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-¡Te juro por Dios que si sigues tomando agua salada vas a quedarte sin estómago!- Aspen tomó a William por el cuello de su traje de neopreno mientras lo arrastraba a la orilla.

Resultó ser que el chico no sabía hacer surf en lo absoluto.

Pasó gran parte de su verano intentando enseñarle y ahora a tan sólo unas horas de partir a Philadelphia apenas había logrado que se mantuviera en pie sobre la tabla por unos buenos tres segundos.

O ella era una terrible maestra o el era un terrible alumno.

-¿A que hora sale tu vuelo?- le pregunto Will tomando su tabla y la de ella.

Aspen miró su reloj a prueba de agua -En seis horas- le dijo escurriendo su cabello.

-¿Vas a extrañarme?- le dijo la chica juguetonamente.

-No, en realidad no- le contestó Will de la misma manera.

El chico se había convertido en un gran amigo conforme pasaban las tardes juntos, a pesar de no tener nada en común ambos se encontraban siempre alrededor de el otro.

Su amistad simplemente no tenía explicación.

William Hill era la definición del perfecto atleta de secundaria, practicaba casi todos los deportes a la perfección y era capitán de todos los equipos.

Le gustaba el rock y sabía hablar neerlandés. Le invitaban a todas las fiestas y tenía una reputación respetable en su escuela.

Ambos llegaron a la casa del Abuelo Hallway y Will le pasó su tabla a Aspen. -Sólo no te olvides de mi- le pidió dándole un corto abrazo.

Cuando entro a la casa se encontró con su abuelo viendo televisión, se encontraba perfectamente, gracias a los cuidados correctos y a la fisioterapia de su padre. Su abuelo ahora se sentía mejor que nunca.

-¿Que tal te ha ido, cariño?- le preguntó su abuelo mientras le daba un beso en la mejilla.

-¡Las olas eran impresionantes!- le aseguró con una sonrisa en la cara.

(...)

El aeropuerto de Philadelphia estaba vacío cuando desbordaron el avión, la ciudad parecía ser la misma, le gustaba pero odiaba el clima.

El jardín de su casa estaba algo descuidado por los meses que pasaron fuera, ya lo arreglaría luego.

Aspen pasó toda la tarde ordenando su ropa, alguna había dejado de quedarle y algunas otras ya no eran su estilo. En california había encontrado muchas prendas con las que se sentía muy cómoda y guapa.

Tomó lo último que le faltaba de desempacar, una pequeña bolsa en donde guardaba algunos broches para el cabello y el anillo de Shawn.

Se lo había quitado por miedo a que lo perdiera en el mar, ahora ya no había ningún peligro, pero no estaba segura de querer usarlo.

-¡Aspen a cenar!- la chica suspiró antes de tomar su suéter de la cama y deslizar el anillo por su dedo.

(...)

-¡Aspen!- la chica fue tacleada por Cory cuando la vio en los pasillos de la escuela, habían pasado unas semanas, era el primer día de clases y la primera vez que veía a su amigo en meses.

-¡Tengo mucho que contarte! ¡Empezando por que Topanga y yo volvimos!- Aspen soltó una risa ante el entusiasmo de su amigo.

Por supuesto que ella ya lo sabía, Topanga la había llamado para contárselo, ambas pasaron un minuto entero gritando ¡Aspen sabía que eran el uno para el otro!.

Cory le conto todo sobre su viaje en carretera con Eric y Aspen le contó sobre su abuelo.

-¿Soy yo o creciste?- le dijo mientras buscaban a Topanga.

-No lo sé- le dijo Aspen girandose para buscar a su amiga pero lo que sucedió fue que se encontró cara a cara con Shawn Hunter.

Shawn no podía creer lo que veía, Aspen estaba enfrente de él, pero se veía diferente.

Era un poco mas alta, tenía un bronceado que hacía que su piel brillara, su cuerpo había cambiado, ella se veía... Shawn no podía decir en voz alta todos los adjetivos que se le ocurrieron para describir a Aspen.

-Hola- le dijo sorprendido.

-Shawn- le dijo Aspen.

-¿Cómo has estado?- le preguntó rascando su nuca.

Aspen suspiró antes de enredar sus brazos en su cintura para darle un abrazo tan corto que Shawn no tuvo tiempo para devolverlo.

-Me alegro de verte- le dijo sinceramente, Aspen estaba tomando el paso que necesitaba y dejar todo atrás.

Los tres amigos caminaban por el pasillo, riendo y hablando sobre cómics como en los viejos tiempos.

Hicieron una parada en el casillero de Topanga y Aspen sonrió cuando vio como sus amigos compartían un dulce beso.

Pronto sintió a alguien tapar sus ojos.

-¡Adivina quien soy!- esa voz...

Quitó las manos de sus ojos rapidamente encontrandose con William.

-¡Esto no es verdad!- le dijo lanzándose a sus brazos.

Ambos se abrazaron por un par de minutos causando confusión en Cory y Topanga y un piquetito de molestia en Shawn ¿Quién rayos era ese chico?.

-¿Cómo es que estás aquí?- le preguntó Aspen cuando se separaron.

-Mi papá tuvo una oferta de trabajo, era Philadelphia o Minnesota. Me dejaron elegir a mí  y aquí estoy-.

-¿Y por qué no me dijiste?- le preguntó Aspen golpeandole el brazo.

-¿Era una sorpesa?- le dijo -Además, se que no puedes vivir sin mí-.

-Ya quisieras-.

Aspen presentó a su nuevo amigo y cuando Shawn estrecho su mano lo hizo con un poco mas de fuerza de la que era necesaria.

N/A

Holaaa :))

California Girl (Shawn Hunter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora