Todo pasa por Algo.

Mi Nicole.

En fin, fui a entregar las invitaciones a los padres de Nicole, quienes la recibieron amablemente, aunque cuando les pedí su ayuda y les di el motivo borraron sus sonrisas repentinamente.
Asintieron, no tan seguros, sabían que dañaría a su hija, a mi Nicole.
Me fui rápidamente de esa casa, no quería saber que Nicole escuchaba o que se enterara del plan, y peor aun; de mi partida.
Llegue a casa y saque los ragalos, solo el de la fiesta lo deje a vista, el otro lo escondí arriba de mi armario, donde nadie lo vería.
Baje y para mi suerte se encontraban todos, trataban de dirigirme la palabra, pero los evitaba mientras me cruzaba de brazos. Estuve así por mas de media hora, solo quería salir, pero me lo impedían. Se que estaré castigado por mi comportamiento, pero eso no me duele. Me duele perder a Nicole.
Finalmente salí al jardín, me senté en el pasto y comencé a ver fotos de Nicole y yo, eran fotos bastante lindas, así que mande a que me otorgaran a una foto de Nicole, sonriendo. Sí, finalmente lo conseguí. Fue difícil, casi me golpea por tomarle fotos sin que se diera cuenta, pero salió hermosa, como siempre.
Supe que la tendría que poner en la caja de despedida, junto con el vestido y la carta, no sin antes escribirle atrás.
Al recordar todo sentí un golpe, de dolor, de frustración, de desamor.
No sabia que seria de mi vida sin ella, me hizo cambiar, me demostró lo que es amar de verdad, que no solo son fantasías de cuentos, o películas, si no, que es real.
Y lo sabia gracias a ella, a mi Nicole.