(F)iel

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Incluso cuando Nico tenía dudas, Maki siempre le demostraba que era fiel. 
 
Todo comenzó debido a una problemática Rin.

–Nico ¿por qué Maki no tiene fotos de ustedes dos en el trabajo?

–¿Eh?– El tenedor de Nico se detuvo en su camino hacia su boca. Las cejas de la mayor se juntaron en confusión mientras miraba a la más joven sentada frente a ella. Rin había pasado por la panadería con la esperanza de pedir comida a su mayor y Nico la había complacido de manera divertida después de perder una apuesta.

–Me refiero a que las parejas de novios suelen hacer ese tipo de cosas, ¿no? Tienen fotos de cada uno pegadas en todas partes y no se callan el uno del otro. Pero tú y Maki apenas se mencionan.– Rin la miró con los ojos entrecerrados –¿Ustedes realmente se van a casar?
 
–¡Todavía no estamos comprometidas, solo lo estamos discutiendo!– Nico farfulló, la vergüenza tiñó sus mejillas de rojo.

–Si, claro, porque siempre aceptas y usas anillo de compromiso de personas a las que  les dirás qué no.– resopló Rin, mirando fijamente el anillo de compromiso de diamantes de 14K que adornaba el dedo anular izquierdo de Nico. –De todos modos– continuó Rin, haciendo a un lado el tartamudeo de Nico de 'Maki insistió en eso incluso si yo no había dicho que sí' –Estuve en el trabajo de Maki ayer y casi no vi ningún rastro que apuntara a que ella estuviera en algún tipo de relación.– Rin dijo, esta vez levantando las cejas hacia Nico.

–Bueno, las cosas aún no son oficiales entre nosotras. Además, ya sabes lo reservada que es Maki, ¿por qué te sorprende lo silenciosas que son las cosas sobre nuestro posible compromiso?– Nico preguntó con sospecha.

–Bueno...– Rin de repente evitó la mirada de Nico –Ayer, mientras estaba en el hospital, una enfermera se metió a su oficina.

–¿Okey...? ¿No es normal? Maki es doctora después de todo.
 
Nico no sabía que esa "enfermera" era una mujer que tenía tanto el aspecto visual como el encanto para derribar a cualquiera. Otra cosa acerca de ella es que era extremadamente coqueta, guiñaba un ojo y murmuraba dulces palabras a cualquiera que estuviera a su vista. Desafortunadamente para Nico, el resto de su grupo de amigas habían visto de primera mano cómo esa persona había coqueteado con Maki en su fiesta de cumpleaños anterior. 
 
–Uhm– Rin se aclaró la garganta antes de murmurar rápidamente –Ella coqueteó con Maki ayer.

Nico suspiró. Maldita sea –Está bien– Nico se encogió de hombros con indiferencia, aunque por dentro el miedo se convirtió en un puño que apretó su corazón. Rin también pareció notar el dolor que le causaron sus palabras.

–Lo siento, no quise lastimarte. ¡Tal vez si dices que sí, entonces ustedes podrían anunciar su compromiso y ya no tendrán que preocuparse por cosas así!– Rin dijo esperanzada, tratando de levantarle el ánimo.

–¿Pero realmente lo haré?– Nico respondió con tristeza, la resignación clara en su voz.

–No veo por qué no.– Una voz inesperada respondió desde la puerta. He aquí, la única Nishikino Maki estaba allí, su traje oscuro compensado por un costoso botón beige. Sus ojos que estaban provocando tormentas por dentro, miraron a Nico, quien sólo volvió un poco la cabeza para encontrarse con la mirada Maki con una mirada sombría.
 
–Maki ¡no sabía que vendrías aquí hoy!–Rin saltó de su asiento presa del pánico, preguntándose cuánto había escuchado Maki y si podría escapar de aquí antes de que Maki la matara por causar problemas, ¡aunque jura que no fue a propósito! Ella solo tenía curiosidad, ¿de acuerdo?

–Decidí almorzar con mi prometida, pero parece que ya está ocupada– Maki respondió, su voz sin ninguna emoción. Era obvio que había escuchado lo suficiente como para enojarla, y Rin solo pensó que es demasiado joven para morir hoy.

Como saber si una Tsundere te amaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora