10.- No quiero ser tu amigo

322 36 9
                                    

- ¡¿Puedes irte, por favor?! - Alec eleva la voz verdaderamente molesto y yo solo puedo quedarme quieto, a un paso de salir de la cocina - ¡No necesito esto, Jace! ¡No necesito escuchar una y otra vez las mismas estupidecez! ¡Fuera! -

- ¡No me iré! Si piensas que voy a quedarme sentado a mirar como te utilizan estas muy equivocado -

- ¡Para! Necesitas detenerte -

- Confia en mi - le pide, sosteniendo su mano al acercarse y yo no puedo más que sentirme derrotado por esto, quería contarle a Alexander sobre mi padre... sobre Sebastián, pero no quería sentirme presionado por esto quería sentirme emocional y físicamente capaz de hacerlo. No lo sentía, con Jace presionando para que acabe con lo que tenemos no podía sentirlo.

- ¿Como lo hago? ¿Como lo hago si no puedes apoyarme en algo simple como esto? - su tono expresa dolor.

- Te quiero Alexander, lo único que hago y he hecho todo este tiempo es cuidar que estés bien, me preocupo por ti -

- Y te lo agradezco, pero esto no resuelve nada -

Esto estaba mal, amaba ver al Lightwood defendiendome, él ni siquiera dudaba de mi o trataba de sacarme la verdad del porque Jace decía todo eso de mi, pero no quería arruinar lo que tenían, son hermanos al fin de cuentas y eso es muy importante.

Yo daría lo que fuera por ver a los míos, saber como están.

Lo peor para mi era que apesar de los insultos o los maltratos lo entendía. Entendía porque me odiaba, entendía porque se preocupaba tanto por el pelinegro, conocía los rumores sobre mi, ya no eran tan frecuentes pero siempre estaban ahi.

- Escucha, eres mi hermano y te quiero, sin embargo, por primera vez en mucho tiempo hay alguien que me gusta... alguien de quien tal vez pueda llegar a enamorarme, alguien con quien espero un futuro -

Si fuera otro momento mi corazón abría latido con más fuerza, abría toma la manos de Alec entrelazando nuestros dedos para después besar sus cálidos labios y decirle exactamente las mismas palabras. Qué anhelo lo mismo.

- ¡¿Es que no lo ves?! - Jace ríe alzando todavía más la voz - Solo te esta usando, lo único que quiere de ti es sexo y sabe qué si esta contigo nadie puede lastimarlo en la escuela. No eres más que un objeto que puede manipular a su antojo -

- No es así -

- ¡¿No?! ¿Realmente crees que esta enamorado? Piensa nada más en el día que fuiste por él, como es que se te abalanzó, o en aquel otro día en que casi lo molestan y lo defendiste - se que habla de él, después de que le dije lo que pensaba Jace trato de golpearme pero Alec llego en ese momento - No eres nada para él -

- ¡Cállate! No sabes de lo que hablas -

- ¡Claro que lo se! Todo el mundo lo sabe -

- No me interesa - reprocha apretando sus puños, tratando de contenerse. Justo ahora, mi mayor miedo era que comenzarán a pelear de verdad, no podría hacer nada ante dos hombres imponentes como ellos. Solo pedía que fuera una simple discusión - Lo que todo el mundo piense me importa una mierda, mientras conozca al verdaderos Magnus absolutamente todos pueden tragarse sus palabras -

- Él no te merece, el no te ama - se acerca un poco más con voz suplicante - No como yo -

Mi corazón se detiene, mi aliento se corta y siento como me duele el pecho. Trato de procesar sus palabras, pensando en si realmente escuche con atención esas palabras, si esto no es más que una horrible broma.

Alec esta estático en su lugar, sus ojos están tan abierto que casi parecen salirse de sus cuencas, casi. Sus manos se suavisan y se ve tan sorprendido como yo, tan perdió como yo.

La persona correcta - MalecDonde viven las historias. Descúbrelo ahora