VALESKA: Dulce Veneno. ( Mafias Y Legados 3)

14. LA SANGRE

POV VALESKA

8 meses después

Respiro entrecortado conteniendo el dolor que avasaya mi cuerpo, estos meses han Sido demasiado duros, sudo frío mientras mis hombres me llevan a la clínica privada que Daddy mando construir para que me atiendan.

Tengo miedo, voy sobre el regazo de los gemelos quienes intentan calmar mis sollozos, mientras otra contracción me hace temblar y apretar sus manos.

No sé quejan ni dicen nada, la discusión de hace apenas unos días los tiene en estado de alerta, me presionan para saber quién es el padre pero no lo diré, esperaré hasta que esté en mis brazos y sepa que vivirá.

Cedric limpia las lágrimas y el sudor que me cubren el rostro mientras cruzamos las verjas y nos adentramos a la zona militarizada rodeada de tanta seguridad que ni el presidente de los Estados Unidos podría igualarla.

Respiro como Lucian y cedric me indican mientras froto mi abultado vientre, no sabemos que es o como luce, por más que me revisaron el saco amniótico es demasiado grueso para que se haga visible, solo sabemos que está sano aparentemente y que su corazón y órganos vitales se desarrollaron por completo.

Aparcan la camioneta y después de que Cedric bajara como un loco llegan los dos médicos y las enfermeras con una silla de ruedas pero se me hace imposible sentarme ya que el Pequeño pie del bebé está por fuera de mi vagina.

Lloro y sollozo fuerte cuando me cargan y caminan casi corriendo conmigo, Daddy viene en camino desde Estocolmo estará aquí en una hora como mucho pero de igual manera estaré acompañada.

La tensión se siente cuando me acuestan en la camilla y separan mis piernas ubicándolas en los soportes que está tiene, el médico toca mi vientre y cinco armas se activan desprendiendo los seguros por el grito que doy al momento que hace presión muy cerca de mi estómago.

Lloro mientras todos se calman al saber que es otra contracción la causa de mi llanto, más sin embargo no cambian su postura apuntando al médico en zonas vitales del cuerpo.

Dios, esto duele demasiado.

Las enfermeras me ayudan ubicándome correctamente y canalizando mi vena mientras el médico lucha con los cuatro hombres que se niegan a desalojar.

No entiendo que demonios sucede puesto que Daddy dió la orden para que nadie pudiera sacarlos, tengo miedo y cuando decido enfrentarlo otra contracción me hace llorar y ahogarme con mi propio llanto.

- será mejor que bajen las armas y salgan - dice firme el médico - tengo que proceder y no puedo hacerlo con tantas personas aquí.

El silencio se instala en la enorme habitación equipada pero nadie se mueve el médico impaciente vuelve a hablar logrando incomodar a todos

- solo el padre puede quedarse - trago duro viendo los rostros serios de todos

No saben quién lo es, solo yo tengo claro eso y aún así me niego a darlo por hecho, una de las enfermeras me mira negando con la cabeza, es Ada, ella me conoce y eso me pone en alerta porque aunque esto sea una fortaleza es bien sabido que cualquiera vendería su alma por dar a conocer la existencia de este embarazo.

- todos se quedarán, de aquí nadie sale o entra hasta que esa mujer que está allí para y sepamos que está bien - habla Friedreich - ahora cumpla con su maldito trabajo y haga que ella ya no sienta dolor o las balas de estás armas no serán suficientes para que muera.

El médico traga sonoramente y en medio de temblores se mete entre mis piernas a hacer lo que le corresponde.

Friedreich es demasiado rudo, amo eso de él y que logré que el médico se enfoque en mi me hace sentir en paz, hasta que otra contracción me rompe.