Todo pasa por Algo.

Solo tengo ojos para ti.

En cuanto subimos, se puso atrás de.
Me besaba el cuello, no evitaba mover mi cabeza para quedar con el cuello descubierto.

Estuvimos así por varios minutos, hasta que se separo mientras cerraba cortinas y ventanas que se encontraban abiertas.

Al termina me tomo de las dos manos, Jan solo caminaba hacia atrás, provocando seguirlo hasta donde se movía.

Cuando sintió la cama se acostó y me jalo hacia él.

Jan: Eres hermosa, no sabes la alegría que tengo porque eres parte de mí.
Yo: Tu me has sacado de mi pasado, has hecho que me enamoré, y que no este sola, encerrada sin nadie con quien platicar, solo libros y yo.
Algo de lo cual estoy agradecida, me has demostrado que el amor verdaderamente existe.

Se le salió una lágrima, enseguida la limpio.
Cuando lo hizo puso su mano en mi mejilla, hasta recorrerla y llegar a mi nuca.

Me fue jalando poco a poco hasta besarme.
Al abrir los ojos, Jan seguía con los ojos cerrados y besandome.
Logre ver como las lagrimas corrían por su cara.

Se separo de mi, y pidió disculpas, al parecer mi comentario lo hizo ponerse sentimental.

Jan: Me alegra que una persona como tú diga eso sobre mí.
Yo: A mí me alegra tener una persona como tú.

Jan se acostó bien en la cama, y me hacia señas para acostarme junto a él.

No dude en hacerlo y acostarme en su pecho.

Minutos después escuchamos sonar el timbre en la puerta principal.
Los dos saltamos para cambiarnos, estábamos tan nerviosos que no queríamos abrir.

Al momento en que nos cambiamos Jan bajo pero sin antes decirme algo.

Jan: Es Mario, le diré que nos reconciliamos y que te invite a venir.
Yo: Espero que funcione.

Jan estaba bajando para abrirle a Mario.
Yo fui tras de él para saludarlo.

Mario: Hola, al parecer ya están juntos de nuevo. -Dijo serio y decaído.-
Jan: Sí, hoy volvimos a nuestra relación normal.
Mario: Me alegra. -Contesto sarcástico.-

Mario dejo unas bolsas en el comedor y subió a su cuarto sin decir una palabra.

Yo: ¿No le cayó bien la noticia? Ya le recalque la causa, iré a hablar con él.
Jan: No, déjalo. Sólo es cosa de buscar a alguien que lo haga feliz.
Yo: Me niego a su subir si me explicas lo del ramo. -Dije seria.-
Jan: Me lo regalaron, pero no tenia caso conservarlo, solo tengo ojos para ti. -Dijo mientras sonreía.-
Yo: Al menos no fue algo malo. -Conteste aliviada.-
Jan: Así que te quedas aquí, Mario se recupera pronto, encerio.
Yo: Lamento mentirte. -Dije mientras corría por las escaleras para llegar al cuarto de Mario.-