Estoy flirteando con ella

249 47 12
                                    



Pov Alex

Soy adicta  a ese momento justo antes de despertarme. Ese momento en el que las tenues telarañas que hay dentro de mi cerebro se juntan para formar una bola coherente de consciencia. Es el momento más «¡¿qué coño pasa?!»del día. Desorientada y confundida, con la mitad de mi cerebro perdido todavía en el sueño que estaba teniendo. Pero esta mañana, algo es distinto. La temperatura de mi cuerpo parece más alta de lo normal y me doy cuenta del dulce olor que me rodea. ¿Fresas? No, cerezas. Sin duda, cerezas. Y algo me hace cosquillas en la barbilla, algo suave y duro al mismo tiempo. ¿Una cabeza? Sí, hay una cabeza en mi cuello. Y un brazo fino extendido sobre mi estómago. Una pierna templada enganchada en mi muslo y un pecho blando descansando sobre mis pechos. Mis ojos se abren poco a poco y veo a Piper acurrucada junto a mí. Yo estoy boca arriba con mis dos brazos envolviéndola a ella, sujetándola fuerte contra mi cuerpo. Ahora ya sé por qué mis músculos están tan tensos. ¿Hemos dormido así toda la noche? Recuerdo estar en lados opuestos de la cama cuando me quedé dormida, tan separados el uno del otro que casi esperaba encontrarme a Piper en el suelo por la mañana. Pero estamos enredadas en los brazos de la otra. Está cool. Me pongo en alerta. Lo suficientemente alerta como para darme cuenta de ese último pensamiento. «¡¿Está Cool?!» ¿En qué cojones estoy pensando? Los abrazos están reservados para las novias. Nada más. Y las novias no son lo mío. Pero tampoco la suelto. Ahora estoy totalmente despierta, oliendo su esencia y disfrutando de la calidez de su cuerpo. Miro el despertador que va a empezar a sonar en cinco minutos. Siempre me levanto antes que él, como si mi cuerpo supiese que me tengo que despertar, pero lo programo de todos modos por si acaso. Son las siete. Solo he dormido cuatro horas, pero me siento, extrañamente, descansada. Con sensación de paz. Aún no estoy preparada para soltar esa sensación así queme quedo ahí tumbada con Piper en mis brazos escuchando su respiración constante.¡¿Estoy empalmada?! La voz horrorizada de Piper rompe el tranquilo silencio. Salta hasta que se queda sentada, pero se cae hacia atrás. Sí, Grace Kelly pierde el equilibrio mientras está tumbada porque su pierna sigue sobre mis muslos. Y sí, sin duda hay una tienda de campaña montada en mi zona sur.

—Tranqui —digo con voz ronca de recién despertada—. No es más que un empalme mañanero.

—Un empalme mañanero —repite—. oh por Dios, yo no sabia que... eres tan...—¿ eres un Chico? —respondo con frialdad—. No, no  lo soy.

—Veras yo soy algo conocido como intersexual.—su expresión es atónita se queda pensado hasta que sus hombros tensos se relaja.—Y eso es lo que nos pasa a todo aquel que tenga un pene por las mañanas. Es la naturaleza, Chappy. Nos despertamos empalmados. Si te hace sentir mejor, no estoy ni un poco cachonda ahora mismo.

—Vale. Acepto tu excusa biológica. Y ahora, ¿puedes explicarme por qué has decidido abrazarme por la noche?

—Yo no he «decidido» una mierda. Estaba dormida. Y por lo que sé, has sido TÚ la que ha trepado encima de mí.

—Jamás haría eso. Ni siquiera dormida. Mi subconsciente nunca lo permitiría. Me empuja con su dedo en el centro del pecho y a continuación se baja de la cama tan rápido que la veo moverse como en una imagen borrosa. Cuando se va, experimento una sensación de pérdida de inmediato. Ya no es todo cálido ni acogedor sino frío y solitario. Cuando me siento y subo los brazos para estirarme, sus ojos Azules miran fijamente mi pecho desnudo y su nariz se arruga con asco.

—No me puedo creer que mi cabeza haya estado encima de esa cosa toda la noche.

— Mi pecho no es una «cosa». —La miro directamente a los ojos—. A otras mujeres parece gustarles bastante.

PROHIBIDO ENAMORARSE - VAUSEMAN -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora