La clave está dentro de mí

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Fuimos directo a la primer casa del zodiaco, hasta Aries.
Aquella enorme estructura, con columnas imponentes a su alrededor, parecía estar impaciente por vernos llegar. Su ambiente, la energía que de ella emanaba, no sé cómo explicarlo en palabras, pero parecía que sabía que algo impresionante iba a suceder hoy.
Una bruma pesada, pero no por ello desagradable, permanecía a su alrededor, como protegiendo de cualquier extrañó, de aquel que por simple curiosidad o sin querer se atreva a pasar a través de ella, impidiendo con el más terrible castigo ese simple accionar.
Este momento debía darse, estás acciones estaban ya escritas. En el cielo, en las estrellas,... En la historia.

Mis ganas por saber de una vez por todas que estaba pasando conmigo no me dejaban descansar. Mí mente estaba a mil revoluciones. Mí, aparente, tranquilidad exterior no se parecían en nada con el tormentoso mar que había en mí interior. Las preguntas, las dudas, los interrogantes sin respuestas que había en mí ser podían volverse simplemente insoportables.
Pero a todo esto se preguntarán qué calmaba está fiera indomable, que era sin más mí cabeza, mis pensamientos, pues ... Aún no lo sé, estas personas, este lugar, a pesar de que me eran tan ajenos los sentía muy míos. Por Dios!!! Estoy tan llena de contradicciones.

Mis preguntas giran en mí cabeza, se agolpan una tras otra. Siento, muy dentro de mí corazón, que alguna certeza tendré que sacar. Las casualidades existen? En ese momento me preguntaba cómo nunca, si acaso no son al azar. Si está todo escrito en algún extraño libro de vida. Porque debe haber algún motivo para que yo saltará de está manera en el tiempo, no es algo que suele pasar.

Mis piernas temblaban, estaban a unos escasos metros del primer escalón que daba la bienvenida a las puertas de la casa de Shion. No es la primera vez que entraba en ella, pero aún así parecía una novata, como si nunca hubiese estado allí. Cómo si estaría a punto de ingresar a un lugar donde más que respuestas, me daría más dudas. No lo sé, mí presentimiento, mí sexto sentido me lo anunciaban.

Tomé todo el valor del mundo, y con un poco de aliento ingresé.

Yuzuriha estaba completamente sería. Cómo si no tuviera sangre en sus venas, era una soldado. No emitía un simple gesto en su rostro. Su cuerpo, sus piernas caminaban firmes y decidías a ir por el dueño de la casa.
Yo, en cambio, estaba con un exagerado miedo a lo que vendrá. A lo que me dirá su oráculo.
Y si acaso yo soy una amenaza para ellos, o ellos para mí? No Ema, ya deja esos pensamientos y enfócate en descubrir el por qué estás aquí, me dije firmemente a mí misma.

A lo lejos pude divisar el brillo característico del oro. Sin decir, que aquellas extravagantes pero hermosas armaduras tenían un pulido y cuidado casi diría, perfectos. Sin hablar de la finura y blancura de sus extensas capas.

Allí estaba Aries, inconfundible, con su hermoso cabello y su bella sonrisa, aunque un poco tímida. De la última vez que estuve aquí, se comporta de una manera muy tímida, tal vez lo intimidó mucho, no lo sé, espero no incomodarlo, ya que realmente necesito de su habilidad, de su ayuda.

-Yuzuriha: maestro Shion, hemos venido con Ema a pedir su gran ayuda.

-Shion: Sean bienvenidas a la casa de Aries, con gusto voy a ayudarlas. Díganme cuál es el motivo de su visita?

-Yuzuriha: vinimos aquí con Ema para que puedas guiar su mente subconsciente a que encuentre las respuestas del por qué llegó a esta época- aclaro su garganta- mí maestro nos comentó de tu habilidad para poder entrar en las profundidades de la mente y buscar respuestas.

-Ema: por favor- interrumpí a la joven- necesito saber!

-Shion: ammm- un poco ruborizado al dirigir sus ojos a la joven, aún no olvidando el acontecimiento en los apostemos de aries- si, haré todo mí esfuerzo por ayudarte Ema. Dalo por hecho- volvió a mirar a la yuzuriha- por favor, siganme por aquí.

MI DECISIÓN (The Lost Canvas x Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora