira y se rinde dándome las llaves.—Así me gusta.—me meto rápido en el auto por el frío.—Y el muro estaba en el medio.—me defiendo

Pongo la calefacción para que el auto se caliente.

—Y bien, ¿a donde me dirijo?

—¿Sabes donde queda el Lago Michigan?—asiento—Bueno para allá vamos.

—Eso está a más de cuarenta minutos.—saco el auto del instituto y me meto en la carretera principal

—Tu fuiste la que quiso manejar.—alza los hombros como mostrando lo obvio.—Así que apúrate que el tráfico aquí siempre es un lío.

Enciendo la radio y me meto en el tráfico para dirigirnos a donde vamos.

—Te vez tan bien conduciendo mi auto.—alaba Milton

—Ya lo se.—sonríe y da un apretón arriba de mi muslo.—¿Hay algo en específico por lo que iremos allá?

—¿Por qué, haces tantas pregunta?

—Porque quiero saber.

—Todas las navidades ponen una rueda de la fortuna, también hay para patinar, distintos kioscos de comida, de postres. Cosas así.—me explica.—Matthew y mamá siempre llevan a Luca pero más a fin de mes, donde lo más probable nieve.

—¿Tu nunca has ido con ellos?

—Antes si, ya no.—admite—Pero ahora iré contigo y eso es mucho mejor.