[1] - CHANBAEK

CAPÍTULO 18

— Señor, ¿soy lo suficientemente mayor para tomar una cerveza aquí?

Se sentaron a almorzar en el pub donde había quedado con Kim. Allí concurría un público de mayor edad en su mayor parte, hombres de cincuenta años y más, obtenía muchas miradas de admiración.

— Sí, sólo tienes que ser mayor de dieciocho, y dieciséis años si tomas alcohol con la comida.

— Así que puedo tener una, ¿por favor, Señor?

BaekHyun parecía feliz cuando caminaban por ahí, pero sus estados de ánimo iban arriba y abajo, y su espíritu parecía haber caído una vez más durante la comida.

El camarero se acercó. — ¿Puedo tomar sus platos? ¿Cómo estuvo su comida?

— Genial. — Lo miró de arriba abajo. Estaba en sus veintitantos años, moreno y atractivo, aunque un poco menos en forma de lo que debería estar. — Voy a tomar una cerveza y otra para el niño.

— Algo más, señor, ¿nada más en absoluto?

La íntima sonrisa que el joven le dio, obviamente irritó a BaekHyun, y su cuidadosa obediencia se rompió. — Él es mi Amo, así que puedes llevar tu culo apestoso a otro lugar.

Dado que de la única cosa que el niño había hablado durante la última semana había sido sobre ir a Francia para visitar a su madre, lo tomó por sorpresa su posesividad. Pero no le permitiría ser grosero con un camarero. Se inclinó sobre la mesa y clavó un dedo en su pecho. — Eso no fue cortés, debes disculparte.

Una mirada rebelde que era casi cómica torció la cara de BaekHyun, pero levantó la vista hacia el camarero obedientemente. — Lo siento.

— Dale una cerveza suave — le dijo al camarero.

— ¿Eres americano? — El camarero miró a BaekHyun.

— No, soy japonés — dijo BaekHyun en voz baja, mirando a otro lado.

El camarero trajo las cervezas y colocó una media pinta de cerveza delante de BaekHyun. — Para el caballero japonés.

ChanYeol se echó a reír, y BaekHyun lo miró furioso. — Me cuidaría si fuera tú — le dijo al camarero. — Mi Amo lleva un arma y mata gente.

Por la mirada de incredulidad en el rostro del camarero, estaba claro que no le creía. Se alejó sin decir palabra. — Eso fue muy estúpido de tu parte. — Agarró el brazo de BaekHyun, deliberadamente lastimándolo. — Por eso no puedo confiar en ti con la información. ¿Qué te pasa? Pensé que eras un niño inteligente.

— No me gusta ser tratado como un niñito, y no me gusta cómo el camarero te sonríe y se burlaba de mí. — BaekHyun tomó el vaso y se terminó la cerveza entera de un solo trago, luego apoyó en la mesa el vaso con un golpe, mirándolo para una reprimenda.

Se negó a morder el anzuelo.

Obviamente decepcionado por la falta de reacción, BaekHyun se cruzó de brazos y miró a su alrededor. — Oh, Dios mío, ¿qué está haciendo él aquí? — Señaló a la puerta.

— Se reunirá con nosotros.

Mirando como si hubiera entrado en la guarida de un león, Kim se situó en la puerta del pub. Le hizo una seña y Kim corrió a su mesa y se sentó. — Cuando me dijiste que nos viéramos aquí, no me dijiste que era un bar gay, Park.

— Es un pub gay — dijo, como si Kim fuera estúpido. — Todo el mundo lo sabe. ¿Qué te pasa?

— Sí, eso está muy bien para ti, pero en mi situación podría causar dificultades el que me vean caminando por aquí.