Había sido una tarde agotadora pero al menos tenían la idea principal del proyecto. Consiste en representar una historia de amor sobre dos personas que se descubren a sí mismos gracias a la compañía del otro. Era un poco difícil de representar, pero sin dudas original.
Ya estaba casi anocheciendo cuando volvieron del bosque, Jihoon había amado ese lugar, de niño adoraba estar rodeado de naturaleza y disfrutar sus días corriendo entre los árboles. Sin duda, Park le pediría que regresaran al bosque para la próxima vez.
Llegaron al taller un poco cansados de caminar, Jihoon había pisado accidentalmente un hormiguero y tuvieron que correr despavoridos, aunque realmente no tenían por qué, no es como si las hormigas se convirtieran en mutantes de un segundo a otro y los fueran a atacar. Pero bueno, prevención ante todo.
En el taller de noche se podía observar el cielo nocturno y los árboles alrededor. El lugar era muy espacioso, por lo que en la esquina derecha había un sillón al lado de la estantería donde estaban acomodados alfabéticamente algunos discos. Hyunsuk se sentó, mirando al rubio para que haga lo mismo.
—Ya son las ocho y cinco, se nos hizo un poco tarde—dijo irónicamente el mayor—¿quieres comer algo?
—¿Trajiste para comer? —Jihoon volteo su cuerpo en dirección del pelinegro.
—Bueno, en realidad son algunas pizzas que estaban hace semanas en el refrigerador, por si quieres. O si no, podemos ir hasta mi casa, que no está lejos del parque, y podemos cenar allí, si quieres.
Jihoon estaba nervioso e indeciso, ir hasta la casa de Choi Hyunsuk nunca sonaba como una buena idea, en ningún contexto. Pero de alguna forma había conocido a otra versión de él ese mismo día, por lo que aceptó luego de meditarlo unos segundos.
...
—¿Seguro que a tus padres no les molestara?
—Mamá está viendo su novela y termina a las doce, mi padre está probablemente corrigiendo exámenes por lo que queda de la noche, mis hermanos ya cenaron y probablemente estén durmiendo—dijo el mayor poniendo agua en la olla—si algo sé cocinar es pasta, así que espero que te gusten los tallarines.
El menor sonrió entrando a la cocina—¿te puedo ayudar con algo?
—Prepara la mesa, los platos están en la repisa de arriba y los cubiertos en el tercer cajón de la izquierda—prendió el fuego de la hornalla—los vasos están junto con los platos.
Luego de unos minutos, Hyunsuk estaba revolviendo la pasta y Jihoon sentado sobre la isla de la cocina. Hablaban sobre la universidad y sus distintas carreras, aunque ambos estudian el "arte" tanto musical como bellas artes, eran totalmente distintas.
—¿Cómo es que conoces tan bien la universidad?—el rubio movía sus piernas que no tocaban el suelo—yo aun me confundo con los salones.
—Te acostumbras, además con mis amigos siempre vagamos por los pasillos, ayudando con actividades extra y demás. No es tan grande como parece, más si pasas dieciocho horas del día allí dentro.
Jihoon se sorprendió.—¿no es demasiado?
—Todo por las acreditaciones y becas, que los rumores no te digan lo contrario. Si nos ofrecemos para ayudar es por conveniencia, aunque es divertido hacer guías y "ordenar" la biblioteca—hizo comillas—en realidad con Junkyu comenzamos una guerra de libros. Menos los de medicina, si revoleamos uno de esos, probablemente terminemos con una hemorragia.
Al rato los fideos estaban listos, Hyunsuk también preparó salsa haciendo el servicio completo. —Odio la salsa de supermercado—dijo mientras le servía un plato al menor—es como tomar licuado de tomate, asqueroso.
—No es tan mala—contradijo—aunque mi madre hace la mejor salsa de todo Seúl.
—Eso ya lo veremos, primero come.
Hyunsuk realmente era buen cocinero, la comida estaba espectacular. Jihoon comió durante unos minutos en silencio, sin responder a lo que el mayor le decía.—¿Te deje sin aliento?
Hyunsuk río mientras el rubio se ruborizaba por el comentario.—Por favor Hyunsuk
—Está bien—dijo aun con la sonrisa en su rostro—como te decía, ¿que tal te pareció el taller de mi padre?
—Hermoso, sabes incluso parece sacado de una película de los ochenta. O como si fuera una cápsula del tiempo, ir allí es como volver al pasado de alguna forma, me gusta—Jihoon volvió a enrollar fideos con su tenedor—y el bosque es lo que más amé, amo estar en la naturaleza desde pequeño.
—¿De verdad?
—Sí, uno de mis tíos tenía un campo. Solía visitarlo cada tiempo, me acuerdo de correr entre los árboles del fondo y jugar con algunos animales que había allí.
Hyunsuk miró al menor mientras comía.—Imagino un mini Jihoon corriendo entre los árboles—no pudo evitar sentir ternura—aww.
—Ya—dijo, sonrojándose por quinto décima vez en la noche—hasta que mi tío tuvo que vender el campo, y luego lo más cerca que estuve de la naturaleza fue el parque a diez cuadras de mi casa en Busan.
—Bueno, ahora podremos ir más seguido al taller, si quieres—Hyunsuk terminó su plato—quizás deberíamos limpiar un poco más, tiene sus años ese lugar.
Jihoon asintió, había un poco de suciedad para ser honestos, y tenía la suerte de no ser alérgico al polvo—¿como se llamaba la banda de tu padre?
—Algo así como, "carpe diem"—dijo, haciendo comillas con los dedos.
Jihoon abrió los ojos de repente.—¿La sociedad de los poetas muertos?
—Esa misma, ¿la conoces?—el mayor se sorprendió ante la respuesta.
—¡Es mi película favorita!
—Podríamos verla la próxima vez que nos reunamos, ya sabes, por la inspiración.
—Sí, claro—murmuró apenas audible.
Era obvio que Hyunsuk tenía una doble intención, y tampoco se esforzaba en ocultar. Jihoon no era tan distraído como para no notarla, a eso se debe todos los sonrojos que el mayor le producía.
—¿Cuándo te volveré a ver?—preguntó el mayor acompañando al menor a la puerta, ya se había hecho un poco tarde y debía volver a casa.
—El lunes—Jihoon ya estaba por cruzar la puerta de la casa—eh, Hyunsuk, toma—de su bolso sacó el álbum que le había prestado hace unos días.
Hyunsuk sonrió al ver su álbum, pero sus acciones fueron otras—quédatelo, si con una canción pudiste hacer ese boceto, entonces te ayudará mucho. Cuidate Jihoon, adiós.
Al cerrar la puerta, Hyunsuk pudo sentir su corazón atascado en la garganta. Realmente ese chico era una locura para él.
[...]
les va gustando la historia?):
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list ─ sukhoon
Hayran KurguConsistía en lo siguiente: la élite universitaria escribía una lista de sus objetivos cada mes. Era un pequeño juego del que Hyunsuk se negaba a participar, pues le parecía totalmente patético, ¿Quién diría que un estudiante de arte lo haría cambiar...