Recorrido por las casas_parte dos_

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- Está es la casa del señor Kardia de escorpio.
- que raro?- dije con curiosidad- por qué tiene tantas manzanas? Hay por todas partes!
Este lugar estaba repleto de manzanas, sobre la mesa, en los estantes de la sala, en el sillón, al lado de la puerta de entrada...

- el señor Kardia gusta siempre de comer manzanas, es uno de sus mayores placeres- decía mientras caminaba firme hacia la salida.

- por lo visto no se encuentra en su casa- mirando hacía todos lados- que hacen durante el día?

- los caballeros tienen diversas actividades, además de proteger el santuario de Athena, ellos deben entrenar, algunos tienen sus propios discípulos a los cuales deben formar como futuros caballeros- decía mientras nos acercábamos a la salida - otros deben viajar en misiones que son encargadas por el patriarca.

- ya veo- dije mirando a lo lejos- tienen mucha responsabilidad sobre sus hombros, por ser tan jóvenes.

- así es señorita, pero es la vida que ellos eligieron y realizan sus actividades con mucho gozo - mirándome de costado con una sonrisa - está es la casa del señor Dohko, caballero de Libra.

Sentí un pequeño puntazo en el estómago cuando escuché que la vestal dijo que la casa siguiente era de ese joven. Nosé el por qué pero me comencé a poner nerviosa. Es decir, no es que me intimide, pero... Bueno nosé que me pasa. Parezco una adolescente tonta. Debo pasar por su casa sin demostrar nervios.

Cuando ingresamos pude ver lo hermosa y amplia que era. Grandes columnas de mármol se depositaban a cada lado del caminó por el que transitabamos. Los pisos, las paredes de un gris reluciente le daban un aspecto tan antiguo pero a la vez lujoso. Realmente las casas de los caballeros eran muy preciosas. Cada una tenía una característica particular.

En el caso de Dohko se podía sentir un aroma tan exquisito, como explicarlo, era dulce, suave pero a la vez penetrante, se siente también un aroma precioso a maderas. Era como una fotografía salida de una revista de diseño, dónde todo estaba perfectamente ordenado, el bello arte de la arquitectura del lugar acompañado de un aroma sublime en el aire.

- dime, que es ese aroma tan bello que se siente en todo el ambiente- mientras seguía oliendo el aire con cara de boba.

- oh lo dices por esa fragancia tan exquisita?.. pues el señor Dohko es de origen chino y de dónde el proviene es muy común que haya plantaciones de Orquídeas- decía sin dejar de caminar a paso firme- al mudarse de su hogar originario en China trajo con sigo semillas de está hermosa planta y decidió plantarla en su jardín, la vestal que está asignada a la casa de libra, la bella señorita Sakura,todos los días cuida de esas plantas y corta algunas flores para decorar y aromatizar el lugar.

- oh ya veo- dije algo decepcionada- que suerte que esa jovencita cuide tanto de libra- encima es bella... Ya ni se porque me pongo así, a mí que me importa quien cuide de este lugar. Mí único objetivo es volver a casa.

- se encuentra bien señorita?- disminuyendo el paso y mirándome con preocupación- dije algo malo? Algo que la incómodo?

- no! No es nada - moviendo mis manos- no te preocupes. Es que estoy un poco cansada, son demasiadas casas y escaleras para mí.

- Después de un tiempo se va a acostumbrar a estas largas escaleras, creame - la mire con cara de horror, está bien que me guste hacer ejercicio pero esto es extremo.

- que es esa energía extraña que emana esa casa? - señalado el siguiente edificio.

- le pido encarecidamente que no haga ruido- me detuvo antes de entrar, tomándome por los hombros y mirándome fijamente- esta es la casa de Asmita el caballero de Virgo, el está en meditación y detesta que lo molesten, por favor le pido que atravesemos está casa en el más sumo silencio.
Se puso delante mío, como una especie de guía y nos adentramos en la casa.
Era un sitio muy extraño, a diferencia de las demás. Tenía una energía muy calmada pero a su vez se sentía un sentimiento de amenaza constante, como si con el más mínimo movimiento podrías caer presa en una terrible trampa. A lo lejos pude ver al caballero de virgo, sentado sobre un pedestal con forma de flor de loto, meditando. Se podía ver un aura de color amarillo brillante que emanaba de su cuerpo, era algo hermoso. Cuando quise parar a mirar con más detenimiento, la vestal jalo mí brazo para seguir caminando. En ese instante, aunque parezca algo loco, sentí una conexión con ese hombre, como si hubiese querido comunicarse conmigo. Cuando quise reaccionar ya estaba fuera de su casa.

- qué fue todo eso?- dije aún dirigiendo mí mirada incrédula hacía adentro.

- el señor Asmita es muy reservado, realmente estoy sorprendida que haya reaccionado así- dijo mirándome a los ojos, cómo buscando una respuesta.

- quieres decir que se enojo porque lo mire mientras meditaba?- me lleve las manos a la cabeza- tal vez lo desconcentre y ahora está enojado ... Oh no, yo no quiero conflictos con nadie- dije tristemente.

- todo lo contrario joven Ema- dijo girandose en dirección a la siguiente casa- le ha caído muy bien al caballero de Virgo.
Quedé con mí cabeza de lado, mirando embobada hacía el horizonte... Que me habrá querido decir.

-Mire en frente se encuentra la casa del joven de Leo, el dulce Regulus- esbozando una sincera sonrisa.

- se ve que usted lo aprecia mucho- le dije con un gesto de alegría... Saliendo de mis pensamientos raros con lo sucedido en Virgo.

- ayude a su tío, el Caballero de Sagitario, a criar al joven desde que era un bebé, sus padres fallecieron y el señor Sisifo lo trajo al santuario para que sea criado y educado como un caballero de Athena- en su semblante se veía una mezcla de satisfacción y alegría- lo crié siendo un bebé, un niño, luego un adolescente y ahora a sus veinte años es todo un adulto del cual me siento muy orgullosa.

- me alegro mucho que a pesar de haber perdido a sus papás, él se haya criado rodeado de amor, debe ser un muy buen chico.

- es el más bueno y dulce de todos los caballeros, tiene una bondad única en su ser.- dio un suspiro y me miró de reojo- perdón pero es que lo quiero mucho, es como un hijo para mí.

- lo entiendo, uno puede sentir el cariño que sentiría por un hijo propio en casos así. Usted debió haber sido una madre muy dulce.

- muchas gracias joven Ema- sus ojos se pusieron vidriosos, esquivo mi mirada y simplemente sonrió al horizonte.
Sentí que algo en ella no estaba bien creo que la incomode, me senti un poco mal por ello. Traté de cambiar de opinión.

- siguiendo el orden está debería ser a casa de cáncer verdad?

- así es, aquí vive el caballero de cáncer, su nombre es Manigoldob- dijo mientras igresabamos al recinto- será su futuro tutor.

La casa era extremadamente grande, aunque bastante desprovista de adornos y muebles. Era muy minimalista. Pero acogedora. De un color azulado, con grandes columnas a tono. No me desagradaba en nada. Aunque podría agregarle más color.

- como es el señor manigoldo? - pregunte curiosa.

- es muy rudo, exigente en sus entrenamientos, con un sentido del humor muy particular... Pero tiene un gran corazón. Simplemente hay que conocerlo y entenderlo.

- veo que me será un poco complicado- fruncí el seño.

- debe darle su tiempo, seguramente se llevaran de maravilla- dijo mientras sin darme cuenta llegábamos a la entrada de Géminis- deme la mano señorita, la casa de geminis está llena de laberintos y si no conoce como cruzarlos podría perderse.
Tome su mano, ella me apretó fuerte. Vi como sacaba una especie de piedra, amuleto, dijo unas palabras.

- cierre los ojos jovencita.
Cerré los ojos, sentí un fuerte viento en mi cara, y el silencio.

-abra los ojos por favor

- ya estábamos fuera de geminis y en las puertas de Tauro.

- al fin hemos llegado a su nuevo hogar joven Ema.

MI DECISIÓN (The Lost Canvas x Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora