Todo pasa por Algo.

¿Y tú camisa? 3/3

Yo: ¿Qué harás sin tú camisa?
Jan: ¿Eso es un "No te devolveré la camisa"?
Yo: Me encanta como piensas.
-Se sonrojo-
Jan: Supongo que ahora me prestaras tú ropa.
Yo: Claro, tengo unas blusas rosas que quedan contigo.

Simplemente nos reíamos de cada tontería que decíamos.

Jan: ¿Aún esta el saco aquí no?
-El saco de aquel día que hablo con, Mario.-
Yo: Sí.
Jan: Supongo que me lo pondré así no ir sin camisa, sacar más ropa de mi casa, ¿Puedo quedarme unos días más, no?
Yo: Claro, sólo que no sea el sábado, regresan mis padres de su "viaje" con mi hermano.
Jan: ¿"Viaje"? Tal vez te dejaron.
-Pone una media sonrisa.-
Yo: Siempre existe la posibilidad.
Jan: Podría estar en lo correcto.
Yo: Al menos te tengo a mi lado.
Jan: Siempre cuenta conmigo.
-Se levanta-
Yo: ¿Iras por más ropa?
Jan: Sí.
-Lo decía mientras se pone el saco.-
Yo: Pero ya esta tarde, son las 11 p.m.
Jan: No importa, pedí permiso de estar con unos "amigos" en sus casas.
Yo: Eres lo bastante listo. Sabias que habría una posibilidad de que te quedarías en mi casa, y esa posibilidad es un 100%.
Jan: Por eso te amo.

Yo: Y, ¿Qué pasará si vez a, Mario?
Jan: No está en casa, siempre a estas horas está fuera con sus amigos, Lo sé por que estaba hace rato en tú casa.
Yo: Sigo pensando en el como entro a la casa, si todo estaba cerrado con llave.
Jan: Le apodan "El señor habré puertas".
Yo: Creo que ese apodo no le queda.
Algo así como "El señor anda con cualquiera".
Jan: Ese me gusta.

- Se dirige a la puerta. -
Yo: ¿Iras solo?
Jan: Sí, a excepción de que quieras ir.
Yo: Con gusto.
Jan: Vamos, sirve de que sepas donde vivo.
-Cerramos la puerta.-
En todo el camino íbamos agarrados de la mano, escuchando música del celular de, Jan. Era hermoso, una caminata nocturna, bajo las estrellas, agarrados de la mano. Era como si todo lo hubiese planeado, como todo.
Llegamos a la casa.
Jan: Ok, ¿me esperas un momento? Las luces siguen prendidas y como pedí permiso para estar con amigos, se notara raro que entres.
Yo: Claro, yo te espero.
Jan: Toma.
-Me da su teléfono.-
Jan: Te lo dejo para que no te aburras.
-Me da un beso en la frente.-
Yo: ¡No tardes!.
Jan: ¡Tratare!.
20 Minutos después regreso.
Con una maleta, al parecer tenia ropa para tres días.
Llegamos a casa, y nos dormimos, eran prácticamente las 12 p.m.