Gabriel haló de mí hasta la puerta del autobús y luego me haló por toda la escuela atrayendo muchas miradas. ¿Por qué? Pues porque soy el bicho raro de la escuela, la que no tiene ni amigas ni amigos y de un día para otro un chico me protege, me habla y se pasa conmigo.
Cuando llegamos a mi salón me soltó, yo deje mi mochila al frente tirada en el piso y el la dejo al lado. Me senté en el suelo recostándome de la pared y saqué mi cuaderno de dibujos de mi bulto. Sentí como Gabriel se sentó a mi lado y veía discretamente mis dibujos. Llegue a una hoja en blanco, cerré los ojos y tracé unas líneas sin sentido, después solo abrí mis ojos y seguí alargando las líneas, enredándolas y volviéndolas a separar formando un dibujo q no me esperaba. Lo hice sin pensarlo solo lo dibuje. Cerré rápidamente el cuaderno y rogué que Gabriel no hubiera visto nada.
¿Por qué?
Porque lo dibuje a él ¿Por qué? Ni idea, solo lo hice, fue como si mi mano estuviera sola y se moviera formando cada detalle de su rostro.
Giré mi cabeza y note q estaba jugando en su teléfono así que solté un suspiro que al parecer él notó.
- ¿Que sucede? - pregunto alzando una de sus cejas
- Nada... ¿Como puedes hacerlo?
- ¿Qué cosa?
- ¡Alzar una ceja y dejar la otra abajo! - exclamé - Yo nunca lo he logrado y tú con gran naturalidad lo haces. - cruce mis brazos e hice un puchero causando que se riera seguido por mi
- Creo que es algo natural - dijo encogiéndose de hombros - Por cierto linda risa - me dijo sonriente mientras me veía a los ojos con sus hermosos ojos azules
- Voy a arrancarte los ojos - le dije embobada causando otra vez una carcajada en cada uno - Gracias por lo de linda risa, creo que es la primera vez que rio así desde... los 8 años - me encogí de hombros
- Bueno, pues ya es tiempo de que le des uso, y si necesito darte mis ojos pues lo haré - volví a reír
- Son hermosos, son los más azules que he visto en mi vida. Tienes suerte - le di un golpe amistoso en el hombro.
- Los tuyos no se quedan atrás.
- Son solo negros - le dije rodando los ojos
- Pero tienen un brillo lindo...parecen de niña pequeña - solté una risita al igual que él
- Que importa eso, los tuyos son azules y no cualquier azul, es un azul celeste claro hermoso.
- De ahora en adelante cuidaré más mis ojos... Ya tengo miedo de que me los saques en cualquier momento con una cuchara o algo - dijo haciendo una expresión de terror exagerada
- Jum, gracias por darme es idea... ¿Crees que las del comedor me preste alguna?
- Ni siquiera quiero saber.
- Bueno yo si... además de que quiero comer.
- Pues vamos, levántese - dijo extendiendo su mano hacia mí para ayudarme a levantar.
- Oye, en el autobús me preguntaste sobre la música y se me olvido decirte otras de mis bandas favoritas.
- ¿Cuáles?
- Primero Imagine Dragons, luego Panic! At the disco, Breaking Benjamin, Paramore y Metallica.
- Jamás he escuchado Breaking Benjamin, de las otras he escuchado algunas.
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Mil razones para matarme
Teen FictionA veces la vida cansa y hace que tomemos deciciones que para algunos son malas y para otros son buenas. Hay días que queremos desaparecer de la fas de la tierra, no queremos existir, no queremos estar aquí. Muchos solo se desprecian, unos llegan mas...