El primer beso...

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Aclaraciones,
Cuando vean letras escritas con este formato, es voz en off o narrador. :)

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Me quede allí, en las gradas de ese enorme lugar. Sola. Mirando atentamente cada una de las batallas. Por momentos sentía que nada era real, esos jóvenes, luchando por una armadura, cosa totalmente impensada en mi época. A su edad estarían de fiesta, con amigos, bebiendo, divirtiéndose, pensando en la persona que les atrae...
Y eso me hace pensar en él, este joven tan amable, tan atento, tan dulce conmigo...

-Dohko- casi en un suspiro, y de manera inconsciente, su nombre salió fugazmente por mi boca- que voy a hacer?

Mi cabeza pensaba en mi salida, "mi cita", de mañana. No puedo ilusionarme con alguien de aquí, no es mi tiempo, no es mi mundo, debo volver a mi tiempo y allí si buscar a alguien... Pero y si no vuelvo...

-basta Ema! Tranquilizate- dije casi retandome,- no es momento para estos bajones emocionales, además...- miro a mi alrededor y veo que poco a poco se estaban retirando del lugar.

Tome mi canasta y salí rumbo al lugar donde se encontraba Aldebaran, lo último que quería era quedarme sola.

Me encontré con él y nos fuimos rumbo al santuario.

Unas horas más tarde...

Ya de noche en mi habitación, me quedé pensando en que haré mañana. Osea, en mí época solía salir con un chico, hace ya un tiempo, pero rompimos. Él se porto muy mal.. me engañó, y eso es algo de lo que cuesta salir. No es fácil volver a confiar. Y además que demonios!!! Por qué estoy pensando en amores si yo me voy a ir de aquí y no volveré a verlos más.

- ya duermete Emma!!!- me dije en tono de enfado.

Me tiré en la cama, gire mí cuerpo en dirección a la venta, y quedé completamente perdida mirando la luna, es tan bella, tan brillante. Cerré mis ojos y dormí tranquila.

A la mañana siguiente, me desperté con el insistente llamado de Kamisu.

- señorita disculpe mí atrevimiento- dijo Kamisu tocando mí hombro,- me tomé el atrevimiento de pasar a su habitación, ya que no me respondía. Pensé que le había pasado algo.

- discúlpame- me incorpore lentamente- siento como si me hubiese pasado por arriba un auto.

- un qué?

- uh cierto! No debo hablar del futuro- dije a modo de reproche conmigo misma- quise decir como si algo pesado me hubiese aplastado. Estoy agotada y sin energías.

- despreocupese por eso! Yo le prepare un desayuno que la va a hacer recobrar todas sus energías jovencita- dijo muy alegre dirigiéndose hacía la puerta- cambiese que la esperamos en el salón para comenzar el desayuno.

- gracias Kamisu- la vi retirase por la puerta-... Realmente lo necesito.

Me cambié, arregle un poco mí cabello y fui directo al salón. Mí panza rugía como bestia salvaje. Yo pensaba, por que tengo tanto hambre y estoy tan agotada, si no hice mucho el día de ayer. Me pareció muy extraño.
Llegué al salón y pude ver qué tauro ya estaba en su lugar de siempre aguardando mí llegada.

- muy buenos día jovencita- dijo enérgicamente- cómo estás? Cómo has dormido anoche? Tienes una cara no muy buena, déjame decirte.

- buenos días Aldebarán, la verdad que dormí bien pero amanecí muy cansada.

- que raro! Tal vez la vida aquí te sienta más difícil que en tu tiempo. Tal vez no se acostumbro tu cuerpo a este lugar, a este tiempo.

- tal vez sea eso, la verdad no lo sé- dije tomando un sorbo del delicioso te que preparo la vestal para nosotros.

MI DECISIÓN (The Lost Canvas x Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora