Muy ocupada Follando

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Alex


Mis compañeros de piso están absolutamente borrachos cuando entro en elsalón después del grupo de estudio. La mesa de centro está repleta de latasvacías de cerveza, junto a una botella casi vacía de Jack Daniels que sé quepertenece a Nicky, porque ella es defensora de la filosofía «la cerveza es paracobardes». Son sus palabras, no las mías.En ese instante, nicky y Tucker están luchando entre sí en una intensapartida del Ice Pro, su vista pegada a la pantalla plana mientras golpeanfrenéticamente los mandos. La mirada de Nicky se mueve ligeramentecuando nota mi presencia en la puerta y su fracción de segundo dedistracción le sale cara. 

—¡Toma, toma, toma! —Tuck se pavonea cuando su defensor dispara untiro que sobrepasa al portero de nicky y el marcador se ilumina. 

—Joder, ¡por el amor de Dios! —nicky pausa el juego y me lanza unamirada sombría—. Pero qué leches, Al. Me la acaban de colar por tu culpa.No contesto porque ahora soy YO la que está distraída por lo que sucedeen la esquina de ese mismo cuarto: una sesión medio porno. Y cómo no, elactor principal es Dean. Descalzo y con el torso desnudo, está tirado en elsillón mientras una rubia que no lleva más que un sujetador negro de encajey unos pantalones cortos está sentada a horcajadas sobre él y se frota contrasu entrepierna.Unos ojos azules oscuros asoman sobre el hombro de la chica y Deansonríe en mi dirección. 

—¡Vause! ¿Dónde has estado? —masculla.Vuelve a besar a la rubia antes de que pueda responder a su borrachapregunta.Por alguna razón, a Dean le gusta enrollarse con tías en todas partesmenos en su dormitorio. En serio. Cada vez que me doy la vuelta, estámetido en algún acto lujurioso. En la encimera de la cocina, en el sofá delsalón, en la mesa del comedor... El chico se lo ha hecho en cada centímetro dela casa que compartimos los cuatro fuera del campus. Él es un zorrón total,y no tiene ningún complejo al respecto.Por supuesto, yo no soy nadie para hablar. No soy ninguna santa, comotampoco lo son nicky y Tuck. ¿Qué puedo decir? en este grupito siempre estamos cachondos. Cuando no estamos en el hielo, normalmentese nos puede encontrar liándonos con una chica o dos. O tres, si tu nombrees Tucker y es la Nochevieja del año pasado. 

—Te he estado enviando mensajes desde hace una hora —meinforma nicky.Sus  hombros se encorvan hacia delante mientras coge la botellade whisky de la mesa de centro. nicky es  la defensora central, una delas mejores con las que he jugado, y también es mi mejor amiga que he tenido. 

—En serio, ¿dónde coño has estado? —se queja nicky. 

—En el grupo de estudio. —Cojo una Bud Light de la mesa y la abro—.¿Qué es esa sorpresa de la que no has parado de escribir?Siempre puedo deducir cómo de gordo es el pedo que lleva nicky basándome en la gramática de sus SMS. Y esta noche tiene que sersuper gordo porque he tenido que hacer de Sherlock a tope para descifrar susmensajes. «Suprz» significaba «sorpresa». Me ha llevado más tiempodecodificar «vdupv», pero creo que significaba «ven de una puta vez».Aunque nunca se sabe con nicky.Desde el sofá, sonríe tanto, tanto, que es increíble que su mandíbula no sele desencaje. Lanza el pulgar hacia el techo y dice:

 —Sube arriba y lo ves por ti misma.Entrecierro mis ojos.

 —¿Por qué? ¿Quién está ahí?nicky suelta unas risitas. 

—Si te lo dijera, no sería una sorpresa.

 —¿Por qué tengo la sensación de que estás tramando algo? 

—Por Dios —dice Tucker con voz aguda—. Tienes serios problemas deconfianza, Al.

 —Dice el idiota que dejó un mapache vivo en mi dormitorio el primerdía del semestre.Tucker sonríe.

PROHIBIDO ENAMORARSE - VAUSEMAN -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora