Mía, porque eso es lo que Nico era para Maki, por lo que realmente la desconcertaba que alguien intentara mantener a su mujer alejada de ella.
–¡¿¡¿Perdón?!?!– Maki preguntó en estado de shock.
Era el día de su boda y Maki había pasado por la habitación de Nico para desayunar con su prometida, tal como lo había estado haciendo desde que se comprometieron. Todas estaban en el hotel con dos pisos completos reservados solo para la fiesta de bodas y los invitados. La boda estaba programada para la tarde, así que Maki pensó que sería un buen momento para consultar con Nico cómo iban las cosas y si necesitaba algo más mientras comían algo.
–No puedes verla, Maki. ¿No sabes que es de mala suerte ver a la novia antes de la boda?– Dijo Nozomi, parándose frente a la habitación de Nico e impidiendo que Maki entrara.–Eso es ridículo, Nozomi. Muévete.– ordenó a la mayor, molesta por tener que esperar para ver a Nico.
–Lo siento Maki, pero Nozomi tiene razón, no puedes verla– La voz de Eli llegó desde la izquierda.
Nozomi había pedido refuerzos tan pronto como escuchó los primeros golpes en la puerta y salió corriendo por la puerta para que los golpes de Maki no despertaran a Nico. La pobre mujer había tenido problemas para conciliar el sueño la noche anterior debido a todos los nervios y como tal todas habían decidido dejarla dormir un poco más. Todo el mundo excepto Maki, al parecer, que se había presentado a las 7 de la mañana para ver a su prometida.–¿Bueno, por qué diablos no?– Preguntó Maki, la molestia goteaba de su voz. La verdad es que Maki también tuvo problemas para conciliar el sueño la noche anterior, demasiado ocupada con los pensamientos de la boda que se despertaba cada dos horas para ver si ya era hora de levantarse por el día. Ahora que finalmente es de mañana, quería ver a Nico y relajarse unos momentos a solas antes de que comenzaran los preparativos de la boda y las festividades.
–Nozomi ya lo dijo, es mala suerte. No quieres hacerle eso a tu matrimonio, ¿verdad? Además, estoy segura de que puedes esperar unas horas hasta que la veas.– Eli explicó mientras rodaba los ojos con diversión ante la molestia de Maki, uniéndose a Nozomi al estar de pie frente a la habitación mientras Rin envolvía su brazo alrededor del de Maki y comenzaba a alejarla. Dudó por un segundo cuando vio la mirada mortal que Maki le envió al brazo, pero siguió tirando hasta que estuvieron a la vuelta de la esquina y frente a los ascensores. Prácticamente pudo sentir a la peliroja echando humo a su lado y estaba realmente confundida sobre por qué. No es propio de Maki ser tan irracional por nada.–¿Por qué estás tan molesta Maki? Realmente no es un gran problema esperar un poco– Rin preguntó mientras subían al elevador y presionaron el botón de la planta baja para desayunar allí.
–Porque pensé que las dos estaríamos juntas todo el día, pero no podré verla hasta la ceremonia de la boda.– Maki estaba furiosa.
–¿Y? No es que te mueras por verla.– Rin puso los ojos en blanco mientras se reía.
–No se trata de eso. Se trata del hecho de que debería poder verla cuando quiera porque es mía.
Las cejas de Rin se arquearon con sorpresa ante eso, pero Maki continuó sin darse cuenta.
–Nos casaremos de por vida en unas pocas horas, así que todo el mundo que la mantiene alejada de mí cuando soy la que tiene más derechos sobre ella es molesto.– Maki miró fijamente las puertas del ascensor frente a ella mientras Rin la miraba sorprendida antes de estallar en carcajadas.–Para ser honesta, me preguntaba por qué diablos te ibas a casar. Pero ahora tengo claro que debes haberte vuelto loca y es por eso que no asistiremos a toda esta ceremonia hoy. Quiero que llames a todas y les digas que lo cancelen mientras te llevo al médico.– Rin dijo mientras se agarraba el estómago de la risa. Maki, sin embargo, se volvió hacia ella con una expresión mortalmente seria antes de decir:
–Mataré a cualquiera que cause los más pequeños errores u obstáculos a la boda, ¿entendido Rin? Así que si yo fuera tú, no estaría bromeando sobre algo así.
Rin tragó saliva de miedo cuando las puertas del ascensor se abrieron Maki salió al magnífico vestíbulo del hotel, murmurando entre dientes que el tiempo se movía demasiado lento y un recordatorio para decirle al funcionario que tachara el '¿hay alguna objeción?' De la ceremonia de la boda. Rin miró fijamente su espalda sorprendida, Maki realmente se volvió loca, y parece ser culpa de Nico.×
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Como saber si una Tsundere te ama
RomanceNadie cree que la fría Tsundere Nishikino Maki esté enamorada de su esposa, ni siquiera la propia Maki. Nishikino Nico, sin embargo, tiene 26 razones que demuestran lo contrario, comenzando con la A y terminando en la Z.