Ella

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Señor D: ¿Quién es ella?
Era una chica no tan mayor como el señor D, pero sí mayor que nosotros. Tenía el pelo rubio blanquecino, muy largo, y un ojo de cada color, uno rosa, el otro amarillo. Llevaba puesto un uniforme negro muy ajustado con un cinturón dorado. Llevaba en la mano un tridente negro y puntiagudo. Salió del portal del suelo volando y eso hizo que el profesor pisara el freno de inmediato. Todos nos dimos con el asiento de delante.
Mike: ¡Quiero otra vez! Me ha gustado.
Trolli: ¿Quién es?
Mike: Pues, no sé.
Raptor: ¿Quién va a ser? Sparta, necesito esconderme.
Sparta: ¿Qué pasa? ¿Quién es? ¿Para qué te quieres esconder?
Raptor: ¡Es Satana! Mi hermana mayor... ¡No quiero que me vea aquí!
Sparta: Pues no te vas a esconder debajo del asiento. Mejor lo hablamos y nos la presentas.
Trolli: Creo que no tiene muchas ganas de que nadie se presente. Tiene más cara de demonio. ¡Oye, pues no se parece tanto a ti! Es mucho más guapa.
Raptor: ¿En serio? ¡Ahora no es momento de ponerse a decir quién se parece a quién. Tengo que esconderme.
Señor D: No os mováis, chicos. Puede ser peligroso.
Pero, en ese momento, el verdadero peligro vino cuando del portal también vinieron los villanos y un monstruito pequeño que vino flotando y se posó en la cabeza de Satana.
Satana: Bien. Hemos llegado a tiempo y los hemos pillado justo aquí a todos.
Señor X: ¿Nos ponemos a pegarnos ya o esperamos a algo?
Satana: Haced lo que sea que queráis, pero yo solo quiero a mi hermano pequeño.
Mikecrack.exe: Yo te lo traigo encantado.
Hacker: No si yo primero.
No sabíamos el poder que tenía la demonio pero los villanos ya de por sí eran inútiles. Una vez visto el peligro, ya sabíamos que teníamos que volver a luchar, pero, esta vez, protegiendo a Raptor. Los villanos intentaron entrar al autobús por la vía fácil, pero las puertas estaban cerradas. El director, aunque eran también sus alumnos, parecía estar en contra de lo que estaba pasando.
Señor D: Chicos, ya habéis oído a la demonio. Proteger a Raptor. Que no le toquen.
Raptor: Sé protegerme solo. No necesito vuestra ayuda. Bueno, tal vez contra mi hermana sí que la necesite...
En ese momento, Satana tiró su tridente contra el cristal principal y se rompió en mil pedazos. Acorralamos a Raptor para que no se acercase a él, pero, entonces, entraron en escena los villanos.
Nightmare: Vanos a hacerlo fácil. Si me dais a Raptor, nos iremos sin haceros nada. Sino, tendremos que hacerlo a la fuerza.
Señor X: Vosotros elegís.
Mike: Por las malas. Vamos a pelear.
Sparta: Pero ¿no sería mejor dárselo y ya?
Trolli: ¡No!
Trolli le pegó en la cabeza a Sparta y, luego, cogió al Hacker como si le diese un abrazo para retrasarlo.
Hacker: ¿Por las malas? Yo hubiese preferido por las buenas.
Nightmare: Son fáciles. Podemos con ellos.
Nightmare creó un portal que echó a Mayo y a Ela fuera del autobús y, luego, usó su espada para darnos miedo. Una cosa que sabíamos de estos villanos era que nunca nos hacían daño de verdad, por lo que se convertían en unos villanos pésimos.
Lyna: ¡Agachaos!
El tridente pasó por encima de nuestras cabezas, peinándonos. Los villanos no nos harían daño, pero Satana sí. In-Victor y Timba cogieron a Mikecrack.exe como pudieron, de nuevo abrazandolo pero con la sombra de In-Victor. Timba le electrocutó.
Mike: Hay que ir a por Nightmare. Señor X no es peligroso.
Señor X: ¡Oye! Que yo también soy peligroso.
Nightmare se río de él pero se lo tomó muy en serio, por lo que se tiró contra Sparta y le dio una patada en la barbilla.
Satana: Trixy, tú también tienes que hacer algo.
Le estaba hablando al monstruito que estaba encima de su cabeza. Era algo que volaba. Tenía en la cabeza algo negro puntiagudo como un gorro y una cola muy larga de demonio. Me acababa de dar cuenta de que también tenía un ojo de cada color. No parecía ningún peligro, más bien, era adorable.
Señor X: ¡Satana estamos en serio! No mandes a tu mascota a que muerda a un héroe.
Satana: Yo también estoy en serio, esclavo. Como si Trixy no fuese peligroso.
Acenix: Si es un bichito de nada. Si tuviese hambre me lo podría comer. No puede hacernos daño.
Satana: ¿Qué no?
En ese momento, el adorable bicho se transformó en la peor cosa que pude haber visto. Abrió tanto la boca que cabíamos dentro y estaba llena de blancos y rojos y afilados dientes. ¡Esa cosa no era adorable en absoluto! Entonces, vino directamente hacia nosotros.

Los nuevos héroes. (#Compas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora