10 de febrero
"Siempre para ti"
Arabella
Una semana,una semana había pasado desde que la mayor traición había sido presente ante mis ojos.No voy a decir que lo había pasado bien, porque a decir verdad estaba hundida. Fatalmente hundida.
Me la pasaba en mi habitación. Llorando, recordando,analizando y cuestionandome. ¿Por qué? ¿Qué había hecho mal como para que Austin me haya traicionado de esa manera?
Mis ojos rojos ardían de tanto llorar, mi pecho dolía y sentía como un vacío. Nada me había destruido de tal forma desde lo que paso con Eila.
Austin había intentado llamarme y mandarme mensajes los últimos días. Pero mi confianza en el estaba completamente rota, no podía ni siquiera cruzarmelo. No quería.
No odiaba a Austin, pero me engañaba a mi misma diciendo que él me quiso, que él si me considero su amiga. De esa manera aliviaba el dolor que estaba sintiendo.
Dustin... bueno no había ido al muro durante los últimos días, así que no sabia mucho de él. Sólo que había estado llamándome, pero en este momento era un desastre.
...
Mi cabeza dolía demasiado, y el vacío que sentía era insoportable. Decidi tomar un baño, para tranquilizarme.
Tome mis cosas y fui al baño.
Me saque el pijama que llevaba puesto para entrar a la ducha.El agua comenzó a caer sobre mis hombros, nose si estaba fría o no, realmente no lo sentí. Mis lagrimas se mezclaban con el agua que caía de la ducha.
Y ese recuerdo inundó mi mente de nuevo. Recordé como había descubierto que una de las personas que más adoraba en este mundo era un completo farsante, y por dios, dolía tanto recordarlo.Salí de la ducha, me cambié y volví a mi cama. Aún con la toalla en la cabeza.
Me senté en el respaldo de la cama y me quedé mirando a la nada, como si pensara en muchas cosas. Aunque en realidad sólo pensaba en que quería morirme.
Dos golpes en mi ventana fueron necesarios para sacarme de ese trayecto. Era muy raro, es decir mi ventana no daba a ninguna parte especial del castillo, y específicamente en esa parte nunca había nadie.
Me levanté y fui hacia la ventana para revisar que no pasara nada malo. Pero cuando llegué reconoci esos ojos grises, los reconocería a millones de kilómetros de distancia.
Espera ¿qué hacía él aquí?
Abrí la ventana cuidadosamente, Dustin me miraba con una sonrisita inocente.
-¿Qué haces aquí? ¿Cómo llegaste?- pregunté susurrando mientras me apoyaba sobre el marco de la ventana.
-Bueno, si me dejas subir te explicó- contestó el alegre.
-¿Qué estas loco? ¿Cómo se supone que- antes de que terminara mi pregunta mostró una escalera que había precisamente al lado de mi ventana.
Después de pensarlo por algunos segundos, acepté y lo dejé entrar. Subió cuidadosamente por la escalera. Traía una mochila consigo.
Finalmente lo dejé pasar, apenas estuvo dentro cerré la ventana con desconfianza.
Me di la vuelta para mirarlo, el me sonrió y note como disimulada la cara de preocupación que tenía.-¿ahora me puedes responder?- dije nerviosa sentandome en mi cama.
Se quitó la mochila y se sentó en la silla que estaba frente a mi cama.
-Bueno dado el hecho de que no respondías mis llamadas, no ibas a los encuentros y después de lo que paso. Quería... quería saber cómo estabas.

ESTÁS LEYENDO
Nuestro brillo
Novela JuvenilCriada para ser la chica perfecta en todo, creció en un mundo donde siempre le dejaron en claro que no merecía nada bueno, que nunca lograría brillar y ser querida por alguien. El... el chico carismático que contagiaba alegría a su paso , le gustab...