Maki siempre la cuidaba y se aseguraba de que estuviera bien mucho antes de que se juntaran.
Risas y gritos estallaron por toda la sala cuando el presidente del club anunció que era hora de empezar a beber. El club de voluntarios de la universidad estaba en una posada a tres horas de la universidad para un viaje de dos días y una noche a la playa para dar la bienvenida a todos los nuevos miembros y ayudarlos a unirse.
–¿No es divertido Nico?– Preguntó un chico que estaba sentado junto a ella. El vicepresidente del club, era guapo y simpático senior que se había hecho amigo de Nico en la reunión introductoria en el club cuando la pelinegra llegó tarde y no pudo conseguir un asiento junto a Hanayo, así que no tuvo más remedio que sentarse junto al vicepresidente y conocerlo.
Nico miró hacia donde estaban sentadas Hanayo y Maki, rodeadas de otras personas del club, una mezcla de amigos entre las dos ya que ambas estaban en el club más tiempo que Nico; ambas se habían unido a su primer año mientras que Nico acababa de unirse este año, ya que necesitaba una actividad extracurricular y pensó que no podía equivocarse con un club de voluntarios del que Hanayo también formaba parte.–Sí, definitivamente lo es– respondió Nico al vicepresidente con una débil sonrisa mientras se acomodaba en su asiento, sabiendo por experiencias pasadas que le esperaban muchos juegos de beber ya que a los estudiantes universitarios les encantaba emborracharse.
Para ser honesta, a Nico no le gustaba mucho beber porque no era muy buena en eso y siempre terminaba borracha mucho más rápido que los demás. Sin embargo, la mayoría de las veces se inclinaba ante la presión de los compañeros. Solo esperaba que esta noche no se emborrachara lo suficiente como para hacer algo vergonzoso frente a todas estas personas nuevas, especialmente Maki.
Hablando de ella, cuando Nico las miró de nuevo, notó que Maki la estaba mirando con una mirada ilegible en su rostro, lo que la hizo sentir una especie de dolor extraño en el pecho.
Bien, entonces ella iba a ser honesta. Estaba totalmente enamorada de la mejor amiga de Hanayo, y se sentía la peor persona por eso porque era obvio para cualquiera con ojos que las dos estaban hechas la una para la otra, que eran la imagen perfecta de amigas de la infancia que crecieron para ser la pareja perfecta de cuento de hadas. Era obvio en la forma en que parecían solo ellas romper con su actitud generalmente fría para reír y bromear, esperándola después de sus clases y siempre siendo la que estaba sentada a su lado durante el almuerzo.
Pero Nico fue capturada en el primer momento en que vio a la peliroja esperando afuera de su clase de Inglés, inclinada contra la pared y dirigiendo una pequeña pero brillante sonrisa cuando vio a Hanayo. Al final Nico se encontró buscándolas cada vez que salía de una clase. Y una vez que finalmente habló con ella por primera vez... Se enamoró y se le rompió el corazón.–Nico, ¿harás algo después de la reunión?– Hanayo preguntó mientras las dos empacaban sus libros y lápices.
–¿Ahora?– Nico pensó en su horario antes de sonreírle a Hanayo –No, esta es mi última clase del día. ¿Y tú?
–Voy a almorzar con Maki ¿quieres venir? Mencionaste que te saltaste el desayuno, es importante que mantengas una buena alimentación.–Oh, Maki– sintió un pequeño aleteo en su pecho –Um, ¿estás segura? No quisiera entrometerme...
–¿Entrometerte? ¿De qué estás hablando? He estado hablando de ustedes dos durante meses. Creo que es hora de que finalmente se conozcan
Nico miró hacia arriba cuando las dos salieron de la sala de conferencias y vio directamente el rostro de Maki iluminado de alegría al verlas, o de hecho, al ver a Hanayo, mientras la sonrisa en el rostro de Maki se atenuó y fue reemplazada por confusión cuando vio sus brazos entrelazados.–Maki, esta es mi amiga Nico y se une a nosotras desde hoy– Hanayo dijo emocionada mientras tenia una sonrisa radiante en su rostro al hacer que las dos se conocieran.
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Como saber si una Tsundere te ama
RomanceNadie cree que la fría Tsundere Nishikino Maki esté enamorada de su esposa, ni siquiera la propia Maki. Nishikino Nico, sin embargo, tiene 26 razones que demuestran lo contrario, comenzando con la A y terminando en la Z.