Sinopsis

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Sarah Hale vive atascada en su pasado, y eso no la deja seguir adelante con su vida con perfecta normalidad. Grandes brechas en su corazón, y un enorme hueco donde estaba antes su inocencia.

Ya, desde pequeña, descubre una verdad que no le gustaría haber conocido nunca. Unos golpes secos se escuchan en su casa de vez en cuando. No le da mucha importancia hasta que, un día, descubre a su madre sentada en una esquina de la habitación llorando, llena de moratones. La pequeña y frágil Sarah intenta detener a su padre y, armada de valor, llama a la policía, sin embargo, no llegan a tiempo. Dan, su padre, la aparta de forma brusca y escapa llevándose consigo todas sus pertenencias. No llega muy lejos y consiguen arrestarle y llevarlo preso a la cárcel, pero Sarah tiene una cicatriz en su brazo derecho como recordatorio de lo ocurrido aquel día. Su eterna pesadilla.

Su madre y ella se cambian de casa, un lugar donde rehacer su vida. Desde aquello su madre no vuelve a hacerla caso como una madre debería hacerlo. Siente que no puede querer a nadie, ni siquiera a su propia hija. Amar para ella es una debilidad.

Sarah, apenada, se encuentra con un joven llamado Alan, que la protege y consigue que ella vuelva a sentirse apreciada. Pasan todo el tiempo juntos, incluso escriben una canción, prometiéndose el uno al otro guardarla siempre.
Meses después, el edificio en el que Alan vivía resulta incendiado, con el muchacho en su interior.

Sarah se encierra en sí misma completamente, comportándose como una persona fría y superior con todos sus compañeros para defenderse de que le hagan más daño. Consigue convertirse en la chica más popular y poderosa de todo el instituto, con todo lo que eso conlleva. Le gusta su nueva vida, pero sus pesadillas parecen no desaparecer nunca.   

Su penúltimo año de instituto no va a ser tranquilo o eso parece. Muchos de sus sueños auguran cosas terribles y una de ellas, es una mujer, Allegra Meyers, que aunque sacada de un sueño, aparece en su vida real una y otra vez. El recuerdo de Alan la atormenta, ya que, ella misma sabe que podría haber evitado todo lo que pasó, y no lo hizo. Alguien está detrás de ella, puede escuchar sus pasos siguiéndola y quizás, girarse puede que no sea la mejor opción.
Sarah se da cuenta de que ahora más que nunca, necesita ayuda.

Luces del albaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora